La OEA conforma un grupo de trabajo pero el gobierno no lo admitirá

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Contexto de Nodal
La conflictividad social inició el 18 de abril cuando el gobierno anunció una reforma previsional. A pesar de dar marcha atrás con la medida, las manifestaciones se multiplicaron. La represión estatal y la violencia en las protestas dejaron más de 300 muertos. La oposición denuncia el autoritarismo de la pareja presidencial Daniel Ortega-Rosario Murillo y demanda elecciones anticipadas, mientras que para el gobierno es una conspiración imperialista. Por pedido de la CIDH se instaló una mesa de diálogo que se encuentra suspendida.

Doce países de la OEA integran la comisión de trabajo para Nicaragua

Doce países integran el Grupo de Trabajo para Nicaragua. Así lo anunció la presidente del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), Rita Hernández Bolaños, en cumplimiento a la resolución aprobada por esa instancia el pasado 2 de agosto, con el propósito de encontrar una salida pacífica a la crisis política en Nicaragua, que inició el 18 de abril reciente.

La resolución que ordena la integración del Grupo de Trabajo para Nicaragua fue aprobada por veinte países.

El Grupo de Trabajo lo integran: Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Guyana, Ecuador, Panamá, Estados Unidos, Perú, Costa Rica y México.

La integración del Grupo de Trabajo fue rechazada por el gobierno de Daniel Ortega a través de su canciller Denis Moncada Colindres, que anunció que no permitirán el ingreso del Grupo al país por considerar que los Estados que lo integran “violentan” la soberanía, la Constitución y la institucionalidad, “al insistir en y erigirse en una autoridad supranacional para agredir al Gobierno de Nicaragua”.

Dijo que la sexta sesión del Consejo Permanente que aborda la situación de Nicaragua no ha sido solicitada ni aprobada por el Gobierno de Nicaragua, lo que llamó una actitud injerencista y que su gobierno “no acepta la actitud de acoso y revanchismo político contra Nicaragua”, que a su juicio es carente de amistad.

“Toda acción que tome el Consejo Permanente que no cuente con la participación y el respaldo de Nicaragua no tiene carácter vinculante y no recibirá a ningún Grupo de Trabajo”, dijo el representante del régimen de Ortega.

Respaldaron la postura de Moncada los gobiernos de Venezuela, Bolivia y San Vicente y Granadinas.

Moncada hizo alusión a la Carta Democrática “de no intervención en los asuntos de otros Estados”, según él, se trata de un asunto interno de Nicaragua, y afirmó que el Gobierno desarticuló el “golpe de Estado” y que todo ha vuelto a la “normalidad” en la nación centroamericana. Pero no mencionó la cacería que ha desatado el régimen contra los opositores, la política de terror impuesta a través de los paramilitares que continúa provocando el éxodo de miles de nicaragüenses, hasta el cierre de organismos defensores de derechos humanos.

La represión gubernamental a las protestas en Nicaragua ha dejado un saldo de 448 muertos, cerca de tres mil heridos, al menos 137 presos políticos y un número no determinado de desaparecidos. La mayor parte de las víctimas han sido ejecutadas con disparos en la cabeza.

La postura de Nicaragua motivó un debate. El embajador de México, Jorge Lomónaco, dijo que confía en que el Gobierno de Nicaragua “reconsidere y acepte la mano tendida por la OEA y sus Estados miembros”.

El embajador de Colombia, Andrés González Díaz, expresó que la creación del Grupo de Trabajo no se inspira en ideas injerencistas sino en el objetivo de consolidar la convivencia, la paz y una salida al conflicto.

Mientras la embajadora de Argentina, Paula María Bertol, aclaró que el objetivo del Grupo es incluir medidas de apoyo y acompañamiento que sumen para encontrar una salida a la crisis política en Nicaragua.

El embajador de Estados Unidos, Carlos Trujillo, refirió que los ojos del mundo están enfocados en el trabajo de la organización y afirmó que, como país, quieren seguir trabajando de manera colaborativa.

Explicó que la integración del Grupo de Trabajo permitirá una mayor supervisión y brindar respuestas a la situación en el terreno. Trujillo ratificó la posición de Estados Unidos de respaldar elecciones anticipadas, transparentes, justas y libres en Nicaragua, así como un proceso de diálogo con la Alianza Cívica, y que se inclusivo.

Vulgaridad de Moncada

El asalto a la palabra, la vulgaridad y falta de respeto que caracterizan las intervenciones de Moncada no se hicieron esperar. Esta vez Moncada interrumpió el homenaje de despedida que el Consejo Permanente realizaba al embajador de Brasil en la OEA, José Luis Machado.

Moncada la emprendió contra México y sus “28,168 muertes violentas en 2017”, habló de la impunidad y de 43 estudiantes desaparecidos, justificando que por estar “leyendo” esas cifras, no intervino en el momento que se discutía el orden del día con la que aparentemente estaba en desacuerdo.

Los embajadores de Estados Unidos, Chile, Colombia y Argentina pidieron respeto a Moncada para poder concluir la despedida al embajador brasileño, pero el canciller de Ortega ignoró el llamado y continuó el asalto a la palabra e ignorando a la presidenta del Consejo Permanente de la OEA.

La Prensa


Nicaragua no admitirá a Grupo de Trabajo de la OEA, afirma canciller Moncada

El Gobierno nicaragüense condenó y rechazó el intento de un grupo de países de la Organización de los Estados Americanos (OEA) de establecer un Grupo de Trabajo para intervenir en Nicaragua. Según el canciller Denis Moncada, nuestro país no admitirá en su territorio a esa instancia.

