Puerto Rico: miles de boricuas marcharon en EEUU para exigir reformas a favor de la isla
Los boricuas que recorrieron este domingo la avenida Independencia, por el corazón de la capital federal, para reclamar al gobierno federal que invierta en una reconstrucción digna de Puerto Rico, tuvieron en su mente las polémicas actuaciones del presidente Donald Trump durante la crisis.
“Tuitee sobre Puerto Rico con respeto”, indicaba el cartelón que llevó a la manifestación Cybil Pérez, residente en Nueva York, quien sostuvo que a Trump hay que recordarle que es su deber “ser presidencial” y “tratar con justicia a todos los ciudadanos estadounidenses”.
Emmanuel Trenche, quien se mudó con su familia de Puerto Rico cuando tenía 9 años, se convenció de asistir al evento cuando vio a Lin Manuel Miranda promover la marcha en los premios Latin Grammy, el pasado jueves.
Trenche guió desde Fort Lauderdale, Florida, hasta el aeropuerto de Orlando para tomar un avión y amanecer frente al Capitolio federal, a donde llevó una pancarta que indicaba: “Hagan a Puerto Rico grandioso otra vez”. Por el otro lado de la pancarta, reclamó la derogación de las normas de cabotaje, el voto de los residentes de la Isla en elecciones federales, frenar la emigración y promover la inversión en suelo puertorriqueño.
“Me parece injusto como se ha manejado la situación de emergencia en Puerto Rico”, dijo Trenche, quien se describió como un comerciante con una pequeña empresa.
Pérez y Trenche estuvieron entre los miles de puertorriqueños que encabezaron la manifestación boricua más numerosa en la capital federal desde los años de 1999 a 2001, cuando se desarrollaron protestas masivas en Washington D.C. reclamando el cese de las maniobras militares en Vieques.
Desde el lanzamiento de papel toalla a damnificados por parte de Trump hasta su insistencia en que la emergencia en Puerto Rico le puede salir caro a los contribuyentes estadounidenses, marcaron la actividad.
Por cerca de cinco horas, los manifestantes, con consignas que iban desde “Yo soy boricua pa’ que tú lo sepas” hasta “Despierta boricua defiende lo tuyo”, denunciaron el hecho de que más de la mitad de los residentes de Puerto Rico siguen sin electricidad y demandaron que la reconstrucción no padezca de la lentitud y las limitaciones que tuvo la respuesta inicial.
La marcha, que empezó en terrenos del Capitolio federal y terminó con una inmensa bandera de Puerto Rico desplegada frente a las escalinatas del Lincoln Memorial, fue convocada por la Federación Hispana y diversos grupos de la diáspora puertorriqueña, para reclamar un trato digno, la reconstrucción de Puerto Rico, la derogación de las normas de cabotaje y la cancelación de la deuda pública.
En momentos en que el gobierno federal dice que no tener una evaluación oficial de los daños causados por el huracán María, el Congreso considera una nueva petición de $44,000 millones en fondos de emergencia que no fue diseñada pensando en Puerto Rico.
La convocatoria – que coincidió con el 525 aniversario de la colonización española de Puerto Rico-, se benefició del megáfono que ahora provee la voz del artista puertorriqueño Lin-Manuel Miranda, quien promovió la manifestación en los premios del pasado jueves de los Latin Grammy y en el programa de Ellen DeGeneres.
Unos 36 autobuses de estados como Florida, Nueva York, Chicago, Connecticut, Nueva Jersey y Pensilvania transportaron a miles de los participantes.
Miranda, una voz familiar para los estadounidenses tras el espectacular éxito del musical ‘Hamilton’, subió a la tarima junto a Rita Moreno, la leyenda boricua de “West Side Story» y la única artista hispana en haber ganado los cuatro principales premios de la industria del entretenimiento: el Oscar, el Emmy, el Grammy y el Tony.
“Aquí es que se toman las decisiones”, sostuvo Lin Manuel Miranda, también creador del musical “In the Heights” y a quien el público recibió con entusiasmo en el Lincoln Memorial.
Miranda indicó que el mensaje al presidente Trump y al Congreso es que la respuesta federal a la catástrofe en Puerto Rico ha sido insuficiente, y que los puertorriqueños de la isla se merecen la misma asistencia que se le provee a Texas y Florida.
Miranda destacó como el huracán Maria ha incrementado la emigración de los puertorriqueños a Estados Unidos, sobre todo en Florida donde puede crecer aún más el electorado boricua y ampliar tremendamente su poder político. En ese sentido, advirtió a los políticos de Washington que auxiliar a Puerto Rico “no es solo una cuestión humana”, sino “buena política”.
Cuando el presidente Trump tuiteó el 30 de septiembre pasado críticas a la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, por ella elevar la alarma sobre la lenta respuesta federal, y acusó a los puertorriqueños de querer que otros trabajen por ellos, Miranda le respondió que iría “directo al infierno”.
“Que voten”, dijo Rita Moreno que es su mensaje principal a los boricuas en Estados Unidos, quien afirmó que “estoy aquí porque me importa, coño”, el trato a los puertorriqueños y para denunciar “el trato obsceno e insultante” del presidente Trump, entre otras cosas por lanzar papel toalla a personas en un centro de asistencia a damnificados durante su visita a la Isla.
La organizadora del evento, Evelyn Mejil, sostuvo que la manifestación “no es sobre ninguna agenda política, es sobre Puerto Rico”.
La senadora Kirsten Gillibrand (Nueva York), los congresistas demócratas Luis Gutiérrez (Illinois), Adriano Espaillat (Nueva York) y Joseph Crowley (Nueva York), la presidenta del Consejo Municipal de Nueva York, Melissa Mark Viverito, el senador estatal neoyorquino, Marcos Crespo, y un representante del senador independiente Bernie Sanders (Vermont), estuvieron entre los oradores del evento.
Desde terrenos del Capitolio, donde empezó el evento, Gutiérrez, entre otras cosas, abogó por eliminar la Junta de Supervisión Fiscal que controla las decisiones financieras del gobierno de Puerto Rico, pero antes debe recomendarle al nuevo tribunal territorial de bancarrota que preside la jueza Laura Taylor Swain, la eliminación de la deuda, para permitir un nuevo comienzo en la Isla.
El congresista boricua dijo que es necesaria una nueva relación de igual a igual entre Puerto Rico y Estados Unidos, “con respeto a nuestra identidad, cultura e idioma”, pero para ello sostuvo que es clave borrar “una deuda que proviene de una relación colonial”.
Entre los grupos de la diáspora, Gretchen Sierra Zorita, de la Agenda Nacional Puertorriqueña, afirmó que cuando se hable de invertir dinero federal en Puerto Rico para su reconstrucción, los miembros del Congreso deben tener en cuenta a los boricuas de Estados Unidos. “Somos contribuyentes”, dijo Sierra Zorita, quien reside en la zona de Washington D.C., al indicar que pide “que mis contribuciones vayan a ayudar a Puerto Rico”.