San Salvador está enfermo de tráfico y contaminación – Por Susana Peñate

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Los conceptos vertidos en esta sección no reflejan necesariamente la línea editorial de Nodal. Consideramos importante que se conozcan porque contribuyen a tener una visión integral de la región.

Las condiciones de vida en las grandes ciudades como el hacinamiento, servicios básicos, tráfico vehicular, contaminación, accidentalidad vial, violencia, degradación de los suelos, aumento de enfermedades y cómo la sociedad les da respuesta es lo que determina el estado de la salud urbana, advierte la Organización Panamericana/Mundial de la Salud (OPS/OMS).

Ante esto, si se compara al Gran San Salvador con un paciente, ¿cuál sería su diagnóstico? “Es como si tuviéramos un paciente hipertenso. Si usted no se controla tempranamente, la hipertensión lo puede poner en una situación más crítica, más grave. Entonces, usted necesita tomar ciertas medidas que le permitan controlarse y mantener un estado de salud aceptable”, respondió Hernán Luque, asesor de servicios de salud de la OPS/OMS en El Salvador.

En las últimas décadas, las ciudades en el continente americano han experimentado cambios en su estructura, en buena parte por la migración del campo a la ciudad y el surgimiento de más “asentamientos espontáneos” alrededor de las áreas urbanas que tienen condiciones precarias.

“Esto genera problemas de hacinamiento en las viviendas, genera consumo de agua no segura para las personas, surgen problemas de violencia, surgen conflictos, porque son lugares que surgen de manera espontánea sin previa planificación”, expresó.

También hay proliferación de enfermedades respiratorias agudas y gastrointestinales y otros desafíos que demandan una coordinación intersectorial del sector público, la sociedad civil y la academia.

“Una ciudad saludable implica tener áreas de recreación para la población, implica tener transporte público, implica tener parques, implica tener buenas vías de acceso, implica tener agua segura para consumo humano, implica tener seguridad, viviendas dignas, que no son competencia del sector salud, son competencia de otros sectores”, señaló.

El experto agregó que no se necesita vivir en estos asentamientos precarios para estar expuesto a enfermedades, sino que el tiempo que se invierte en la congestión vehicular, la contaminación del aire, el ruido y otros factores también propician enfermedades y afectación a la salud mental del resto de habitantes. “No hay tiempo siquiera para la convivencia familiar, para las relaciones interpersonales”, sostuvo.

Además de que las grandes ciudades también representan un abandono de los adultos mayores, a quienes muchas veces se les considera como una “carga para la familia”, dijo.

No obstante, estima que el estado del Gran San Salvador no es muy grave, pero se necesita implementar un plan o política de nación en forma progresiva.

“No hay peor paciente que el que no pone de su parte. Se necesita que las personas, toda la sociedad sea consciente de esta problemática y sea consciente de que la solución es una solución de todos, no es una solución exclusiva de un sector específico o de un presidente iluminado”.

Comentó que la cartera de Salud y el Consejo Internacional para la Ciencia promueven ya algunas iniciativas en este tema.

Salud urbana

La Oficina Regional para América Latina y el Caribe del Consejo Internacional para la Ciencia (ICSU-ROLAC) realiza el Segundo Taller Internacional de Salud Urbana en El Salvador, 28 y 29 de septiembre, con la participación de 15 países, universidades, estudiantes y entidades de gobierno.

(*) Periodista.

La Prensa Gráfica

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