Nicaragua: la CIDH presenta informe sobre la crisis y se espera que se reanude el diálogo
Dialogo de Nicaragua se reanudará después de que CIDH presente informe ante OEA
El cardenal José Leopoldo Brenes informó la mañana de este jueves que lo más probable que el diálogo nacional se reanude hasta después que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), presente su informe final sobre la crisis de Nicaragua ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA).
«Ese informe nos va dar luces, nosotros conocemos la situación, pero ese informe que se presentará, servirá para tener luces», dijo Brenes.
El diálogo fue suspendido el pasado lunes por la Conferencia Episcopal, luego de que los representantes del gobierno no presentaran las copias de la invitación a organismos internacionales de derechos humanos para ingresar al país.
Este miércoles se informó que el alto comisionado de derechos humanos de Naciones Unidas, la CIDH y la Unión Europea, habían recibido la carta de invitación para el ingreso a Nicaragua.
La CIDH presentará este viernes ante el Consejo Permanente de OEA, su infirme final sobre su visita a Nicaragua.
El informe será presentado por el secretario ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrāo.
La CIDH estuvo en Nicaragua del 17 al 21 de mayo recopilando denuncias sobre violaciones a derechos humanos ocurridas en el país durante las protestas de abril y mayo.
Luego de la visita a Nicaragua, la CIDH presentó un informe preliminar en el que registró 76 personas muertas por las protestas y más de 800 heridos.
En Mayo, la CIDH solicitó al estado de Nicaragua, suspender cualquier acto de represión durante las manifestaciones, desmantelar los grupos parapoliciales, crear un mecanismo de investigación internacional para investigar los crímenes y garantizar la seguridad de los manifestantes, en especial de los estudiantes y sus familiares y los defensores de los derechos humanos.
OEA definiría su posición tras el informe de la CIDH
Tras la sesión extraordinaria que sostendrá este viernes el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), sobre la situación en Nicaragua, una abogada especialista en derecho internacional y un exdiplomático esperan que los Estados miembros de la OEA y su secretario general, Luis Almagro, emitan conclusiones “contundentes” sobre la crisis sociopolítica que vive el país centroamericano.
El Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil) tiene tres grandes expectativas, sobre esta reunión en la OEA: las conclusiones de la CIDH, conocer la postura de Almagro sobre la situación en Nicaragua y enterarse de las reacciones de los Estados miembros, manifestó Marcia Aguiluz, directora de programas para México y Centroamérica del Cejil.
Allí se conocerá el informe final de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre su visita “in loco” a Nicaragua, del 18 al 21 de mayo.
En la sesión estarían presentes el canciller de Nicaragua, Denis Moncada; el representante permanente de Estados Unidos en la OEA, Carlos Trujillo, quien visitó Managua esta semana para reunirse con diversos sectores; y los representantes permanentes de todos los Estados ante ese organismo.
Nicaragua cumplió dos meses de estar sumida en una crisis sociopolítica que ha dejado más de 200 muertos y, al menos, 2,400 heridos producto de la represión hacia manifestantes que exigen justicia y democracia.
La imagen de la OEA
“Por una parte, esperaríamos que la CIDH valide los hallazgos y las conclusiones a las que llegó el 21 de mayo. En ese sentido, esperaríamos que el informe sea contundente respecto de las graves violaciones de derechos humanos que se han venido cometiendo en Nicaragua y también de la responsabilidad del Estado sobre estas violaciones de derechos humanos”, expresó Marcia Aguiluz.
La abogada explicó que también hay gran “expectativa” por conocer cuál es la posición de Almagro, luego de conocer el informe de la CIDH, puesto que el secretario general de la OEA ha sido criticado por no tener una postura de condena contra la represión a las manifestaciones cívicas.
Con esto último coincidió el excanciller Francisco Aguirre Sacasa, al advertir que “sería un golpe para la imagen de la OEA” si Almagro “no reconoce que la causa de la violencia en Nicaragua es la represión gubernamental”.
“Almagro ha mantenido en su discurso que ambas partes (protestantes y Gobierno) son los responsables del derramamiento de sangre en nuestro país. La OEA tiene que ganarse la confianza del pueblo de Nicaragua. Mañana (hoy) podrá continuar ganándose esa confianza el señor Luis Almagro o continuará siendo visto como parte del problema”, opinó Aguirre, exembajador de Nicaragua en Washington.
