Alberto Fernández cierra en Francia su gira europea en busca de apoyo frente al FMI
Alberto Fernández desayunó con empresarios franceses y dialoga con el reconocido economista Thomas Piketty antes de reunirse con Macron
Por Román Lejtman
Alberto Fernández ya se encuentra en París donde se reunirá con el presidente de Francia, Emmanuel Macron, en el último punto de su gira por cuatro países europeos (viene de Italia, Alemania y España) en busca de apoyos internacionales para sostener su estrategia de proponerle al FMI una postergación de los vencimientos de la deuda hasta fines de 2023.
Hasta ahora, el jefe del Estado logró significativos apoyos por parte del primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, y el presidente Sergio Matterella, luego de la canciller alemana, Angela Merkel y ayer, del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, y del rey Felipe VI.
El deseo presidencial es que Macron cierre la cadena de éxitos diplomáticos que ya enhebró en Italia, Alemania y España. Macron ya escuchó la estrategia de Alberto Fernández sobre la deuda externa y no presentó objeciones. El presidente de Francia cree que el FMI debe modificar su lógica de organismo multilateral ante los países emergentes y, además, asume que una nueva crisis política y económica en la Argentina puede afectar los negocios que las compañías francesas tienen en el país.
A la misma hora que Alberto Fernández almuerce en París con Macron, el ministro de Economía argentino, Martín Guzmán, estará compartiendo un seminario en El Vaticano con Kristalina Georgieva, directora ejecutiva del FMI. Ambos ya se reunieron durante dos horas y media en la embajada argentina en Roma.
Georgieva ya habló con Alberto Fernández y Guzmán, y en ambas conversaciones se mostró interesada en la perspectiva de honrar la deuda, postergar los pagos y evitar un fuerte plan de ajuste para permitir que la economía nacional crezca sin interferencias ni limitaciones.
La agenda del Presidente y su comitiva en la capital francesa comenzó con un desayuno en la embajada argentina con una treintena de directivos de empresas, quienes le manifestaron su preocupación por las restricciones que impuso el Ejecutivo a las operaciones con moneda extranjera, y que les impide girar utilidades. “Con Macri vivimos un 2001 por goteo”, les contestó Fernández.
Entre los empresarios y altos ejecutivos presentes se destacan Anne-Marie Couderc, CEO de Air France-KLM; Eric Scotto, presidente de Akuo Energy; Thierry Best, Chief Commercial Officer de Alstom; Christian Peugeot, presidente del Comité de Fabricantes Franceses de Automóviles; Mme Virginie de Chassey, directora de Comunicación de Eramet; Denis Simonneau, Delegado General de Relaciones Institucionales de L’Oréal; Patrick Martin, vicepresidente de Medef; Eric Le Corre, Director de Relaciones Públicas de Michelin; Alexandre De Rothschild, Presidente Ejecutivo de Rothschild; Marion Paradas, vicepresidenta de Relaciones Institucionales de Thales; y Jean Claude Mallet, Director de Asuntos Públicos de Total.
Al termino del desayuno de trabajo, en uno de los salones de la elegante residencia, el Presidente mantuvo encuentros breves –por separado– con los representantes de Total y L’Oréal.
Desde las 11.30 (7.30 de Argentina) Fernández dialoga con el economista Thomas Piketty, cuyo último libro se llama “Capital e ideología”, en sus oficinas en el Center for Economic Policy Research.
A las 13.20 hora local (9.20 en nuestro país), el mandatario argentino y su comitiva se dirigirán hasta el Palacio del Elíseo, sede de la Presidencia de Francia, donde, después de posar para la foto oficial, los jefes de Estado mantendrán un encuentro privado y más tarde, con sus respectivas delegaciones, participarán de una recepción a la que también asistirán argentinos que se radicaron en París y se destacaron en las artes, la ciencia y el deporte. A su término está prevista que hagan una declaración conjunta.
Desde allí, el presidente argentino tendrá un encuentro con el politólogo francés Alan Rouquié, un especialista en América Latina que ha estudiado el peronismo y el rol de los militares en la Argentina. Algunos de sus libros son El siglo de Perón. Ensayo sobre las democracias hegemónicas (2017), Poder militar y sociedad política en la Argentina (1981) y El Estado militar en América Latina (1984).
Más tarde se trasladará al Instituto de Estudios Políticos de París, conocido como Sciences Po, donde será el orador principal de una conferencia para estudiantes del lugar y cuyo título es «¿Qué futuro para las relaciones entre América Latina y Europa? La perspectiva argentina”.
Antes de dar la charla se reunirá con los titulares de la Asamblea de Ciudadanos Argentinos en Francia, que en enero de 2018, ante la visita de Mauricio Macri a ese país, había considerado en una carta abierta que el presidente argentino provocó “una regresión democrática” y “una deriva autoritaria”, a la vez que reclamó «la libertad de Milagro Sala y de todos los presos políticos”.
