Colombia: el presidente Iván Duque aseguró que «es difícil» proteger a los líderes sociales

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Duque reconoce que es «difícil» proteger a siete millones de líderes sociales

El presidente Iván Duque abogó por mejorar las medidas de protección colectiva y llevar a cabo acciones rápidas en casos específicos de amenazas en contra de la vida de estos actores. Habló, también, sobre la futura decisión de la Corte Constitucional sobre el uso del glifosato para la erradicación y el régimen de Maduro.

El presidente Iván Duque reconoció que es “difícil” proteger a los «más de siete millones de líderes sociales» que hay en el país. Por ello, ante el asesinato sistemático de 462 de ellos desde la firma del Acuerdo de Paz en 2016, según datos de la Defensoría del Pueblo, Duque abogó por mejorar las medidas de protección colectiva y llevar a cabo acciones rápidas en casos específicos de amenazas en contra de la vida de estos actores.

Así, ad portas de que llegue el siete de agosto, día en el que se cumple el primer año de este Gobierno, el presidente reafirmó su compromiso de ser «implacable para llevar a la Justicia a los criminales que han estado detrás de estos asesinatos”.

En una extensa entrevista con la agencia Efe, el mandatario también aseguró que el Gobierno de Nicolás Maduro no solo apoya a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), sino que además recluta a menores de edad con la anuencia del presidente venezolano y ayuda a las disidencias de las Farc.

Presidente, usted está próximo a cumplir su primer año de Gobierno, ¿cuál considera su mayor logro y su mayor frustración en estos meses?

Yo diría que logros son muchos. La economía colombiana en el 2017, antes de nuestra llegada a la Presidencia, creció apenas el 1,4 %, cerramos el año pasado con el 2,8 %. Este año aspiramos a estar por encima del 3,4 ó 3,5, llegando al 3,6 %. Eso nos pone por encima del crecimiento promedio mundial y del crecimiento promedio regional.

Por otro lado, creo que haber parado el crecimiento exponencial que tenían los cultivos ilícitos en el país es un logro muy importante. Nos falta hacer mucho más, desde luego, pero haber parado siete años de crecimiento a mí me parece también un logro importante.

Otros logros están en ver florecer los programas de emprendimiento, tener el primer centro de la cuarta revolución industrial en un país hispanoparlante, tener grandes compañías de tecnología en nuestro país y ver el interés de los grandes fondos de capital por los emprendedores colombianos. Eso es algo importante en los sistemas de emprendimiento que estamos creando.

Ahora, en materia de equidad, está el tema del acceso a la educación. Ahí, por ejemplo, tenemos cerca de 40.000 estudiantes que están yendo gratuitamente, becados, a universidades públicas. Ver que ya tenemos cerca de 50.000 familias que han encontrado el mejoramiento de sus viviendas, que ya tenemos más de 100.000 inscritos en un programa para que las familias se bancaricen, dejen de ser arrendatarios eternos y se conviertan además en propietarios.

Entre otras cosas, el salto a las energías renovables no convencionales es un logro también destacable. Teníamos 50 megas cuando empezó nuestro Gobierno, y ya las duplicamos y aseguramos recursos para llegar a cerca de 1.400 megas.

Usted no tiene una mayoría en el Congreso y eso le ha dificultado el trámite legislativo de sus proyectos. ¿Puede gobernar los tres años que faltan sin ese apoyo?

Se ha logrado trabajar con el Congreso y han salido leyes. Podemos contar más de 16 leyes que han tenido o iniciativa del Gobierno o el acompañamiento del Gobierno, eso es un balance importante. Miremos los proyectos: la ley de carros eléctricos, la ley de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Ley TIC), la ley del veterano, la ley de reactivación económica, el Plan Nacional de Desarrollo, el fortalecimiento de la Superintendencia de Salud. En fin, hay proyectos que son importantes y de gran impacto que también han salido, y por supuesto, lo que nosotros queremos todos los días es seguir mejorando el entendimiento con el Congreso de la República.