“El Gobierno de Nicaragua continúa denunciando, rechazando y condenando los intentos de un grupo de Estados miembros de este Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos, que violenta la Soberanía Nacional del Estado nicaragüense al insistir en conformar un Grupo de Trabajo sobre Nicaragua y pretender autoerigirse en una autoridad supranacional, ilegítima y arbitraria para agredir política y diplomáticamente al Gobierno nicaragüense”, dijo el diplomático.

“En forma enfática el Gobierno de Nicaragua expresa su desacuerdo, rechazo y desconocimiento total al Grupo de Trabajo espurio que el Consejo Permanente de la OEA intenta organizar con clara intención de intervenir en los asuntos internos de nuestro país, lo cual es inadmisible”, añadió.

Agregó que esa actitud confirma el interés de Estados Unidos de continuar aplicando la Doctrina Monroe y sus acciones expansionistas, desestabilizadoras, incluyendo golpes de estado contra los gobiernos progresistas.

“Quienes materializan esta condenable acción deben rendir cuentas a sus pueblos por actuar en forma inamistosa contra el pueblo libre y soberano de Nicaragua”, advirtió.

“Esa actitud contraviene la Carta de la OEA, que prevé que ningún Estado o grupo de Estados tiene derecho de intervenir directa o indirectamente en los asuntos internos o externos de otro, independientemente del objetivo en que se quiera justificar”, sentenció.

Recalcó que toda decisión que tome el Consejo Permanente carece de carácter vinculante y no puede ser impuesto a Nicaragua, por lo que no se recibirá en el territorio nacional a ningún grupo.

“Recomendamos a los Estados miembros de esta organización involucrados en esta trama inamistosa y de mala fe que desistan de su actitud injerencista y respeten la soberanía del Estado nicaragüense”, sentenció.

La Voz del Sandinismo


Iglesia católica hace gestiones para retomar el diálogo nacional

El cardenal Leopoldo Brenes afirmó este jueves que hace las gestiones para que se retome el diálogo nacional entre el Gobierno de Daniel Ortega y la Alianza Cívica, en busca de una salida pacífica a la crisis que ha dejado centenares de muertos en el país desde abril pasado.

«Estamos haciendo las gestiones para retomar el diálogo», suspendido desde finales de junio pasado, dijo Brenes, al ser preguntado por los periodistas.

El religioso destacó que el diálogo «es la única vía para solucionar los problemas» en Nicaragua.

El diálogo, cuyos mediadores y testigos son los obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, se instaló a mediados de mayo pasado, pero se ha desarrollado de forma intermitente y permanece suspendido desde el 25 de junio, cuando celebró su última sesión.

Ortega calificó a los obispos de «golpistas» y cómplices de las fuerzas internas y de los grupos internacionales que, a su juicio, actúan en Nicaragua para derrocarlo.

El 7 de junio, la Conferencia Episcopal propuso a Ortega que adelantara a marzo de 2019 las elecciones fijadas para 2021 y que renunciara a presentarse a la reelección, pero el presidente lo rechazó y opinó que la propuesta mostraba que los obispos estaban «comprometidos con los golpistas», según dijo el 19 de julio.

La Alianza Cívica, que aglutina a empresarios, sociedad civil, estudiantes y campesinos, envió una comunicación escrita a Ortega en la que le hace «un llamado urgente a retomar el camino para una salida pacífica y democrática, a cesar toda forma de violencia y a reinstalar el diálogo nacional con la Conferencia Episcopal como mediadora y testigo, con los garantes internacionales apropiados» OEA y ONU.

100Noticias


Gobierno convoca a contramarcha el sábado para pedir justicia por víctimas del “terrorismo golpista”

Los medios de comunicación oficialistas, que dirigen los hijos del presidente Daniel Ortega, anunciaron una contramarcha para este sábado 11 de agosto, el mismo día que se realizará la “marcha por nuestros presos políticos”, en la que ciudadanos en general cuestionarán al régimen.

La movilización oficialista coincidirá con la anunciada desde el pasado 7 de agosto por los “autoconvocados del 19 de abril” que demandará la renuncia del mandatario. La invitación oficialista, que pide justicia para las víctimas del “terrorismo golpista”, provocó la reacción de intelectuales que critican al gobierno, como la poeta Gioconda Belli, quien en su cuenta en Twitter, se pronunció.

El oficialismo convocó bajo la consigna: “son 197 ellos los mataron, que paguen por sus crímenes”. Esa es la cifra de muertos que el gobierno de Daniel Ortega admite en la crisis que comenzó el pasado 19 de abril, la que atribuye a un golpe de Estado y no a la actuación de fuerzas paramilitares vinculadas al gobierno, las cuales actúan en complicidad con la Policía, tal como ha sido denunciado.

Según la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH), la represión ha dejado más de 440 muertos, mientras la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), adscrita a la Organización de Estados Americanos (OEA), cuantifica en 317 el número de víctimas al tres de agosto pasado, de los cuales 21 fueron policías y 23 niños. El gobierno asegura que los organismos no han depurados las cifras.

Ruta oficialista

La marcha del Gobierno será a las 2:00 p.m del sábado. El punto de partida es la rotonda Rubén Darío, conocida como la de Metrocentro por su cercanía con el centro comercial del mismo nombre en Managua. Se dirigirán hasta la rotonda Hugo Chávez, donde el gobierno mantiene un numeroso aparato de seguridad para proteger ese lugar que rinde culto al benefactor venezolano de la administración de Ortega.

La marcha de los autoconvocados será en cambio a las 02:00 a.m del mismo día. Su punto de partida es la rotonda Jean Paul Genie hasta la rotonda Rubén Darío o Metrocentro. Los autoconvocados marcharán demandando la libertad de los presos políticos, que son 137 personas que fueron detenidas por protestar contra el gobierno de Ortega.

La Prensa


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