Al cumplirse dos años de la firma FARC denuncia pocos avances en los acuerdos de paz en Colombia
Farc alerta ante ONU sobre «reducidos avances» en implementación del Acuerdo de Paz
El partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (Farc), advirtió ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que tras la firma del Acuerdo de Paz con el Gobierno, han sido reducidos los avances en cuento a la implementación de lo acodado.
El líder del partido Farc, Rodrigo Londoño, conocido en su época de guerrillero como ‘Timochenko’, envió una carta al jefe de la Misión de la ONU en Colombia, Jean Arnault, en la que advirtió que «han sido muy reducidos los avances» del Acuerdo de Paz, del que ya se cumplen dos años. En el escrito Londoño señala que los avances son especialmente escasos en «el acceso a la tierra».
Por ello, el líder del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (Farc), en que se transformó esa antigua guerrilla, le pide a Arnault que intervenga para «asegurar el cumplimiento de lo acordado» en los diálogos de paz de La Habana.
Especialmente, le solicita que intervenga para que se proporcione «el acceso a tierras para los exguerrilleros siguiendo los procedimientos ya identificados en el Consejo Nacional de Reincorporación».
En virtud al acuerdo de paz, cerca de 7.000 guerrilleros dejaron las armas y comenzaron un tortuoso camino de reinserción.
Lo cierto es que ya transcurrieron dos años de la histórica firma del pacto de paz del Teatro Colón de Bogotá, después de la negociación por la derrota del plebiscito del 2 de octubre de 2016.
Al margen de las discrepancias que aún puedan persistir, los radicalismos sí han venido cambiando. El senador Álvaro Uribe Vélez, uno de los más enconados opositores, hace pocos días admitió que prefería a las Farc en el Congreso que cometiendo hechos delictivos.
“Desde el punto de vista humano me parece muy importante tener la posibilidad de discutir con ustedes, me parece bien importante su presencia en el Congreso. Yo prefiero a un colombiano en el Congreso que en la cárcel, lo prefiero en el Congreso que en la actividad criminal, pero me parece que lo que ha ocurrido dio mal ejemplo”, señaló.
Hoy en día, con los fusiles silenciados, Uribe comparte en el Congreso con quienes antes –como máximo comandante de las FF.MM. siendo presidente– combatía con total rigor. De hecho, se han sentado a debatir y discutir sobre varios temas, pese a las profundas diferencias que puedan tener.
Infografía: el camino de paz recorrido a dos años del acuerdo final
En 310 páginas quedó consignado el Acuerdo Final entre el Estado y las Farc, que el presidente Juan Manuel Santos y el jefe de la exguerrilla, Rodrigo Londoño, firmaron hoy hace dos años en el Teatro Colón de Bogotá, luego de negociar con diferentes sectores de la oposición, tras la derrota del plebiscito por la paz en octubre de 2016. En ellas hay consignadas 578 disposiciones o compromisos, según el Instituto Kroc, encargado de medir la implementación del acuerdo.
El 66 % de ellas presentan algún avance y, de ese porcentaje, apenas el 22 % se consideran completamente cumplidas. Estas cifras, que parecen bajas, son un avance significativo en opinión de Borja Paladini, director del instituto. “En un análisis comparado, y teniendo en cuenta que la implementación está prevista a 15 años, hay un importante nivel de cumplimento”, reconoce.
Además de las cifras, El Espectador presenta un panorama global de la implementación de lo pactado, en el que se observa que hay dos puntos, de los seis del acuerdo, que presentan menos avances: el primero, que prevé la reforma rural integral, y el segundo, que busca ampliar la democracia con participación política, por ejemplo, con la aprobación de 16 curules en el Congreso para las víctimas, que sigue en veremos.
Esos son dos de los pilares fundamentales del acuerdo, por cuanto hacen parte de las causas del conflicto. En contraste, el punto de desarme se cumplió en su totalidad y fue todo un éxito, dijo la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, por medio de Raúl Rosende. En el punto de víctimas se avanzó en la creación del sistema integral de justicia transicional, compuesto por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), la Comisión de la Verdad y la Unidad de Búsqueda de Desaparecidos, donde se espera esclarecer, sancionar los más graves crímenes cometidos en el conflicto armado y reparar a las víctimas.
Una mención especial merece el capítulo étnico, donde el único avance en esta materia, según Armando Balbuena, integrante de la Instancia Especial de Alto Nivel con Pueblos Étnicos, es la inclusión de algunos puntos en el Programa de Desarrollo con Enfoque Territorial de la región Pacífica.
Hay que tener presente que, en los últimos dos años, el Acuerdo de Paz también ha sufrido cambios en el Congreso de la República, como la exclusión de la presentación obligatoria de terceros civiles a la JEP, que han sido rechazados por la exguerrilla mediante sus parlamentarios y otros miembros como Iván Márquez, quien fue jefe negociador de la insurgencia en La Habana (Cuba) y hoy está ausente de la implementación del acuerdo.