Dijo que será de suma importancia la postura de los Estados miembros sobre el informe de la CIDH y que el embajador Trujillo tendrá un papel destacado.
“Él va a poder abogar de una manera bien fundamentada sobre lo que pasa en Nicaragua, va a poder tener un involucramiento más beligerante en la OEA sobre Nicaragua”, explicó Aguirre Sacasa sobre Trujillo, quien estuvo de visita en Managua esta semana.
Aunque el excanciller considera que en la sesión de hoy no se emitirá una resolución condenatoria a la represión en Nicaragua, el hecho de haber convocado a una reunión extraordinaria para escuchar el informe final de la CIDH “es un tremendo adelanto” y se está poniendo en la mesa el tema “para poder llegar a la aplicación de la Carta Democrática Interamericana”.
Agenda
La sesión extraordinaria en la OEA iniciará a las 8:00 a.m. hora de Nicaragua, con la presentación del informe final de la CIDH.
Después, el Departamento de Cooperación y Observación Electoral de la OEA hará una presentación sobre la implementación de las recomendaciones sobre el sistema electoral de Nicaragua.
Para finalizar, los Estados miembros tendrán la oportunidad de expresar sus comentarios sobre ambas presentaciones.
Amnistía Internacional denuncia escalada de represión
Amnistía Internacional (AI) señaló este jueves que en Nicaragua se ha “intensificado” la represión estatal y la violencia en las últimas semanas, a pesar de los “múltiples esfuerzos” realizados por la sociedad civil que participa del diálogo nacional y los llamados de organismos internacionales “para detener las graves violaciones a derechos humanos cometidas por agentes estatales y grupos armados afines”.
“El recrudecimiento de los ataques en contra de la población civil por parte de agentes del Gobierno y grupos parapoliciales que actúan con su aquiescencia en los últimos días, demuestra la simulación y falta de compromiso por parte del presidente (Daniel) Ortega”, dijo Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de AI, en un comunicado.
AI enfatizó que se han incrementado las detenciones ilegales a manos de grupos de particulares, así como la práctica de detener arbitrariamente a personas en el marco de las protestas por parte de fuerzas de seguridad del Estado.
Además, los mecanismos de monitoreo que AI tiene instalados para el país constatan que en las últimas semanas las atenciones por heridas de arma de fuego se han incrementado y que las atenciones por heridas de bala de goma han sido “casi inexistentes”.
Masaya sangra, pero no se rinde
“El gobierno del presidente Ortega debe ordenar de forma inmediata el cese a la represión, el apego irrestricto de la Policía Nacional y sus cuerpos antimotines a las normas internacionales sobre el uso legítimo de la fuerza, así como el desmantelamiento de los grupos parapoliciales”, insistió la organización humanitaria, que considera “indispensable” que el Estado nicaragüense “cumpla con sus obligaciones internacionales de protección de los derechos humanos” de sus ciudadanos.
Cenidh espera que Latinoamérica condene represión en la OEA
El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cendih) envió una carta a los ministros de relaciones exteriores de los 35 Estados miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) para lograr un pronunciamiento firme que condene la represión gubernamental que desde hace dos meses vive el país.
La iniciativa surge porque este viernes, en Washington, durante la sesión del Concejo Permanente de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, será presentado el informe final sobre la situación de Nicaragua, elaborado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) tras su visita al país.
La misiva fue enviada a todos los países latinoamericanos a través de la Federación Interamericana de Derechos Humanos (FIDH), para que sean los países latinoamericanos los que se pronuncien ante el informe de la CIDH.
Conseguir medidas políticas contra el Gobierno
Esta acción, permitirá que el Consejo Permanente de Derechos Humanos tome medidas de carácter político contra el gobierno de Daniel Ortega.
La misiva del Cenidh pretende presionar al Gobierno para que acepte una solución al conflicto, y cese la represión policial, de los grupos paramilitares, parapoliciales y delincuenciales que han dejado más de 200 muertos en las calles de 15 departamentos del país, perpetrado incendios e incitado a los saqueos de establecimientos comerciales.
Esta organización de derechos humanos señaló que ya hay una declaratoria de la OEA, que si bien promueve el diálogo y el establecimiento de un grupo interdisciplinario de expertos independientes, este no se hace referencia expresa a la represión gubernamental, por lo cual e instan a los estados miembros a pronunciarse públicamente con firmeza.
