Primeros cruces entre Lacalle y la oposición por acto religioso y ajuste de tarifas

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Dirigentes del FA y colorados critican que Presidencia divulgue participación de Lacalle en ceremonia religiosa

La Secretaría de Comunicación de Presidencia de la República divulgó la participación de Lacalle Pou en esta instancia y compartió la publicación a través de sus cuentas en las redes sociales.
El lunes, en su primer día de mandato, el presidente Luis Lacalle Pou asistió a una «oración interreligiosa por la patria al inicio de un nuevo gobierno» que se realizó en la Catedral Metropolitana, según se detalló en la página de Facebook de la Iglesia Católica de Montevideo.

A la salida, en rueda de prensa, Lacalle Pou sostuvo: “Toda celebración, sea laica o religiosa, que tienda a unir a los uruguayos, a la tolerancia, es bienvenida”.

El presidente añadió en ese momento que “laicidad no significa no creer o no tolerar o no ser bienvenidas las religiones”.

La Secretaría de Comunicación Institucional de Presidencia de la República divulgó la participación de Lacalle Pou en esta instancia y compartió la publicación a través de sus cuentas en las redes sociales.

Esto provocó la crítica de varios dirigentes del Frente Amplio y también del Partido Colorado, que rechazaron que el gobierno difundiera por un canal oficial esta actividad.

El diputado colorado Ope Pasquet fue uno de los que lamentó la decisión. “Me parece que estas no son las cosas que unen a los uruguayos, como dijo Lacalle Pou a la salida. Estas cosas nos plantean nuevas divisiones, porque vamos a volver a discutir el concepto de laicidad. Esto se traduce en eso: nos están proponiendo una resignificación del concepto de laicidad, qué significa, qué no significa, qué es laicidad, qué es en cambio laicismo”, planteó Pasquet en el programa “No toquen nada” de Del Sol FM este martes.

Otros recurrieron a sus redes sociales para plantear su rechazo.

El País


Primer cruce entre el gobierno de Lacalle Pou y el FA en la oposición es por tarifas públicas

Dos días después de asumir el nuevo gobierno de Luis Lacalle Pou y la coalición multipartidaria se produce el primer cruce y polémica con el Frente Amplio, ahora en la oposición.

 

El director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) el colorado Isaac Alfie le envió una nota a los directorios de las empresas públicas pidiendo información de costos y paramétricas con el fin de decidir en los próximos días el ajuste de las tarifas públicas. Les dio dos días de plazo para tener la información en su despacho.

La información solicitada suele ir acompañada de una sugerencia acerca de la necesidad o no de aumentar las tarifas en función del incremento de los costos que tuvo la empresa pública en el último año. Se trata de ANCAP, UTE, OSE y ANTEL.

Este pedido de Alfie sorprendió y molestó a los actuales directores de estas empresas públicas y al Frente Amplio en general.

Es que los directorios están conformados en su mayoría por jerarcas del Frente Amplio que aún cumplen funciones. El gobierno aún no designó nuevos directores.

El FA, ahora en la oposición, entiende que no debe participar en el proceso de decisión de ajuste de tarifas. Advierte que eso es resorte exclusivo del nuevo gobierno y que los directores frenteamplistas de las empresas públicas no deben participar.

El Secretariado Ejecutivo del FA se reunió este martes con varios de los directores frenteamplistas de las empresas públicas y resolvió que no responderán al pedido de información de la OPP.

Incluso evaluaron la posibilidad de que los jerarcas dejen sus cargos y se vayan de las empresas públicas que dirigen si el gobierno insiste con el pedido de información, dijeron a Subrayado fuentes políticas de la coalición de izquierda.

Al finalizar la reunión el Secretariado del FA emitió un comunicado. Allí señala “que desde el 1º de marzo del corriente hay un nuevo gobierno en el país, el que tiene la potestad y la obligación de tomar las decisiones político institucionales correspondientes a la gestión de las empresas públicas”.