Tras dar la conferencia, Fernández mantendrá un encuentro con directivos de la petrolera francesa Total y a continuación posiblemente dialogue con el alto representante de la Política Exterior de la Unión Europea (UE), el español Josep Borrell, quien tiene intenciones de desplazarse desde Bruselas a París para reunirse con él, aunque tampoco se descarta que mantengan una videoconferencia.
Mañana jueves, Alberto Fernández se reunirá con organismos de derechos humanos, encuentro al que se sumará la ministra de Justicia, Marcela Losardo, y luego mantendrá una reunión bilateral con directivos de la multinacional francesa de minería y metales Eramet, que busca financiación para desarrollar un nuevo proyecto de litio en Argentina. A las 18.30 local (14.30 argentina) el canciller Felipe Solá se verá con su colega francés, Jean-Yves Le Drian.
La llegada a Buenos Aires del Presidente y su comitiva está prevista para el viernes.
Fernández recibió el apoyo de España para la renegociación de la deuda
El presidente Alberto Fernández agradeció el “sincero apoyo que España brinda a la Argentina”, en un posteo que hizo en su cuenta de la red social Twitter tras reunirse con el rey Felipe VI de ese país.
“Tuvimos una muy buena reunión con el rey Felipe VI, en la que conversamos sobre diversos temas que nos preocupan”, escribió el jefe de Estado y manifestó: “Le agradezco el gesto de recibirme y el sincero apoyo que España brinda a la Argentina. Espero que podamos profundizar este fructífero diálogo”.
Fernández se reunió en las primeras horas en Madrid con el jefe del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, quien respaldó de forma explícita sus planes para renegociar la deuda con el FMI, un gesto que confirma la sintonía política que acompañará la relación bilateral.
De ese modo, España se sumó a Alemania e Italia, países que ya expresaron su apoyo a la estrategia del gobierno frente al FMI durante la gira europea que el presidente inició el viernes último y que espera poder cerrar con éxito en Francia, donde mañana se reunirá con el presidente Emmanuel Macron.
Fernández hizo una visita fugaz pero necesaria a España, que tuvo un fuerte contenido político, al incluir una audiencia con el rey Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela, y el anuncio de que el dirigente radical Ricardo Alfonsín será el nuevo embajador de Argentina en Madrid, sucediendo así en el cargo al peronista Ramón Puerta.
A partir de gestiones previas se daba por hecho que España iba a acompañar la estrategia de negociación de Argentina ante el FMI, que pasa fundamentalmente por conseguir un aplazamiento de los vencimientos -capital e intereses- sin aceptar imposiciones por el parte del organismo.
Los mandatarios mantuvieron un encuentro a solas durante cincuenta minutos en los que pudieron repasar la relación bilateral, la situación económica del país y la crisis política y social que atraviesan varios países de América Latina, entre otras cuestiones de interés común del ámbito internacional. Luego almorzaron y conversaron en una mesa ampliada que incluyó al diputado y ex embajador de Argentina en el Vaticano Eduardo Valdés y al secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello.
“Tenemos que crecer para poder pagar” fue el mensaje que Fernández defendió ante Sánchez, al igual que hizo con anteriores interlocutores políticos durante su gira europea, según fuentes de la delegación.
Sánchez, quien desde enero preside un gobierno de coalición español entre su Partido Socialista (PSOE) y la fuerza de izquierda Unidas Podemos (UP), comparte esta visión, ya que entiende que a un país como Argentina no se le pueden imponer medidas que puedan lastrar el crecimiento y profundizar su crisis económica y social.
Pero además del gobierno de Sánchez, el rey sigue muy de cerca el desarrollo de la crisis económica y financiera que atraviesa Argentina, al ser España el primer inversor europeo en el país y el segundo a nivel mundial, después de Estados Unidos.
Es por eso que Fernández fue recibido por Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela en una audiencia de la que también participó la ministra de Asuntos Exteriores de España, Arancha González Laya, y el subsecretario de Asuntos Iberoamericanos, Rafael Garranzo. Ante él presentó la designación de Ricardo Alfonsín como el nuevo embajador argentino en España.
El Senado sancionará la ley para reestructurar la deuda
El proyecto de Restauración de la Sostenibilidad de la Deuda Pública Externa entra en la recta final. Ayer por la mañana, la comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado emitió dictamen favorable al texto que ya tiene media sanción de Diputados y el miércoles la iniciativa que impulsó el Poder Ejecutivo se convertiría en ley. La oposición ya adelantó su acompañamiento en el recinto, aunque pidió mayores precisiones del plan macroeconómico del Gobierno y apuró la sanción del Presupuesto 2020.
