VIH – SIDA: mitos y verdades sobre las formas de contagio
Por Mg. Miriam del Tránsito Galván | Directora de las carreras de Enfermería – UNDAV
La transmisión vertical es la de una infección u otra enfermedad de la madre a su hijo, que puede ser antes del nacimiento (congénita), durante el parto (perinatal) y después del parto (neonatal). Una mujer embarazada con VIH le transmite por vía transplacentaria el virus al embrión y feto. Es por ello muy importante cumplir el tratamiento durante el embarazo para disminuir el riesgo de transmisión vertical.
Internacionalmente, a partir del segundo trimestre, se sugiere asegurar la adherencia al tratamiento, por lo cual puede prevenirse dicho tipo de transmisión. Así, la infección por VIH no debe representar un obstáculo para ser madre. La tasa de transmisión vertical se encuentra en la actualidad por debajo del 1%, según datos del Plan Nacional sobre el SIDA.
Inmediatamente al nacimiento, se realiza el diagnóstico para instalar el tratamiento de profilaxis neonatal. La transmisión madre-hijo del VIH (transmisión vertical) descendió en la Argentina de más del 13% en el año 2000 a 4,5% en 2010 (Ministerio de la Nación, 2014).
¿Cómo sí se transmite?
• Por relaciones sexuales sin preservativo (orales, anales o vaginales).
• Por compartir agujas, jeringas, maquinitas de afeitar, canutos (para aspirar cocaína) o pipas (para fumar pasta base).
• Por el embarazo, el parto y la leche materna.
¿Cómo no se transmite?
• Por compartir el mate.
• Por abrazar y besar.
• Por practicar deportes de contacto.
• Por picaduras de mosquitos.
• Por relaciones sexuales con preservativos.
¿Qué podemos hacer para prevenirlo?
• Usar preservativos en todas las relaciones sexuales (anales, orales o vaginales) de principio a fin.
• No compartir elementos que puedan tener sangre de otra persona (maquinitas de afeitar, cepillos de dientes, jeringas, canutos, pipas).
• Exigir el uso de materiales descartables o esterilizados al hacerse tatuajes, piercings o implantes.
• Realizar un tratamiento en el caso de ser una mujer con VIH embarazada para que el virus no pase al bebé.
NdR: El VIH, que continúa siendo uno de los mayores problemas para la salud pública mundial, se ha cobrado ya más de 35 millones de vidas. En 2016, un millón de personas fallecieron en el mundo por causas relacionadas con este virus (Fuente: Organización Mundial de la Salud).
Fuente-Universidad Nacional de Avellaneda