La oposición culmina el año con derrotas electorales y fracturada en cuatro bloques
En cuatro bloques está dividida la oposición cuando se enrumba a las presidenciales. El variopinto grupo que adversa al Gobierno nacional debe reagrupar fuerzas si desea llevar un candidato único en 2018, pero hasta ahora cada quien, radicales y moderados, ha decidido reagruparse cada uno por su lado, sobre todo después de la debacle de la Mesa de la Unidad Democrática.
Por un lado están Primero Justicia y Voluntad Popular, que lideraron las protestas de entre abril y julio pasado, y los que después de insistir en que hubiera elecciones decidieron no participar en el último proceso municipal del 10 de diciembre y no llamar a votar. A esta dupla se le añadió La Causa R y formaron la plataforma Venezuela está primero.
Del otro lado está Acción Democrática, cuyos militantes siempre actuaron en consonancia con Un Nuevo Tiempo, partido que viene de las filas blancas. Los adecos también decidieron no participar, pero todos sus dirigentes se postularon a las elecciones por la tarjeta de UNT.
Estos cuatro partidos políticos formaban hasta octubre el famoso G-4 de la MUD, centralizando las decisiones, lo que a decir de las toldas minoritarias fue lo que condujo a que la coalición perdiera el caudal electoral que había logrado en 2015.
Un tercer bloque se ha venido planteando, integrada por aquellos notables, veteranos de la política que nunca tuvieron cabida en la MUD, pero que según la elección del 10-D ahora representan la nueva oposición, con una votación de 1.461.986 votos. Se trata de Copei, que alcanzó 769.067 votos, el MAS, con 362.830 votos; y Avanzada Progresista, con 330.089.
El presidente de Avanzada Progresista, Henri Falcón, dijo a este diario que se trabaja en un nuevo bloque que reúne a Copei, el MAS, Puente, AP, gremios, movimientos profesionales, sectores productivos, además de la participación de personalidades políticas como Claudio Fermín, Felipe Mujica, Enrique Ochoa Antich y Eduardo Fernández. “Hemos venido planteando una nueva plataforma opositora que discuta, que debata, que tome decisiones, pero que también sea amplia, inclusiva, y que no sea un grupo sectario los que quieran dirigir. Es una plataforma abierta para buscar que el país pueda salir de la crisis”, reconoció Falcón.
Sobre la idea, Felipe Mujica, secretario general nacional del MAS, señaló que desde hace tiempo Fermín, Fernández y él venían recorriendo el país tratando de crear un punto de reflexión y haciendo una crítica hacia la MUD y su falta de estrategia.
“La MUD en dos años se encargó de despilfarrar todo el esfuerzo de 2015, ahora decidió no participar, eso obliga a que se constituya un esfuerzo, se reflexione sobre los errores, para después avanzar en una estrategia compartida, que exprese pluralismo, democracia y salidas pacíficas. La elección presidencial requiere de un esfuerzo para tener un solo candidato y que pueda ser seleccionado con el menor sacrificio posible. Crear un mecanismo consensuado que permita tener un solo aspirante de los sectores democráticos”, opinó Mujica, quien agregó que no cree que la primaria sea el mejor método porque los divide más.
Otra fracción, la cuarta en la oposición, la integran quienes tradicionalmente han tomado posiciones “radicales” como María Corina Machado y su movimiento Vente Venezuela, y Diego Arria, pero en el que también están el exalcalde Antonio Ledezma, la exmagistrada Blanca Rosa Mármol, Cipriana Ramos, Aquiles Martini, Oswaldo Álvarez Paz, Richard Blanco, Germán Carrera Damas, el deportista Iván Olivares, que antes militó en PJ, la periodista Nitu Pérez Osuna y hasta el artista One Chot. El movimiento se llama Soy Venezuela y están conformándose en todo el país.
Más allá de las fracciones, Mujica insistió en la necesidad de llegar a acuerdos para apoyar a un solo candidato en 2018, porque “no es el momento de estar creando plataformas, sino de hacer un esfuerzo común. Lo peor que puede hacer la oposición es seguir fragmentándose, ya la MUD fracasó y no va a poder resolver los problemas que tenía que resolver, se equivocó, no tuvo estrategia. No se trata ahora de armar una nueva MUD sino de superar los errores cometidos, buscar un punto de encuentro y que ese punto sea poner los intereses de Venezuela por encima de los particulares. Y que busquemos un venezolano que tenga los méritos, la capacidad de convocatoria, que le pueda hablar al país con suficiente autoridad y respaldo”, manifestó.
Un adelanto de presidenciales podría tomar a la fragmentada oposición en muy malas condiciones para competir.
“Ahorita hay una gran complejidad porque hay demasiados grupos e intereses pero al final van a verse obligados a reagruparse. Lo que ocurre ahora es que hay diferencias muy grandes en términos de estrategia, en la manera cómo creen que debe ser tratado el Gobierno, pero eso se va a ir diluyendo, si no los partidos no tendrían posibilidad, lo que daría paso a un outsider en estas elecciones presidenciales”, sostuvo el politólogo y sociólogo Leoncio Pinto.
La plataforma liderada por Henri Falcón se reunió el jueves, falta esperar si cada uno de los que integran los diferentes bloques puede dejar sus intereses a un lado y pensar en la unidad.