Inicia en Brasil semana sobre el cambio climático en medio de controversia por deforestación de la Amazonía
La Semana del Clima de América Latina y El Caribe inicia este lunes en Salvador de Bahía, Brasil, en un contexto adverso debido a las políticas antiambientalistas del presidente brasileño Jair Bolsonaro.
En la cumbre, auspiciada por Naciones Unidas, se discutirán temas como la implementación regional de las metas del Acuerdo de París, así como impulsar la respuesta de la región al cambio climático.
? Este lunes 19 de agosto inicia en Salvador ?? la Semana del Clima de América Latina y el Caribe #LACClimateWeek.
Los planes de #AcciónClimática de los países deben ser más ambiciosos, si queremos detener un #cambioclimático desbocado, dice @PEspinosaC vía @CMNUCC. pic.twitter.com/6jAD2R2njb
— Programa ONU Medio Ambiente (@unep_espanol) August 18, 2019
El encuentro es propicio para pedir acciones más ambiciosas para hacer frente a la emergencia climática, previo a la Cumbre de la Acción Climática de septiembre en los Estados Unidos (EE.UU.) y de la Conferencia del Clima de Naciones Unidas (Cop 25), que el gobierno brasileño se negó a organizar y será en Chile en diciembre.
En el evento, que tendrá lugar hasta el 23 de agosto, se espera que acudan más de tres mil personas procedentes de 33 países.
La semana del clima antes de sus inicios ya estaba envuelta en polémica, debido a una primera cancelación hace tres meses por el ministro de medio ambiente de Brasil, Ricardo Salles, quien cambió de opinión y decidió la participación de su país a última hora.
Invertir en infraestructura resiliente a los impactos del #cambioclimático es invertir en seguridad y sustento para las personas????. La Semana del Clima de #AmLat y #Caribe impulsará la respuesta de la región ante la #emergenciaclimática.
▶️https://t.co/qeiOXh5PkM#ClimateWeekLAC pic.twitter.com/MPTB1zBhAA— ONU Cambio Climático (@CMNUCC) August 17, 2019
Asimismo, la celebración llega en un momento de gran controversia por el aumento de la deforestación en la parte de la Amazonía de Brasil, que provocó que Alemania y Noruega anunciasen el congelamiento de ayudas destinadas a la preservación de la selva, debido a las políticas del gobierno de Jair Bolsonaro.
De acuerdo a datos del Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil (Inpe) la deforestación destruyó 2.254 kilómetros cuadrados de la Amazonía brasileña el pasado julio, 278 por ciento más que los 596,6 kilómetros cuadrados del mismo mes de 2018.