Uruguay: organizaciones exigen que femicidios sean tema de emergencia nacional
Femicidio: asesinato de mujeres por razón de su sexo. En 2017 murieron 30 mujeres en Uruguay por ser mujer. Por cada una de ellas fueron muchas las que gritaron, muchas las que lloraron, las que se dieron la mano para decir que «vivas nos queremos», que «ni una mujer más, ni una mujer menos».
Por cada una de las 30 que murieron a manos de un hombre este año, hubo muchas más que rompieron el silencio y con carteles y tristeza y rabia y miedo pidieron, gritaron, que por favor, ni una menos.
Es que si bien el número de femicidios se ha mantenido estable desde 2004, según Andrea Tuana, de la Red contra la Violencia Doméstica y Sexual, lo que creció exponencialmente fueron las denuncias. Pasaron de 7.000 en 2004 a las 30.000 con las que cerró 2017, una cada 14 minutos. Eso implicó un aumento de 14% en los primeros 10 meses del año pasado en comparación con el mismo período de 2016. Además, en una de cada cinco muertes (21,7%) había denuncias previas de la víctima, según datos presentados por ONU Mujeres.
Para la experta, también integrante de la Intersocial Feminista, el inicio de este cambio fue la aprobación de la Ley de Erradicación de la Violencia Doméstica en 2002. «A partir de entonces hay mucha más visibilidad, porque a nivel de la opinión pública se está planteando que la violencia doméstica es una vulneración de los derechos humanos, que es un delito, que no es algo normal, que no es parte de las relaciones humanas», sostiene. A su vez, destaca el aumento notorio de centros de atención y seccionales policiales especializadas.
Sin embargo, eso no alcanza. La Red observa que este crecimiento «exponencial» de pedidos de ayuda no está teniendo la atención necesaria. «El sistema de respuesta está colapsando», asegura Tuana. «Uno de los principales problemas es que el Poder Judicial está colapsando, la cantidad de defensores no alcanzan, las defensorías no son buenas ni para las mujeres ni para los niños, que requerirían un trabajo mucho más profundo, que hoy no es posible. Los jueces están muy sobrepasados de asuntos y los equipos periciales desbordados», afirma.
Prioridad.
Ante este panorama, la Red insiste en que la violencia doméstica se declare «un tema de emergencia nacional», concepto que implica que el gobierno lo tome entre sus prioridades —con más recursos y más servicios— y que se genere un compromiso de todos los partidos políticos, más allá de quién esté en el poder.
Para hacer lugar a la contingencia, la Red cree necesarias varias medidas: generar más servicios concretos, dotar de más recursos al Poder Judicial, lograr un mayor involucramiento del sistema de salud, capacitando a los pediatras en detección temprana y tomando un rol que incluya brindar tratamiento de las secuelas físicas, psíquicas y comportamentales que deja la violencia. «Es una responsabilidad que el sector no está cumpliendo», enfatiza.
También Tuana considera que la enseñanza debe profundizar su papel, tanto para poder descubrir situaciones de riesgo como para incluir la temática en la currícula de las universidades, especialmente en las carreras como Psicología en las que los profesionales van a encontrarse con este problema. «Todo eso acompañado de un respaldo institucional que hoy no hay», dice.
Uruguay ocupa el quinto lugar de América Latina y el Caribe (de 23 países) en número de mujeres asesinadas por su pareja o su expareja, según datos de Cepal. Con tres millones y medio de habitantes, es uno de los países más violentos con sus mujeres, incluso comparado con países de Europa, como España, en donde hay 46 millones y medio de habitantes y hasta noviembre llevaban 44 femicidios.
Uruguay, según Tuana, cree que es una sociedad mucho más avanzada de lo que realmente es. «En términos de machismo es una sociedad fuertemente machista, fuertemente patriarcal, pero que además lo esconde, no lo muestra abiertamente. Muestra una cara, como que fuéramos mucho más avanzados de lo que realmente somos, y eso hace que no trabaje con fuerza y de forma directa, por ejemplo, implantando la educación contra el machismo», sostiene la experta.
Según los últimos datos oficiales, 72,8% de las denuncias por violencia doméstica fueron hechas por mujeres, y una proporción similar de los indagados por esos casos (77,8%) eran hombres. Además, uno de cada dos homicidios a mujeres son femicidios.
El año cerró con una nueva víctima el 31 de diciembre: Mirtha Machado. Por ella, una vez más, muchas personas salieron este 2 de enero a la calle a gritar, nuevamente, ni una menos. Porque cada historia merece ser contada y cada mujer recordada, 30 periodistas de El País escriben y hablan de las 30 mujeres asesinadas el último año. Y lo seguiremos haciendo.
FEMICIDIOS EN URUGUAY EN 2017
Dónde, cómo y quién puede denunciar casos de violencia
Inmujeres. El Instituto Nacional de las Mujeres del Mides ofrece atención gratuita a las mujeres en situación de violencia doméstica y trata con fines de explotación sexual comercial. Las líneas para comunicarse son el 2400 0302 int. 5504 y 5505 o también el 0800-7272 (línea gratuita).
Ministerio del interior. También se pueden realizar denuncias a través de la web del Ministerio https://denuncia.minterior.gub.uy. A su vez, el teléfono 0800-500 es el número que tiene el organismo para recibir denuncias. En todos los casos, las denuncias las puede realizar un tercero y también pueden hacerse anónimamente.
Unidades Especializadas. Consisten en unidades policiales especializadas en violencia doméstica y de género. Existen en casi todo el país.
Una app. Emergencia 9-1-1 es una aplicación gratuita para celulares (disponible para App Store y Google Play) que permite reportar una emergencia.