El papa Francisco llama a frenar la violencia y el “inútil derramamiento de sangre”
El papa Francisco exhortó a cesar la violencia y el “inútil derramamiento de sangre” en Nicaragua, golpeada por la violenta represión a una ola de protestas antigubernamentales, que dejan más de 212 muertos, dijo este jueves el nuncio apostólico.
“El papa Francisco nos pide a todos ser constructores de la paz de Cristo, llamando a que cese toda violencia, que se evite un inútil derramamiento de sangre”, afirmó el nuncio Waldemar Stanislaw durante la misa en la Catedral de Managua.
Stanislaw indicó que el pontífice desea que en Nicaragua se restaure la “paz y estabilidad social” y que se actúe con “sensatez, porque nunca es tarde para saber actuar bien y nunca es tarde para el perdón y la reconciliación”.
El nuncio, quien la semana pasada acompañó a un grupo de obispos nicaragüenses a la sureña ciudad de Masaya para detener una amenaza de ataque contra los manifestantes, dijo que “persistir en nuestra fe significa denunciar también las injusticias y el terror”.
“Aquí en Nicaragua hay adversidades, (y) cuando hay sufrimientos, cuando tenemos que llorar y sufrir por los muertos, por los desaparecidos.. cuando nos sentimos desmoralizados tenemos que buscar siempre al Señor”, exhortó el nuncio.
Los obispos católicos de Nicaragua participan desde mayo pasado como mediadores del diálogo entre el gobierno de Daniel Ortega y la opositora Alianza Cívica, de estudiantes, empresarios, campesinos y grupos civiles, para buscar una solución a la crisis que vive el país.
La crisis estalló el pasado 18 de abril a causa de una reforma al seguro social que generó protestas y que se extendieron hasta la fecha debido a la violenta represión que el gobierno ejerció contra los manifestantes.
La oposición y los obispos proponen adelantar las elecciones del 2021 a marzo del 2019 para anticipar la salida del gobierno de Ortega, cuyo tercer mandato consecutivo termina en enero del 2022.
Proponen realizar plebiscito para que el pueblo decida sobre Daniel Ortega
Los organizaciones civiles Hagamos Democracia y el Movimiento por Nicaragua (MpN) presentaron este jueves 28 de junio su propuesta “Ruta de salida a la crisis política que vive el país”, en la que plantean que se consulte al pueblo directamente a través de un plebiscito, en octubre próximo, sobre si “quiere o no” que el presidente designado, Daniel Ortega y su esposa y vicepresidenta designada, Rosario Murillo, sigan en el gobierno; y si la mayoría de los ciudadanos rechazan la continuidad losgobernantes deberán renunciar de inmediato.
Se propone además una serie de reformas a la Constitución para acortar el mandato presidencial de Ortega, en base al resultado del plebiscito, y adelantar las elecciones al 31 de marzo de 2019. Así mismo acelerar varios pasos legales como cambios a la Ley Electoral y a la Ley Orgánica del poder legislativo para establecer las vigencia de las dos legislaturas en 2018, a fin de allanar el camino para que puedan adelantarse las elecciones en nueve meses.
El jurista y presidente del Movimiento por Nicaragua, Gabriel Álvarez, sostuvo que el gobierno Ortega-Murillo ha cometido una serie de violaciones a los derechos consignados en la Constitución de la República, con la actuación represiva de la Policía Nacional y las fuerzas de choque orteguistas en contra de las manifestaciones pacíficas de la ciudadanía desde el 18 de abril a la fecha.
Las propuestas serán entregadas a la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia para reforzarle los argumentos legales en el diálogo nacional ante el gobierno nicaragüense. Hasta ahora Ortega se niega a abordar el tema de la democratización en el diálogo y no ha respondido a los obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), sobre si acepta que se adelanten las elecciones a marzo de 2019.