Falta mucho camino por recorrer, pero, como dijo la nueva Agencia para la Reincorporación y Normalización (ARN), la reintegración de los excombatientes a la vida civil no será un proceso que se logre en 15 meses y, por el contrario, está previsto en el acuerdo que se logre en los siguientes ocho años.
Comisión de paz del Congreso analizó crisis del Catatumbo
Integrantes de la Comisión de Paz de la Cámara y sel Senado de la República participaron de una audiencia pública en el Instituto de Cultura y Bellas Artes de Ocaña para analizar la crisis humanitaria, social y económica de la zona del Catatumbo.
A la cita asistieron los congresistas Richard Aguilar, Iván Cepeda, Pablo Catatumbo, Antonio Sanguino, Edgar de Jesús Díaz, Alberto Castilla, Sandra Ramírez, Andrés Cristo, Jhon Jairo Hoyos, Luis Alberto Albán, León Freddy Muñoz y María José Pizarro.
El senador Alberto Castilla manifestó que el objetivo es visibilizar la grave situación por la que atraviesa la región y conjuntamente se puedan proyectar rutas, compromisos y agendas para superarlas.
Censuró la apatía de los alcaldes que brillaron por su ausencia e indicó que es el reflejo del abandono como se tienen a las comunidades durante muchos años.
Una deuda histórica
“Se requiere una mirada diferente para coadyuvar la problemática que es bastante difícil y además evaluar los dos años de la firma de los acuerdos de paz entre el gobierno y las FARC para determinar si se ha cumplido con lo pactado. Estaremos este sábado en Caño Indio”, recalcó.
Castilla afirmó que así como el presidente Iván Duque, ha visitado la región en tres oportunidades donde aumenta el pie de fuerza, también se requiere la presencia del jefe de Estado con planes de inversión social para mejorar las condiciones de vida de los habitantes de la región. “Se debe saldar una deuda histórica, pues los indicadores de pobreza son muy altos y la solución no es el componente militar sino atendiendo necesidades básicas de un pueblo que ya no soporta más dolor y olvido”, recalcó.
Por su parte, el senador Andrés Cristo indicó que la zona del Catatumbo requiere de un tratamiento especial dado el conflicto social. “Se debe generar el ambiente no para alzar las armas sino la voz y defender los derechos de los campesinos de la región”, precisó.
Edgar Díaz, senador del Norte de Santander, recordó el cacareado Conpes del Catatumbo que nunca se cumplió y fue enfático al afirmar que se requiere una acción de transformación de la tierra del olvido. “Es una zona muy rica en recursos, pero requiere la inversión para salir adelante”.
A su turno, Pablo Catatumbo instó al gobierno nacional cumplir cabalmente con los acuerdos de paz. “Vamos hacia Caño Indio a verificar las condiciones. La disidencia corresponde al tratamiento dado por el gobierno y la persecución que han sufrido los miembros de las FARC”, agregó.
Sobre las luchas que se libran en la zona del Catatumbo indicó que el gobierno nacional debe abrir canales de diálogo e implementar estrategias para resarcir el tejido social.
Un mejor ambiente para la paz
Los congresistas analizaron el recrudecimiento de la violencia por las confrontaciones entre el Eln y el Epl donde se han registrado más de cien episodios tristes. Además, asesinatos, amenazas, atentados, desplazamientos, confinamiento, campos minados, vías bloqueadas, combates y daños irreparable entre la población civil.
Los asistentes coinciden en afirmar que la profunda crisis obedece al abandono histórico del Estado con la región donde la única respuesta ha sido la militarización y no el fortalecimiento de la oferta institucional y la inversión social que permita mejorar las condiciones de vida de las personas.
“El Catatumbo cuenta con más de 16 mil efectivos del ejército y la policía, diariamente se viven hechos violentos y pese a las denuncias el 99 por ciento de los casos no tienen respuesta y no se conoce con certeza al responsable”, dijo el senador Alberto Castilla.
Aseguró que la región presenta una de las más altas tasas de necesidades básicas insatisfechas del país con un 58,91 por ciento según un informe del CINEP. “Adicionalmente, se reportan graves problemas en materia de vivienda, educación y salud”, puntualizó.
Las frías cifras fueron analizadas por los congresistas entre más de 200 líderes sociales entre voceros comunales indígenas y campesinos que defienden la vida y supervivencia en el territorio.
Retomar los diálogos con el Eln
Como copresidente de la Comisión de Paz, Richard Aguilar, hizo un llamado al presidente Iván Duque para que se reactive el proceso de diálogo con el Eln, que es fundamental para esta región del país que se ha visto afectada tanto en infraestructura como en el desarrollo de la comunidad.
“Esa guerra que tiene el Eln con el Epl solamente se puede solucionar si acabamos con todos los males que confluyen en el Catatumbo y por eso exhortamos al presidente para que nos reciba”, dijo Aguilar.