Usted ha recibido muchas críticas por la implementación del acuerdo de paz y la semana pasada, con ocasión de la visita del Consejo de Seguridad de la ONU, la FARC dijo que su discurso está distanciado de los hechos. ¿Qué está ocurriendo realmente? ¿Qué opinión le merece esa afirmación?

A mí me gusta que usted haga referencia a la visita del Consejo de Seguridad porque yo entiendo y respeto las opiniones de los partidos políticos. Pero, el Consejo de Seguridad que estuvo acá pudo darse cuenta cómo vamos avanzando en lo que para mí representa algo muy importante y es acompañar a las personas que genuinamente dejaron la violencia y van hacia la legalidad, a que puedan avanzar en su proceso de reincorporación. lleguemos a esas zonas del territorio que han sido expuestas y afectadas severamente por la violencia a lo largo de los años.

El Consejo de Seguridad se dio cuenta de los proyectos productivos, se dio cuenta de los asentamientos mejorando calidad de vida, se dio cuenta de las obras por impuestos, se dio cuenta de los planes de desarrollo con enfoque territorial y eso muestra que nosotros sí tenemos un compromiso con que esa reincorporación funcione, pero también se pudieron dar cuenta de que seremos y hemos sido implacables con quienes estén en la reincidencia.

En agosto vence el periodo de funcionamiento de los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación (ETCR) y algunos de ellos van a ser cerrados. ¿Cuál es el plan del Gobierno al respecto?

Hay cerca de 24 ETCR y están en proceso de transición hacia asentamientos productivos. Algunos seguirán en las zonas donde están, mejorando sus condiciones, y otros cambiarán de ubicación. Es algo que estamos haciendo de la mano con Naciones Unidas y de la Unión Europea. En el Gobierno buscamos que las personas puedan encontrar una forma sostenible de ganarse la vida a partir de desarrollos productivos, que tengan compradores para transformar su calidad de vida.

Sobre el asesinato de líderes sociales y de exguerrilleros de las FARC, la Fiscalía dice que se ha avanzado en investigaciones y en esclarecimientos, pero ese problema sigue preocupando dentro y fuera de Colombia. ¿Tiene el Gobierno cómo frenar la ola de asesinatos?

Cuando empezó este Gobierno, en mi discurso de posesión me referí a esa situación que se había presentado en los últimos meses antes de que yo asumiera, y dije que nosotros teníamos que enfrentar ese fenómeno. Cuando llegué a la Presidencia teníamos más de 200 asesinatos recientes y lanzamos el Plan de Acción Oportuna (PAO) y mejoramos la coordinación. En lo que va corrido de este año tenemos reducciones que pueden superar el 30 %, según informes del Consejero para los Derechos Humanos, amparado en la información de las Naciones Unidas.

¿Que si estoy contento con eso?, no, porque tenemos que seguir avanzando, pero hay una reducción.

Ahora, ¿qué nos toca hacer? Entender dónde se está presentando cada vez más ese fenómeno, que es en un grupo muy reducido de municipios, que han tenido influencia de grupos armados ilegales, que están en la coca o en la minería ilegal y que atentan contra los líderes porque los líderes quieren sacar a la comunidad de las economías ilícitas.

Eso también lo muestran los esclarecimientos de la Fiscalía y, por supuesto, mejorar los programas de atención, prevención y respuesta colectiva porque en Colombia hay más de siete millones de líderes sociales, según las 23 caracterizaciones que utiliza Naciones Unidas.

Solamente en líderes comunitarios, se consideran todos los miembros de las Juntas de Acción Comunal, que son 67.000, es decir, más de cinco millones de miembros, entonces pretender dar una protección individual, con un esquema de seguridad para cada uno de cinco millones es difícil y por eso nos toca, donde tengamos amenazas, actuar rápidamente con esos mecanismos de protección individual, pero también buscar la protección colectiva, involucrando en ese ejercicio a alcaldes y gobernadores en lo local.

