Ecuador: la escena latinoamericana llega al Festival de Artes Vivas de Loja

Por Daniel Cholakian – Nodal Cultura

Nuevamente la ciudad Loja será el escenario del más importante festival de artes escénicas que se desarrolla en Ecuador. Esta 4° edición del Festival de Artes Vivas (FIAVL) comenzará el próximo 15 de noviembre y tomará durante 10 días la ciudad, que históricamente ha dado la que mayor cantidad de artistas, músicos, intelectuales y literatos ecuatorianos.

Según Patricio Vallejo Aristizábal, director artístico del Festival, desde la primera edición el FIAVL buscó anclarse en el arte escénico latinoamericano. Al mismo tiempo, convocando a artistas de toda la región, se busca que las propuestas ecuatorianas adquieran visibilidad para el resto de los actores del teatro, la danza, el circo y otras disciplinas de América Latina.

Ese diálogo, que es fructífero en términos creativos y culturales, este encuentro de tradiciones, que se están renovando sin necesariamente recorrer el camino de una modernidad vanguardista bajo el mandato europeo, es una de las claves para la organización del Festival.

Dentro de los espectáculos que llegarán desde el extranjero, seis de ellos provienen de países de América Latina. Serán de Argentina, Bolivia, Colombia, México, Perú y Uruguay. La selección realizada para esta 4° edición propone diferentes búsquedas temáticas y estéticas e incluso distintos modelos de producción.

Vallejo Aristizábal señaló que parte de la identidad de la escena regional es la convivencia de la estructura de grupos, que provienen de los orígenes del teatro independiente, con novedosas estructuras trasnacionales de producción, más los cruces interdisciplinares incorporados dentro de los espectáculos.

“Ahora perviven los grupos”, sostuvo Vallejo Aristizábal, “de hecho en esta programación está Teatro de los Andes de Bolivia, uno de los más reconocidos de la región. Pero también hay que ver cómo los jóvenes artistas latinoamericanos encaran la creación escénica: hay espectáculos como Canción para dueto, de Colombia, que lo dirige un joven coreógrafo, Jimmy Rangel, que es muy importante en la escena de su país. Él fue discípulo de mi compañía aquí en Ecuador e hizo una carrera muy interesante en EEUU y fue enriqueciendose. Hace algo que no existía en los ’70 o los ’80, que es una co-producción con el Teatro Colón de Bogotá y produce teatro físico, danza-teatro. También hay otras variantes, como el trabajo de Murgamadre de Montevideo, de dos personajes de la tradición popular uruguaya del carnaval y la murga, donde canto y la actuación se encuentran de una forma novedosa”.

Sin dudas Mar, de Teatro de los Andes de Bolivia, es una de las propuestas más importantes que se podrán ver en esta edición del FIAVL. Los trabajos del grupo están caracterizados por la creación colectiva, la búsqueda estética y la construcción de una poética atravesada por lo personal y lo histórico. Lo político en estado poético.

Mar es una obra de Arístides Vargas, dramaturgo y director argentino ecuatoriano, que habla de la usurpación de la salida al mar que Bolivia sufrió por parte de Chile en el siglo XIX. A partir de la idea mítica del mar perdido, pone en escena la añoranza por aquel recuerdo que nunca se vivió, así como las pérdidas colectivas y personales. Cuenta también la historia de la dominación de los sectores populares por parte de minorías desde un registro humorístico rayano con el absurdo. La poesía escénica, de una belleza poco común, demuestra como el arte puede pensar la historia de un modo crítico e inteligente.

La mencionada coproducción colombo-estadounidense Canción para Dueto, destacada por Vallejo, es la propuesta que trael el director bogotano Jimmy Rangel. Mezcla de silencio, música y humor surrealista, el desarrollo de escénico pone el cuerpo al borde del abismo. El escenario se construye poéticamente para un velorio eterno. Aquí el mar, mítico en la propuesta boliviana, es el marco para una vieja casa en medio de un solitario paraje. Allí sucederá una desbordada fiesta, donde una mujer se transformará en pájaro y un demente juego de apariciones y desapariciones se apoderará de todo.

Enlazadas con tradiciones de músicas populares se presentarán la peruana Suena Barrio y la uruguaya Murga Madre que, como su nombre indica, entronca con la tradición murguera del carnaval montevideano, así combina lo emotivo con el humor que se sostiene en un texto muy creativo.

Suena Barrio  recupera los ritmos  afroperuanos modernos a través de percusión con instrumentos no convencionales. Tres barrios de Lima dialogan y conviven a partir de sus particularidades sonoras, desde la cual se contarán los distintos comportamientos sociales, resaltando la solidaridad como su mayor valor. Este es un espectáculo para toda la familia, tanto por su propuesta estética como su narrativa.

También es un espectáculo para toda la familia la obra mexicana Uma de papel del grupo La Covacha Teatro. Uma es una niña de papel que, con la ayuda de su perro llamado Yuyu, descubrirá cómo reconocer y nombrar todo lo que siente y así conducir su propia emoción. El mundo de papel de Uma cambia de color, consistencia, dimensión y hasta textura, dependiendo de la emoción que habite en su corazón. La dramaturgia es de imágenes y acciones, sin palabras.

Para el cierre del FIAVL se reservó la producción argentino-española ¡“Voalá Station”!, creada por los argentinos Roberto Strada (desarrollo visual) y Gastón Iungman (musica). La obra es un espectáculo aéreo desarrollado a 30 metros de altura, donde lo acrobático y lo visual son el registro para contar la historia de 4 ejecutivos que pierden el último tren de la noche, demorados por una mendiga que les regala una flor. Son cautivados por ella y sus cómplices hasta hacerlos volar, convirtiendo esa noche pérdida en un momento inolvidable.

Así también los espectadores en el FIAVL, de la mano de la seducción de los espectáculos que llegarán a Loja, tendrán 10 noches que los cautivarán y harán de cada una de ellas una larga sucesión de momentos inolvidables.

Grilla de programación