“Apatía y desinterés” priman ante la cita electoral, según un informe de la CELAG
Estudio de opinión pública en Colombia. Elecciones presidenciales 2018 (Por CELAG)
El Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica CELAG ha elaborado un estudio demoscópico de opinión sobre el clima electoral en Colombia, de cara a las elecciones presidenciales del próximo mes de mayo. La encuesta fue realizada entre el 16 de enero y el 7 de febrero de 2018 y constó de un total de 1.200 entrevistas presenciales realizadas a personas mayores de 18 años en las ciudades de Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y Bucaramanga.
El estudio midió, entre otros elementos, el clima electoral, intención de voto, percepciones sobre los principales candidatos y conocimiento acerca de la campaña electoral. El margen de error oscila entre el +/- 1% y +/- 2,8% y el intervalo de confianza es del 95%.
A continuación se detallan algunos de los principales datos contenidos en la encuesta:
- El 64,9% de los encuestados no sabe cuándo se celebrarán las elecciones. En cuanto a la posibilidad de que los comicios conlleven alguna posibilidad de cambio, el porcentaje asciende al 51,2%. Un 77% declara su insatisfacción con la política colombiana.
- Un 55% de los encuestados afirma que irá a votar o que “probablemente” irá a votar. El 26,9% señala que no irá a votar o “probablemente” no irá a votar.
- El 68,5% desaprueba la gestión económica de Juan Manuel Santos. El 58% cree que la situación económica ha empeorado en el último año.
- Germán Vargas Lleras (90,5%), Piedad Córdoba (90,2%) y Gustavo Petro (84,7%) son los candidatos más conocidos. Entre los más desconocidos, el ránking lo encabeza Alejandro Ordóñez con un nivel de conocimiento del 47,2%, seguido de Iván Duque (57,9%) y Martha Lucía Ramírez (68,2%).
- Con respecto a la imagen de los candidatos, los únicos que poseen un saldo de imagen positiva (diferencia entre imagen positiva e imagen negativa) son Sergio Fajardo (16%) y Clara López (5,4%).
- El nivel de instalación de las candidaturas presidenciales es muy bajo. Prácticamente todos los candidatos se encuentran por debajo del 50% en lo que se refiere a respuesta espontánea sobre el conocimiento de sus respectivas candidaturas. Tan sólo Germán Vargas Lleras rebasa ese porcentaje, con un 51,5%. Le siguen Gustavo Petro y Sergio Fajardo, ambos con porcentajes ligeramente superiores al 36%.
- Con respecto a la posibilidad de voto por algún candidato, Sergio Fajardo se sitúa en primer lugar, con un 24% de votos, seguido de Gustavo Petro (19%) y Germán Vargas Lleras (13,5%). El resto de candidatos registra los siguientes porcentajes: Marta Lucía Ramírez, 8,4%; Humberto de la Calle, 7,3%; Iván Duque, 6,2% y Piedad Córdoba, 5%.
- El voto en blanco se eleva hasta el 7,5%. En una proyección con indecisos, el porcentaje de electores que aún no han dilucidado su voto alcanza el 12,1%.
- Con independencia de la orientación de su voto, el 24,9% de los encuestados cree que Germán Vargas Lleras va a ganar las elecciones. Le siguen Sergio Fajardo (19,7%) y Gustavo Petro (13%).
- Piedad Córdoba concita el mayor índice de rechazo. Un 73% asegura que nunca la votaría. Le siguen Iván Duque (68,5%), Vargas Lleras (64%) y Humberto de la Calle (62,7%).
- En el extremo contrario, Sergio Fajardo es el que menos rechazo suscita, con un 45,7%.
- El empleo, la salud y la corrupción son los temas de mayor preocupación para más de la mitad de los encuestados.
Conclusiones
La apatía y el desinterés por la cita electoral es lo que caracteriza a la sociedad colombiana con respecto a los comicios presidenciales, según señaló Leandro Caruso, director de la encuesta del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica CELAG. En este sentido, Caruso no dudó en calificar el ambiente pre-electoral como “frío”. Dadas las circunstancias, pronosticó que los índices de abstención se moverán en registros similares a los de pasadas elecciones.
Por tanto, Caruso advirtió de la imposibilidad de trazar un escenario electoral definido, a tres meses de la convocatoria electoral y con un electorado potencial que reconoce su desinformación y su falta de interés ante el proceso. Una muestra significativa de este desinterés es que los niveles de desconocimiento sobre la figura de los principales candidatos o bien sobre su postulación a las elecciones aún son muy altos.
Por tanto, Caruso insistió en la imposibilidad de establecer algo parecido a una intención de voto. Así, manifestó que las preferencias mostradas por los electores aún no pueden considerarse como un criterio fijado de opción electoral.
A pesar de la dificultad de extraer conclusiones definitivas, el responsable del estudio señaló que es evidente la demanda de cambio por parte de una población que está insatisfecha con el rumbo actual del país y es muy crítica con la gestión del actual Gobierno.
En este contexto, un porcentaje significativo de la muestra valora en un candidato tanto la imagen de cambio como una supuesta capacidad de gestión para hacer realidad esa transformación y afrontar los principales problemas que tiene el país. No obstante, Caruso insistió en que por el momento ningún candidato es capaz de capitalizar dicha insatisfacción.
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