Nuestro compromiso es que esos hechos no se sigan presentando y, óiganme muy bien: que seamos implacables para llevar a la justicia a los criminales que han estado detrás de esos asesinatos, como por ejemplo hicimos cuando presentamos el cartel de «se busca» de 34 jefes de organizaciones criminales asesinas de líderes sociales, donde ya hemos tenido cerca de 18 capturas.

Los diálogos con el ELN están suspendidos y hay indicios de que el ELN se está fortaleciendo. ¿Qué informaciones tiene el Gobierno?

El ELN tiene una situación y es que en territorio venezolano Nicolás Maduro, el dictador de Venezuela, los está protegiendo. Les está dando dinero y está patrocinándoles el reclutamiento de niños para ejercer la minería ilegal en lugares del territorio venezolano.

Y fuera de eso, los cabecillas del ELN están en Venezuela protegidos por Maduro. Allá está alias «Pablito», también está otro de los jefes que es «Antonio García», y tienen adicionalmente grupos de reclutamiento y muchos de los ataques criminales que se están planeando en las zonas de frontera los planean desde Venezuela. Yo he sido claro con el ELN: el ELN no puede seguir en actividades criminales y pretender que va a hablar de paz con este Gobierno.

Nosotros evaluamos lo que pasó con el Gobierno anterior en 17 meses de conversación y nos encontramos con que en esos 17 meses se cometieron 432 actos terroristas, más de 116 asesinatos y más de 12 secuestros. Yo les dije, si ustedes quieren hablar de paz liberan a todos los secuestrados y suspenden los actos criminales. ¿Cómo respondieron? Con un acto terrorista hace seis meses que asesinó a 22 cadetes indefensos, desarmados, en una escuela con un carro bomba.

El ELN es un grupo terrorista y por eso está en la lista de la Unión Europea y en la lista de los Estados Unidos, y si ellos quieren realmente avanzar tiene que ser en el marco de la legalidad, entregando los secuestrados y suspendiendo los actos criminales y exponiéndose también a las decisiones de la justicia.

¿Esa situación que usted dice que ocurre con el ELN en Venezuela se presenta también con las disidencias de las FARC?

Desde luego porque todos terminan siendo la misma cosa. Esa dictadura de Venezuela está protegiendo no solamente a los cabecillas del ELN sino también a esos cabecillas disidentes de las FARC. Para nadie es un secreto que eso está ocurriendo y en Venezuela está «Iván Márquez», «El Paisa», «Romaña», y nada raro que también esté «Santrich». Todo indica que está allá protegido por la dictadura de Venezuela. Eso muestra que lo que ellos quieren patrocinar allá es una especie de unión de clanes criminales para perpetrar actos violentos en Colombia.

Uno de los argumentos de su Gobierno en la lucha antinarcóticos es el uso del glifosato, pero la Corte Constitucional todavía no ha decidido si modifica la sentencia que lo prohíbe.

Nuestro argumento no es la defensa de un herbicida, nuestro argumento es la combinación de todas las herramientas como está en la política para enfrentar el problema de las drogas que se llama Ruta Futuro. Ahí tenemos erradicación, tenemos sustitución, pago por servicios ambientales, formalización para sustituir y por supuesto se debe contemplar también la aspersión segura, la aspersión con todos los mitigantes, tener también esa herramienta sobre todo cuando se trata de llegar a esos lugares donde puede haber una exposición a francotiradores o a campos minados, o sencillamente que están bajo el control territorial de grupos armados ilegales.

¿Cree que la Corte Constitucional dará vía libre a la aspersión aérea nuevamente?

Tengo un gran respeto por la Corte Constitucional, hemos esbozado nuestros argumentos y yo espero que esos argumentos sean escuchados.

El Espectador


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