De acuerdo a organismos de derechos humanos internacionales y nacionales 222 personas han sido asesinadas, entre ellos 20 menores de edad, en la represión de fuerzas paramilitares y antimotines de la Policía Nacional en 72 días de protesta ciudadana.
De acuerdo a la ruta de la democratización propuesta por el Movimiento por Nicaragua y Hagamos Democracia, si la mayoría de los ciudadanos en el plebiscito expresa su desacuerdo en que Ortega y Murillo sigan en el poder la renuncia de ambos debe ser inmediata, y en base a mecanismos institucionales “se deberá integrar un gobierno de transición hasta la realización de elecciones generales anticipadas”.
Pasos que deben darse
Sin embargo, para que active el mecanismo de consulta directa al pueblo, los directivos de las organizaciones explicaron que la Asamblea Nacional debe aprobar en los primeros quince días de julio “un decreto legislativo de convocatoria al plebiscito”.
En ese mismo período, es decir entre el 1 y 15 de junio, los diputados deberán reformar Ley Orgánica del Poder Legislativo para establecer que en 2018 entrarán en vigencia las dos legislaturas, un requerimiento normativo para que puedan ser válidas los cambios constitucionales que deberían proceder, según los organismos para resolver la grave crisis sociopolítica que existe en Nicaragua debido a la brutal represión de las fuerzas paramilitares a la ciudadanía que exige la salida de Ortega y su esposa Murillo del poder.
Luego de las reformas a la Ley Orgánica del legislativo los siguientes pasos sería, de acuerdo a la propuesta:
En la primera quincena de julio deberían darse las renuncias del resto de magistrados del Consejo Supremo Electoral (CSE), pues hay que recordar que Roberto Rivas Reyes renunció como magistrado de esa entidad en mayo pasado, aunque su salida fue presentada por el gobierno y la Organización de Estados Americanos (OEA) como parte de los acuerdos para reformar el sistema electoral.
En julio también deberían renunciar la fiscal general de la República, Ana Julia Guido, y el fiscal general adjunto Julio González. La separación de Guido y González son necesarias, de acuerdo a las organizaciones, para que exista un sistema de investigación creíbles de los crímenes a fin de que los responsables enfrenten la justicia, pues consideran que los fiscales actualmente al ser fieles a Ortega y Murillo de lo único que son es de garantía de impunidad.
Los pasos siguientes serían el nombramiento de nuevos mandos en la Policía Nacional, ya que los actuales han sido responsables directos de la represión.
Cambios constitucionales necesarios
Y mientras esos cambios de funcionarios se realizan, al mismo tiempo en la Asamblea debe aprobarse la reforma a la Constitución en primera legislatura, junto a aprobar una nueva Ley Electoral también a principios de julio.
En la segunda quincena de julio próximo, deberían ser nombrados nuevos magistrados en el CSE, un nuevo fiscal general y un fiscal general adjunto.
De cumplirse esos pasos previos, los siguientes cambios legales sería a partir de octubre que serían reformar la Constitución en segunda Legislatura para ratificar la reducción del período de mandato de Ortega y Murillo, y el adelanto de los comicios generales. Se plantea además reformar la Ley de la Policía Nacional.
En los primeros 15 días de octubre deberá convocarse y realizarse al plebiscito, y si la mayoría del pueblo rechaza que Ortega y Murillo continúan en el gobierno, la renuncia de ambos debería ser efectiva, y en la segunda quincena de octubre debería integrarse un “gobierno de transición” que convoque a elecciones igual de inmediato.
Los comicios generales para que el pueblo elija un nuevo gobierno y renueve al parlamento nacional, así como a los alcaldes, vicealcaldes y concejales se proponen para el 31 de marzo 2019, que deberán contar con la presencia de observadores internacionales y nacionales.
De acuerdo a la ruta propuesta, la instalación y juramentación de la nueva Asamblea legislativa sería el 14 de abril de 2019 y al día siguiente, el 15 de abril debería darse “la toma de posesión y juramentación de quienes sean electos presidente y vicepresidente del país.