En ese entendido expresa “su preocupación por la falta de señales para el nombramiento de los nuevos directorios de las empresas públicas”, que hasta el momento no se han designado y que además requieren de acuerdo y venia del Senado.

El FA sostiene que “es diferente seguir integrando los directorios mientras se tramitan las venias para no dejar las empresas desprotegidas, a asumir la gestión desde la nueva política pública, que no conoce y que no le corresponde definir al Frente Amplio”.

En este sentido el FA “respalda absolutamente la gestión de los directores actuales “y las decisiones que tomen en el sentido de este comunicado”.

Por último el FA recuerda “que existen mecanismos normativos que permiten sustituir temporariamente a los directorios actuales antes del nombramiento definitivo con las venias correspondientes, sin perjuicio de señalar que todos los cargos están a disposición del actual Poder Ejecutivo”.

Este tema ya había provocado choques entre la coalición multipartidaria de Lacalle Pou y el entonces gobierno del FA cuando se decidió no subir las tarifas en enero (como ocurre todos los años) y dejar que el nuevo gobierno decida sobre el inminente aumento.

Subrayado


Lacalle Pou participó en la “oración interreligiosa” convocada por el cardenal Sturla

El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, participó junto con su prosecretario, Rodrigo Ferrés, y el secretario Álvaro Delgado, de la convocatoria que hizo el cardenal y arzobispo de Montevideo, Daniel Sturla, a fin de reunir a representantes de distintas denominaciones religiosas y líderes políticos para rezar por el nuevo gobierno.

“Todas las iniciativas a favor de la nación y del país son bienvenidas, las religiosas, las laicas, todas”, dijo el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, en el ingreso a la Catedral Metropolitana de Montevideo, este 2 de marzo, antes de la “Oración interreligiosa por la patria”.

También estuvieron presentes ministros, legisladores, miembros del cuerpo diplomático y representantes de varias denominaciones religiosas.

Además del cardenal Sturla, estuvieron presentes el presidente de la Conferencia Episcopal del Uruguay el obispo de San José, Arturo Fajardo; el pastor Jerónimo Granados, ministro de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata; el obispo Daniel Genovesi, Iglesia Anglicana del Uruguay; pastor Pedro Lapadjian, Iglesia Evangélica Armenia; Daniel Dolinsky, rabino de la Nueva Congregación Israelita del Uruguay (comunidad judía) y Max Godet, Gran Rabino de la Kehila (comunidad judía).

Espaldarazo de las iglesias

Al salir de la actividad, Lacalle Pou manifestó su apoyo a cualquier manifestación laica o religiosa que tienda a “unir a los uruguayos” y a “darle un empujón a los que menos tienen y a los más desvalidos”.

De esta forma las distintas denominaciones religiosas presentes en el Uruguay manifiestan su apoyo al gobierno. La única que no decidió participar de esta cita fue la Iglesia Metodista del Uruguay, que emitió un comunicado rechazó asistir porque entienden que se viola la laicidad del Estado y criticaron a la Iglesia Católica por estar “alejada de Dios”.

La Red 21


Presencia de Lacalle en acto religioso «rebasa un límite que no se había pasado»

El presidente Luis Lacalle Pou y buena parte de su gabinete de ministros, así como dirigentes de la coalición multicolor, participaron en la noche de este lunes de una celebración multi-religiosa en la Catedral de Montevideo, en la plaza Matriz.

El acto fue encabezado por el cardenal de Montevideo Daniel Sturla, quien fue el encargado de recibir al presidente en la puerta y acompañarlo hasta su silla.

«Laicidad no es laicismo, es no tener una religión oficial, no significa no tener una creencia», dijo Lacalle al salir de la ceremonia donde pastores, rabinos y obispos rezaron una oración por el presidente y el nuevo gobierno.

