Haití: declaración del Partido RASIN Kan Pèp La sobre los 50 años de la masacre de Kazal
Nota del Partido RASIN Kan Pèp la, con motivo del 50 aniversario de la masacre perpetrada por el régimen dictatorial makout contra la población de Kazal, en 1969
Para la memoria y la historia, el Partido RASIN Kan Pèp la recuerda que del 27 de marzo al 15 de abril de 1969, el régimen dictatorial makout de Duvalier asesinó a muchas personas de la población de Kazal. Entre ellas, había 9 militantes marxistas quienes eran miembros del PUCH (Nefort Victomé, Jérémie Eliazar, Max Belneau, Willy Joseph, Lamarre St Germain, Alix Lamaute , Roger Méhu). Se habían instalado en ese poblado. Denunciaban los abusos y las injusticias de los makoutes en contra de la población y desarrollaban tareas de formación política en la región. Para hacernos revivir aquella tragedia, el Partido recuerda 2 incidentes que ocurrieron justo antes de la masacre.
1. El primer acontecimiento ocurrió con el aumento por la fuerza de las tasas en los mercados que los agentes fiscales de la zona habían decidido cobrar a los campesinos.
En general, los agentes fiscales en ese poblado cobraban 50 centavos por cada cabrito y cerdo que vendían los campesinos en el mercado. De repente, los agentes aumentaron de manera abusiva ese precio. Es así, cuando un día un pequeño campesino que había vendido un cerdo por 12 gourdes, que un agente le exigió el pago de 6 gourdes como tasa. Este hecho, indignó a la población, especialmente a los 9 militantes y miembros del PUCH. Ante esta indignación, el agente amenazó a ellos diciéndoles que podría detenerlos y encarcelarlos.
2. El segundo acontecimiento ocurrió en relación a la cantidad de días que los campesinos podían utilizar el agua del río para regar sus pequeños terrenos de cultivo.
Los campesinos podían acceder al agua sólo 2 días sobre 7 de la semana para regar sus pequeños terrenos de cultivo. Mientras tanto, los makoutes habían establecido sus propias leyes, decretando que cualquiera que utilizara el agua del río para regar sus tierras por más de 2 días, sería detenido, golpeado, luego tendría que pagar una penalización de 50 gourdes. Y durante los 5 días restantes de la semana sólo los terratenientes podían utilizar el agua del río para regar sus campos.
Es en este contexto, que un campesino había sido condenado por los makoutes por haber utilizado el agua durante 5 días, lo que era el privilegio de los terratenientes. Así, la policía de la zona recibió la orden de detener a ese pequeño campesino, y trasladarlo al cuartel de Cabarèt. En el acto, los 9 militantes y miembros del PUCH se indignaron, invadieron el cuartel de los makoutes, bajaron la bandera rojinegra de Duvalier, e hizaron la roja y azul. Eso ocurrió el 27 de marzo de 1969. Duvalier reaccionó rápidamente y de forma brutal. Recurrió a 500 militares y makoutes de la ciudad de Gonaïves, Plateau Central, Arcahaie, Saut d´Eau y Puerto Príncipe para ocupar Kazal. La masacre empezó con el incendio de varias decenas de pequeñas viviendas. Detuvieron y golpearon a varios detenidos y fusilaron a decenas de personas. Los 9 militantes escaparon hacia las sierras cercanas. Los makoutes y militares asesinaron a 2 de los militantes y fueron descuartizados. Alix Lamaute y Lamarre St Germain llegaron hasta la cima de la sierra llamada Tiso, y desde allí se defendieron con mucho coraje y cayeron armas en mano . Los combatientes del PUCH resistieron durante 15 días a pesar de la superioridad de las fuerzas desplegadas por la dictadura. Muchos makoutes y militares cayeron durante esos enfrentamientos. Según un documento publicado por el PUCH 14 revolucionarios cayeron y 17 fueron detenidos. Nunca se supo donde llevaron a los heridos. Los militares y los makoutes le cortaron la cabeza a Alix Lamaute como así también la de Lamarre St Germain, y se las llevaron a Duvalier. Es así, que desde el 27 de marzo hasta el 15 de abril de 1969, los makoutes y militares ejecutaron a 30 personas debajo de un árbol cercano al río. Detuvieron a varias decenas de personas y las encarcelaron, y hubo decenas de desaparecidos.
Ahora, vamos a reproducir las palabras escritas por el Secretario general de RASIN en 2009:
“¿Cómo no valorar a esos jóvenes intelectuales de los dos sexos provenientes muchos de ellos de familias acomodadas, que abandonaron sus estudios universitarios tanto en Haití como en el exterior para abrazar la causa revolucionaria? ¿Cómo no honrar a esos valientes miembros del pequeño campesinado, del proletariado y de otras capas populares que comprendieron que sólo el socialismo puede garantizar un futuro digno para el pueblo integrándose a las filas revolucionarias? Supieron enfrentar a los sicarios militares y makoutes haitianos entrenados y armados por el imperialismo norteamericano a pesar de su debilidad numérica y en armamento. Para proteger sus intereses como así también los de la burguesía compradora y de los terratenientes, las potencias del capital no escatiman sus recursos para apoyar a regímenes de los más feroces como el de François Duvalier. La valentía demostrada por cada uno merece no solamente nuestra admiración, sino también debe ser una fuente de reflexión para el progreso de las luchas de clase y el cambio en la correlación de fuerzas a favor de la gran mayoría de la población”.
Así, Kazal pagó muy caro la lucha llevada a cabo por sus hijos en contra de la dictadura de Duvalier. 50 años después, Kazal todavía no obtuvo justicia y reparación por aquellos crímenes perpetrados en contra de la población.
Para remarcar el 50 aniversario de aquella masacre perpetrada por la dictadura makout de Duvalier en 1969, el Partido RASIN Kan Pèp la organizará una serie de actividades desde el 31 de mayo hasta el 9 de junio de 2019. Para no olvidar y para construir nuestro futuro debemos tener en cuenta la fuerza y la energía de aquel hermoso ejemplo de lucha y dignidad de esos camaradas que lucharon antes que nosotros.
Saludo y respeto por aquellos militantes comunistas que lucharon para defender la libertad y los derechos de los campesinos explotados. Los camaradas asesinados en Kazal son un símbolo de las batallas que jamás debemos olvidar.
Marc-Arthur Fils-Aimé (Secretario General)
Camille Chalmers (Portavoz)
