La canciller ecuatoriana es candidata para presidir la Asamblea General de la ONU
Ecuador presentó la candidatura de la ministra de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, María Fernanda Espinosa, para presidir la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) durante el 73 periodo de sesiones, que comenzará en septiembre de 2018. Hace 45 años que el país no está al frente de la Asamblea General y 19 años que ningún país de América del Sur lo ha presidido.
La presidencia de la Asamblea General de Naciones Unidas es el cargo de elección democrática y universal (de los países miembro) de mayor relevancia dentro de la ONU, de acuerdo a su carta fundacional.
Espinosa cuenta con más de 20 años de experiencia multilateral, en negociaciones internacionales sobre paz, seguridad, defensa, desarme, derechos humanos, género, pueblos indígenas, cultura, patrimonio, desarrollo sostenible, ambiente, biodiversidad, cambio climático, cooperación y otros.
La presidencia de la Asamblea General de Naciones Unidas corresponde cada año, por rotación, a una región determinada. En esta ocasión es América Latina y el Caribe. La candidatura de María Fernanda Espinosa, luego de un proceso de análisis, surge a propuesta de países de diversas regiones y personalidades que consideran que reúne el perfil y experiencia necesarios para los temas que ocupan la agenda internacional. La plenaria de la Asamblea General, en un debate temático, escuchará los planes de trabajo de los candidatos, en mayo, y las elecciones se celebrarán en junio de 2018.
Espinosa fue la primera mujer ecuatoriana representante permanente ante la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York, en 2008.
Además, cofacilitó el grupo de trabajo sobre la revitalización de la Asamblea General, en su 63 período de sesiones. Así mismo lideró esfuerzos encaminados a avanzar a nivel global en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, y suscitó la participación activa de Ecuador en los órganos principales de la ONU, así como en sus principales comisiones y órganos subsidiarios.
Espinosa fue representante permanente ante la ONU y otros organismos internacionales en Ginebra, donde lideró y apoyó varios procesos de negociación en el Consejo de Derechos Humanos, fue asesora internacional y directora regional para América Latina de la Unión Mundial para la Naturaleza; y presidió los trabajos de la CELAC en esa sede y en la COP 21 sobre cambio climático, en París.
En política nacional, es canciller por segunda ocasión y fue ministra de Defensa y de Patrimonio Cultural y Natural.