La convocatoria religiosa no estuvo exenta de polémica. La Iglesia Metodista se negó a participar pese a recibir la invitación, aduciendo que afecta la laicidad y porque «no existen antecedentes de celebraciones religiosas de este tipo», lo que «puede dar a entender que se jerarquiza una corriente sobre otras».

La participación de representantes del gobierno en esta oración interreligiosa fue criticada por organizaciones que abogan por la laicidad y también por políticos.

Víctor Rodríguez Otheguy, de la Asociación Uruguaya de Libre Pensadores, dijo a Montevideo Portal que la misa fue una clara violación de la laicidad (y por lo tanto una transgresión de la Constitución) y rebatió el argumento de Lacalle. «Laicidad y laicismo son conceptos relacionados. Laicismo es la concepción que sustenta el principio de laicidad. Tan es así que el diccionario de la RAE, institución a la que no se puede tildar de antirreligiosa, señala ambos conceptos como relacionados íntimamente. Y expresa que se establece una separación entre Iglesia y Estado», dijo.

Dijo además que no importa que en la misa hayan participado varias religiones porque la Constitución establece que el Estado no sostiene a ninguna religión. «Es una estrategia de Sturla para presentar la ceremonia como algo que trasciende a la Iglesia Católica, pero es indistinto a los efectos jurídicos si es una o varias iglesias», agregó.

El hecho de que «un representante o jefe de Estado, con buena parte del gabinete y cargos oficiales, tuvieran sus lugares reservados en primera fila, le da carácter oficial». «Cuando los oradores hacían uso de la palabra se referían al señor presidente de la República. No corresponde la presencia del presidente como tal. Es el jefe de Estado, y como tal, lo representa siempre. Es presidente en cualquier circunstancia y lugar, no es un trabajo part-time», apuntó Rodríguez.

«Como muestra de todo ello», agregó, «la página de la Presidencia publicó la asistencia del presidente, sus ministros y secretarios de Presidencia, inclusive haciendo un reseña y publicando fotos». «No se trata de un hecho privado, es un hecho oficial», remarcó, lo que agrava la situación.

Recordó que el propio Sturla comentó a la prensa que este tipo de convocatorias se hacía en el siglo XIX. «Obviamente, no había entonces separación de Iglesia y Estado», dijo el miembro de la AULP.

Rodríguez consideró que si bien todos los actos violatorios de la laicidad son graves (la AULP ha denunciado varios en los últimos años), «este quizá es más grave que otros porque rebasa los límites hasta el momento, rebasa todos los límites». «Desde el punto de vista conceptual y simbólico se pasa una línea que hasta ahora no se había pasado. En el 90 Luis Lacalle Herrera participó de una misa pero cuando era presidente electo, antes de asumir. Es la primera vez que un presidente participa como tal en una ceremonia especial», comentó.

Un comunicado firmado por organizaciones en defensa de la laicidad será publicado en el correr del día, con críticas a lo ocurrido anoche.

Tiendas políticas

El excandidato a senador José Franzini Batlle, líder de Avanza País , también se mostró muy crítico con la misa. «Por primera vez desde aprobada la Constitución de 1918, un presidente asume la Presidencia y asiste a una misa de oración por la patria. Violación clara de la laicidad y claro, también, retroceso en la libertad de convicciones espirituales individuales. El Estado no sostiene religión alguna», escribió.

«Sorprende que hasta la Iglesia Metodista se alarma por la violación a la laicidad de un presidente asistiendo a una misa y el sistema político no dice nada. Sorprenden, aún más, ‘los batllistas’ del Partido Colorado. Nada, cómplice silencio», prosiguió.

También hizo un comentario sobre la declaración de Lacalle sobre laicidad y laicismo. «Increíble cómo se repite el latiguillo de ‘una cosa es laicidad y otra laicismo’. Como si hubiera diferencia entre católico y catolicismo», dijo.

Montevideo Portal


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