Argentina: el juicio contra Cristina Fernández entró en cuarto intermedio hasta el 27 de mayo
Cuarto intermedio en el inicio del juicio oral a CFK en la causa Vialidad
El juicio oral y público contra la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner comenzó finalmente este martes, apenas unos minutos después de las 12. El Tribunal Oral Federal número dos abrió el debate pese a los cuestionamientos previos –todos rechazados-, el pedido de la Corte Suprema para revisar las objeciones de los acusados (que duró menos de 24 horas hasta que el máximo tribunal desanduvo sus propios pasos) y el intento del defensor del ex ministro Julio De Vido, Maximiliano Rusconi, por insistir con esos planteos.
La ex jefa del Estado llegó en silencio y se ubicó en una tercera fila, detrás del lugar en el que estaban sentados De Vido, el empresario Lázaro Báez y su primo político Carlos Kirchner. Taciturna pero conversando todo el tiempo con su abogado, Carlos Beraldi; con una carpeta debajo de sus manos, vestida con un traje azul y camisa blanca y bebiendo esporádicos tragos de agua, soportó estoica la tediosa lectura de la acusación en su contra. Por la longitud de la lectura, el tribunal estableció un cuarto intermedio hasta el lunes.
La sala de audiencias, la misma en la que se celebraron los dos juicios por encubrimiento del atentado contra la AMIA y escenario del juicio en el que fue condenado y marchó preso el ex vicepresidente Amado Boudou era una hoguera. Literalmente. La calefacción puesta sino al máximo a una temperatura muy cercana causó que poco a poco los sacos y abrigos fueran quedando desacomodados sobre las sillas.
El presidente del tribunal tuvo un gesto imperceptible que pareció congraciarse con la ex mandataria: omitió su segundo nombre. La mencionó como “Cristina Fernández de Kirchner” y eludió el “Elisabet”, que con deliberada intención comenzó a usar el juez Claudio Bonadio en las causas en las que le dictó procesamientos a granel. A los otros 12 imputados los identificó por sus nombres completos.
A poco de abierto el debate, el abogado Rusconi intentó interponer una cuestión previa a la lectura de los cargos. El presidente del tribunal, Jorge Gorini, se lo impidió: “las partes van a tener su oportunidad de realizar manifestaciones antes del cuarto intermedio, tras la lectura de la acusación”.
Rusconi insistió y, con el micrófono cerrado, elevó su vozarrón para denunciar que algo –que no se entendió- era “inadmisible”. Gorini respondió: “no lo estoy escuchando, no le doy la palabra”.
La única nota discordante, menor por cierto, la dieron los celosos policías y el personal de seguridad que custodiaban la sala de audiencias. Preocupados, ambos, en que los periodistas no tomaran fotos con sus celulares, se mantuvieran sentados en sus butacas y en advertirles que si salían de la Sala para –por ejemplo- ir al baño, no podrían volver a ingresar. “Tenemos orden del tribunal”, alertaba una joven uniformada poco proclive a analizar la irrazonabilidad de lo que estaba acatando.
Cristina Kirchner: «El juicio es un acto de persecución en plena campaña»
La precandidata a vicepresidenta Cristina Kirchner afirmó este martes en Twitter que el juicio en su contra por la obra pública es «un nuevo acto de persecución con un único objetivo: colocar a una ex presidenta opositora a este gobierno en el banquillo de los acusados en plena campaña presidencial».
Además, afirmó que «claramente no se trata de hacer justicia», sino «armar una nueva cortina de humo que pretende distraer a los argentinos y las argentinas de la dramática situación que vive nuestro país y nuestro pueblo».
La ex mandataria afrontará a partir del mediodía su primer juicio oral y público. Según la imputación, desde su gobierno se le asignaron contratos de manera presuntamente irregular al empresario Lázaro Báez. El veredicto podría conocerse dentro de un año.
Al respecto de esta acusación, Cristina indicó: «No se trata de una denuncia original sino de un refrito de denuncias desde el año 2008, armadas por diputados de la Coalición Civica, en las cuales Comodoro Py se declaró incompetente en el año 2011 y la justicia de Santa Cruz las sobreseyó por inexistencia de delito».
Cristina indicó que a su entender el juicio a su persona no tiene sentido en tanto no era ella la responsable de las obras públicas realizadas, sino que dependían del Ministerio de Economía y de la gobernación de la provincia. «Jamás tomé intervención alguna en los expedientes administrativos que se realizaron por cada una de estas obras. Entre la Presidencia de la Nación y las obras denunciadas existen doce instancias administrativas de carácter nacional y provincial», escribió.