Las nuevas autoridades municipales serían juramentadas el 16 de abril de 2019.
Obispos llamarán a sesión del diálogo la próxima semana y ONU visitará Masaya
Los obispos plantean llamar a una sesión plenaria del diálogo en Nicaragua para el próximo martes, ya con la presencia de la CIDH y ONU, y pese a que el mandatario, Daniel Ortega, no ha respondido a la solicitud sobre adelantar elecciones.
«No nos ha contestado, yo creo que pensará no contestar» el presidente Ortega a la propuesta de los obispos, dijo monseñor Abelardo Mata.
El religioso se refirió al tema al terminar una reunión entre la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) y Marlene Londoño, representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas (ONU), quien está en este país.
Al salir del Seminario de Fátima, lugar donde se dio la reunión, Mata dijo que han explicado a Londoño sobre los eventos que han antecedido a la instalación de la mesa del Diálogo Nacional, el pasado 16 de mayo.
«Algunos obispos nos reunimos con el grupo de avanzada del Alto Comisionado que vinieron a oscultarnos qué camino podrían recorrer para apoyarnos mejor en este proceso de acompañamiento a la comisión de acompañamiento», afirmó Mata.
De acuerdo con el obispo de Estelí, la representante de la ONU afirmó querer colaborar en la detención de la violencia que vive Nicaragua.
«Ellos están preocupados por el alto índice de mortandad que se ha registrado», agregó Mata.
La CEN entregó a Ortega el pasado 7 de junio una hoja de ruta para solucionar la crisis en Nicaragua, que incluye adelantar elecciones, así como cambiar magistrados electorales y judiciales.
Ortega repsondió por escrito que está dispuesto a negociar dentro de la institucionalidad, sin referirse de forma directa al adelanto de elecciones.
Luego, la CEN volvió a pedir a Ortega que responda si está a favor de adelantar las elecciones, para así convocar a la plenaria del diálogo en Nicaragua, pero el mandatario no ha enviado su posición sobre el tema.
ONU a Masaya
La ONU, por otro lado, estará este viernes en Masaya, donde recibirá denuncias de lo ocurrido.
«Hay una destrucción de la vida que se está dando en Nicaragua», indicó Mata.
El religisioso sostuvo que «el mismo gobierno no queire reconocer que están conectados con grupos parapoliciales».
Masaya es el segundo departamento que registra más muertes durante la crisis en Nicaragua, con 35, de acuerdo con un informe de la Asociación Pro Derechos Humanos (ANPDH).
La ciudad de Masaya está atrincherada, tras varios ataques de policías y civiles armados.
Venezuela denuncia campañas contra Nicaragua ante Consejo de Derechos Humanos de la ONU
El embajador de Venezuela ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Jorge Valero, denunció este miércoles en esa instancia la campaña política y mediática desatada para desestabilizar la Revolución Sandinista en Nicaragua.
La nación suramericana reafirmó la “absoluta solidaridad del gobierno del Presidente Nicolás Maduro y del pueblo venezolano con el gobierno del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y su heroico pueblo”.
Tal declaración fue hecha durante el debate general en el 38° período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra, Suiza.
Según el embajador Valero, se trata de una campaña foránea, “que tiene peones internos, y que pretende destruir los logros alcanzados en el marco de la Revolución Sandinista”.
El diplomático apuntó que el mecanismo utilizado para desestabilizar la democracia nicaragüense y perturbar la paz del país es el uso de la violencia y el terrorismo.
“Rechazamos que se pretenda utilizar el tema de los derechos humanos para agredir a Nicaragua. Llamamos a los pueblos y gobiernos del mundo a rechazar la violencia y el terrorismo en Nicaragua y a apoyar el diálogo inclusivo que promueve el Gobierno Sandinista”, añadió.