Otra de las acciones fue hacer llegar la carta a las cancillerías de las representaciones de otros países, radicados en Nicaragua.
Marcha en homenaje a los niños
El día de ayer en conferencia de prensa, miembros de la Coalición Universitaria, Sociedad Civil y Movimiento Campesino, realizaron una invitación al pueblo de Nicaragua para participar en un marcha dedicada a los niños de Nicaragua que han fallecido en el contexto de las protestas que se viven en el país.
La marcha se llevará a cabo el día sábado 23 de junio a partir de las 2:00 pm y ha sido denominada como “Marcha de las Flores”, la cual saldrá desde el monumento Alexis Argüello y finalizará en la rotonda Jean Paul Genie.
Hasta la fecha se han contabilizado 25 niños fallecidos en diversas circunstancias, entre ellos, uno de los casos que mayor impacto causó para los nicaragüenses, fue el de los dos menores de 2 años y 5 meses que murieron calcinados luego de que sujetos encapuchados incendiaran la vivienda donde se encontraban.
Panamá y Costa Rica piden “multilateralismo” y cese de violencia en Nicaragua
Panamá y Costa Rica apostaron por el “multilateralismo” y el “diálogo” como única salida a la crisis sociopolítica que azota Nicaragua desde hace dos meses y pidieron el cese “inmediato” de la violencia, que ya se ha cobrado la vida de más de 200 personas en ese país.
Las vicepresidentas y cancilleres de Panamá y Costa Rica, Isabel de Saint Malo y Epsy Campbell, respectivamente, mantuvieron este jueves un encuentro en la capital panameña durante el que abordaron la “preocupación” que el conflicto nicaragüense genera en la región.
“Hay mucha preocupación por Nicaragua, no vemos que haya realmente un cese a la violencia, que es lo más importante siempre, salvaguardar la vida y los seres humanos, apostando al diálogo”, dijo De Saint Malo.
Campbell, por su parte, explicó que Costa Rica “tiene una estrategia interinstitucional” para abordar la crisis no solo desde el punto de vista migratorio, sino también para contrarrestar los “impactos económicos” que esta ocasiona en la región, por donde cada mes transitan “más de 5.000 camiones de carga”.
La vicepresidenta costarricense recordó que el país ha ofrecido “visas diplomáticas de cortesía” para los familiares de los diplomáticos en Nicaragua y que “ya una de esas familias ha iniciado el trámite”
“El planteamiento es una salida democrática, buscar puentes para que no haya más derramamiento de sangre, llamar al cumplimiento de las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), garantizar que haya un cese al fuego y, por su puesto, usar el multilateralismo como el camino para contribuir a la situación que vive Nicaragua”, indicó.
“Es la única manera y es nuestra responsabilidad”, agregó Campbell, quien realiza su primer viaje oficial al extranjero desde que comenzó el Gobierno costarricense del presidente Carlos Alvarado el pasado 8 de mayo.
Nicaragua está sumida en su crisis más sangrienta desde 1980, cuando también estaba en el poder el presidente, Daniel Ortega, y sufre desde hace dos meses protestas antigubernamentales diarias, que son brutalmente reprimidas por la policía y grupos paramilitares.
Las manifestaciones, que han dejado cerca de 200 víctimas, comenzaron por unas fallidas reformas a la seguridad social y se convirtieron en un reclamo para que Ortega, quien lleva once años en el poder, renuncie al cargo.
El presidente saliente de Colombia, Juan Manuel Santos, pidió el miércoles al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, y al Consejo Permanente de esa organización intervenir en la crisis “para que ese huracán no siga creciendo y no siga produciendo víctimas”.
El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) celebrará este viernes una sesión extraordinaria para abordar el conflicto en este país centroamericano, ya que deja al menos 200 muertos.
En esa sesión, la CIDH presentará un informe sobre su visita en mayo pasado a Nicaragua y los hallazgos y recomendaciones acerca de la crisis actual.
En su informe preliminar, presentado el 21 de mayo pasado, en Managua, la CIDH afirmó que en su visita de campo de cuatro días encontró evidencias de “graves violaciones de derechos humanos” con “al menos 76 personas muertas” en ese entonces.