Luego de que se integrara la Comisión de Presupuesto y Hacienda, que quedó presidida por el cordobés Carlos Caserio, la mañana de ayer, Cristian Dellepiane, subsecretario Legal del Ministerio de Economía, presentó los principales lineamientos del proyecto que ya recibió media sanción en Diputados. “Cuando se pensó en enviar este proyecto al Congreso, se buscaba también el consenso y la publicidad que está teniendo este proyecto de ley. Y, de cara a una negociación, tener la norma con mayor rango legal disponible para esta operación”, argumentó Dellepiane ante la comisión que se reunión en el Salón Illia. Además, el funcionario agregó que, contar con una herramienta jurídica durante la negociación “es sumamente importante, como un respaldo para la negociación en sí, y como una muestra de una política de Estado, más allá de una mera política de Gobierno”.
El radical Luis Naidenoff fue uno de los que hizo uso de la palabra durante la reunión y anticipó que la principal bancada opositora, Juntos por el Cambio, acompañará la iniciativa. De tomas maneras, aclaró que “hay algunas cuestiones que son necesarias que los funcionarios puedan clarificar al Senado”.
Así, el formoseño les pidió a los funcionarios del Ejecutivo información respecto de “algunos lineamientos de este programa macroeconómico”. Además, consideró que “urge” el tratamiento del Presupuesto 2020. Y aseguró que, la Ley de leyes “muestra cierta solvencia a la hora de negociar con los acreedores”. De paso, consultó cuáles eran los montos nominales que “se pretenden involucrar en la negociación”.
Quien se encargó de responderle a Naidenoff fue el misionero Maurice Closs, quien estableció una comparación con la situación económica de 2016 y aseguró: “Estábamos hablando de un problema 10 veces menor”. En este sentido, aseguró que, ahora, esa deuda es de casi u$s 150 mil millones de dólares. «Ese es el monto que estamos discutiendo”, resumió. En rigor, la cifra es de u$s 142 mil millones.
Además, el ex gobernador de Misiones le pidió a la oposición el acompañamiento del dictamen que ya tiene media sanción, para luego anticipar que las negociaciones que el Ejecutivo deberá emprender con los acreedores “serán muy duras”. Para luego aclarar: “Buscamos evitar caer en default”.
Así como Naidenoff, el senador Julio Martínez también hizo hincapié en la necesidad de que el Gobierno envíe un proyecto de Ley de Presupuesto 2020. Y preguntó: “¿No creen que teniendo el presupuesto no es una hoja de ruta que el país tendría para ir a negociar?”.
Como respuesta a este planteo, desde el oficialismo dijeron que la Ley de leyes recién se enviará al Congreso “una vez que se sepan las pautas de la negociación”, es decir, una vez que haya “certezas” en torno a las negociaciones de la deuda. Así, echaron por tierra la posibilidad de presentar un texto antes de que el Ejecutivo se embarque en las negociaciones.
Los próximos pasos
Además de la sesión de hoy, convocada para las 10, en la que el oficialismo ya da por descontado que la ley sobre deuda será sancionada con un respaldo unánime, el Congreso se prepara para recibir al ministro de Economía Martín Guzmán. En este sentido, desde el bloque Frente de Todos esperan la visita de Guzmán al Congreso con la Comisión Bicameral Permanente de Seguimiento y Control de la Gestión de Contratación y de Pago de la Deuda Exterior de la Nación “ya conformada”, entre los días 12 y 17 de febrero.
También, el Senado tiene en el tintero el tratamiento de la Ley de Góndolas, que ya tiene media sanción de Diputados. Desde el oficialismo, barajan la posibilidad de que el tratamiento de esta iniciativa sea el viernes 21, aunque aún resta confirmarlo.
A esto se le suma el tratamiento del pliego de Daniel Rafecas para el cargo de procurador general de la Nación. Esta tarde, se creará la comisión de Acuerdos que deberá tratarlo, y todo indica que será presidida por la camporista Anabel Fernández Sagasti.
Así, la mendocina tendrá la difícil misión de conseguir los 48 votos necesarios que, hasta el momento, el oficialismo no logró garantizarse. Si bien es cierto que el pliego aún no ingresó, desde el oficialismo aseguraron estar “conversando” este tema con los diferentes espacios. Es que, para la aprobación del pliego se necesita de los votos de las dos terceras partes de los presentes, es decir, 48 si es que nadie se ausenta.
Mientras que el bloque que lidera José Mayans tiene 40 bancas, sin contar la de José Alperovich, que se pidió licencia tras haber sido denunciado por abuso sexual, Juntos por el Cambio cuenta con 26. La semana pasada, el espacio opositor decidió que la posición de los senadores del Interbloque sobre Rafecas será unánime.