Asimismo, la ex presidenta hizo alusión a las declaraciones de Leonardo Fariña, el arrepentido que admitió ser parte del mecanismo de lavado de dinero del empresario Lázaro Báez, y dijo: «Como frutilla del postre, también utilizan la ‘declaración’ del ‘arrepentido’ coucheado Fariña, quien se encuentra sujeto a una investigación criminal en el escandaloso caso D’Alessio por armado de causas truchas que se lleva adelante en el Juzgado Federal de Dolores».
«Los juicios deben buscar la verdad. Pero aquí no parece que esto vaya a ocurrir. Mientras a mi defensa le impiden contar con las pruebas más elementales, se incorpora la declaración de la Dip. Oliveto -alias Pau- y un libro de Daniel Santoro, ambos imputados en la causa D’Alessio», agregó Cristina.
La hora del show
Con fuerte presencia de dirigentes y ex funcionarios comenzó el juicio a Cristina Kirchner y otros doce imputados en la causa que investiga presuntas irregularidades en la obra pública de la provincia de Santa Cruz.
Jorge Taiana, Carlos Tomada, Axel Kicillof, Stella De Carlotto, Horacio Pietragala, Oscar Parrilli, Mayra Mendoza, Sergio Irribarri, Martín Sabatella, Cristina Álvarez Rodríguez, Rodolfo Tahilade, Marcelo Fuentes, Hector Recalde, Gabriela Cerutti; son algunos de los dirigentes que se alistaron a primera hora para ingresar a la Sala Amia, en el subsuelo de los tribunales federales de Comodoro Py.
Los abogados de las partes ya ingresaron a la sala. CFK ingresó por la puerta lateral del edificio de Retiro, hoy envuelto en un fuerte operativo de seguridad dispuesto por los jueces Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso.
El Tribunal Oral Federal 2 dará inicio a las audiencias a pesar de la advertencia de la Corte Suprema respecto de la posibilidad concreta de que el proceso se declare nulo o sea interrumpido. Los jueces del TOF2 no hicieron lugar a los nuevos pedidos de suspensión realizados por las distintas defensas.
En esta primera jornada tendrá lugar la extensa lectura del requerimiento de elevación a juicio y las imputaciones. En total, son más de 200 fojas de un expediente que lleva más de tres años y duros cuestionamientos. Es porque el Tribunal nunca hizo lugar a las medidas de prueba solicitadas por las defensas.
La Corte aún no estableció su posición de fondo sobre los nueve planteos pendientes, entre ellos el de la defensa de CFK que reclama medidas de prueba claves sobre las obras sospechadas. Las pericias sobre 5 de las 51 obras cuestionadas estarían listas recién en agosto y los jueces del máximo tribunal podrían incluso ordenar que se estudien algunas más o todas. En caso de que los especialistas determinen que no hubo sobreprecios y que las obras fueron hechas en tiempo y forma, se podría dar por tierra con toda la acusación y hacer caer el proceso.
Casi en simultáneo con el inicio del juicio conocido como Vialidad, el máximo tribunal tiene su reunión de acuerdos de cada martes, donde podrían tratarse los planteos pendientes.
En total son trece los imputados, entre ex funcionarios y empresarios: Cristina Fernández de Kirchner, Julio De Vido, José López, Nelson Periotti, Carlos Kirchner (primo del ex presidente), Lázaro Báez, Raúl Osvaldo Daruich, Mauricio Collareda, Héctor Garro, Juan Carlos Villafañe, Raúl Gilberto Pavesi, José Santibañez y Abel Fatala.
Está previsto que declaren aproximadamente 160 testigos, entre los que se encuentra el flamante precandidato a presidente Alberto Fernández, propuesto por la defensa de CFK.
En principio está pautado que se realicen audiencias todos los días lunes, aunque podrían extenderse luego de la feria de invierno y en plena campaña electoral a más días de la semana. Sin embargo, como se dijo, si la Corte define ordenar las medidas de prueba solicitadas por las defensas el proceso podría interrumpirse. De todos modos, Comodoro Py ya le habrá dado al Gobierno su foto más deseada: la de CFK sentada en el banquillo de los acusados a pocos meses de las elecciones presidenciales.