EEUU elimina plan Daca y el Gobierno mexicano responde con asistencia a los jóvenes inmigrantes afectados
Donald Trump elimina plan migratorio DACA
El Gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció hoy el fin del plan conocido como DACA, promulgado por Barack Obama y que ha protegido de la deportación a 800 mil indocumentados, aunque la suspensión se hará efectiva dentro de seis meses para forzar al Congreso a encontrar una alternativa.
«Estoy aquí para anunciar que el programa DACA promulgado por la Administración de Obama va a ser rescindido», anunció en una rueda de prensa el fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, uno de los miembros del Ejecutivo con posiciones más duras en inmigración.
«Lo compasivo es acabar con esta anarquía, implementar nuestras leyes y si el Congreso elige hacer cambios en nuestras leyes, hacer eso a través del proceso establecido», indicó Sessions.
El fiscal general hizo alusión así a la promesa que hizo Trump para abordar con «corazón» el tema del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), un plan que, durante la campaña presidencial de 2016, prometió anular nada más llegar a la Casa Blanca.
La decisión del Gobierno no entrará en vigor hasta el 5 de marzo de 2018, dentro de seis meses, periodo en el que el Congreso, el único con poder para cambiar el sistema migratorio, debe encontrar una solución para regularizar la situación de los jóvenes indocumentados, conocidos como «soñadores» (dreamers).
El programa de DACA fue promulgado en 2012 por Obama mediante una orden ejecutiva y gracias a él unos 800.000 jóvenes indocumentados han podido frenar su expulsión del país, obtener un permiso temporal de trabajo y, en algunos estados, una licencia de conducir.
Los beneficiarios de DACA debían de renovar su inscripción en el programa cada dos años para seguir recibiendo sus beneficios.
Al respecto, el Gobierno determinó hoy que los «soñadores» que tengan pendiente renovar su inscripción a DACA deben hacerlo antes del 5 de octubre, momento en el que ninguna nueva petición será aceptada, informaron en una conferencia de prensa altos funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional, que pidieron el anonimato.
La secretaria en funciones del Departamento de Seguridad Nacional, Elaine Duke, se encargó hoy de rescindir el programa al suspender el memorándum que lo creó el 15 de junio de 2012, informaron las mismas fuentes del Departamento de Seguridad Nacional.
Duke tomó esa decisión después de que Sessions le enviara este lunes una carta, en la que consideraba que DACA debía ser suspendido.
Trump ha recibido una gran presión para acabar con DACA por parte de fiscales generales de nueve estados conservadores, encabezados por Texas y que amenazaron con interponer hoy mismo una demanda contra el Gobierno si no derogaba el programa.
Gobierno mexicano lamenta la cancelación del DACA
“El gobierno mexicano invariablemente ha expresado que los jóvenes DACA, también conocidos como Dreamers, aportan de manera significativa y cotidiana a la economía, la cultura y la sociedad del país al que llegaron siendo niños“, explicó el gobierno mexicano en un mensaje en el que lamenta la decisión de la administración de Donald Trump de cancelar este programa.
Esta mañana, el fiscal General de Estados Unidos, Jeff Sessions, dio a conocer la decisión final de Trump respecto al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) y con ésto la eliminación de todos los beneficios de los que miles de jóvenes inmigrantes tuvieron acceso durante la administración de Barack Obama.
Los dreamers son un porcentaje relevante de la totalidad de trabajadores actuales en Estados Unidos, pues a través del programa pudieron estudiar y muchos de ellos ya trabajan. Estos chicos son todos aquellos que llegaron al país de manera ilegal y siendo menores de seis años, con lo cual no fue su decisión ingresar de manera ilegal a Estados Unidos.
Sin embargo, el control migratorio ha sido una de las prioridades de Trump y a pesar de que durante los primeros meses en el cargo, él aseguró que los dreamers “no tendrían nada de qué preocuparse”, ahora estos jóvenes han perdido la oportunidad de seguir con sus sueños.
“Desde el inicio de la nueva administración estadounidense, el gobierno de México ha promovido la continuación de DACA, a fin de mantener la protección a cientos de miles de jóvenes beneficiarios del programa, cuya mayoría son nacidos en México”, señaló el gobierno mexicano en un comunicado.
“Nuestro país no puede ignorar el hecho de que son precisamente miles de jóvenes nacidos en México los potencialmente afectados por la decisión anunciada el día de hoy”.
Hasta ahora se conoce que está en manos del Congreso definir una opción al DACA y tendrán los próximos seis meses para hacerlo. Sin embargo, muchos de los congresistas demócratas han asegurado que desde hace un par de meses la propuesta fue entregada.
Además se estipularon ciertas normas con las cuales todos los jóvenes que hayan solicitado el DACA como máximo el 4 de septiembre de 2017, podrán tener un proceso adecuado, aunque todas las demás serán rechazadas.
“Es en este sentido que el gobierno de México, por conducto del Embajador en Washington, D.C., Gerónimo Gutiérrez, ha enviado cartas a senadores y congresistas exponiendo el valor de los jóvenes DACA para la sociedad estadounidense y exhortándolos a encontrar pronto una solución permanente que les brinde certidumbre jurídica”, destaca el texto.
“Asimismo, el gobierno de México tiene la obligación de proteger a los jóvenes Dreamers nacidos en nuestro país. En consecuencia, la Cancillería, mediante la Embajada y la red consular en esa nación, redoblará sus esfuerzos para garantizar la más amplia protección consular a los jóvenes que sean afectados por esta medida. El gobierno de México otorgará asistencia consular y legal integral e individualizada a todo Dreamer mexicano que lo solicite, particularmente en su representación legal”.
Comunicado oficial: el Gobierno de México lamenta profundamente la cancelación del Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA)
Desde el inicio de la nueva administración estadounidense, el gobierno de México ha promovido la continuación de DACA, a fin de mantener la protección a cientos de miles de jóvenes beneficiarios del programa, cuya mayoría son nacidos en México.
El gobierno mexicano invariablemente ha expresado que los jóvenes DACA, también conocidos como Dreamers, aportan de manera significativa y cotidiana a la economía, la cultura y la sociedad del país al que llegaron siendo niños. Hace apenas unos días, en su mensaje a la Nación con motivo de su Quinto Informe de Gobierno, el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, reiteró a todos los jóvenes Dreamers su reconocimiento, admiración y solidaridad sin reservas. Por ello, el gobierno de México lamenta la decisión anunciada el día de hoy de dar por terminado DACA y expresa profunda preocupación por la incertidumbre que a partir de ahora enfrentarán miles de jóvenes nacidos en México.
Es indudable que la determinación de la política migratoria en los Estados Unidos de América corresponde exclusivamente a los estadounidenses y a sus instituciones. Sin embargo, nuestro país no puede ignorar el hecho de que son precisamente miles de jóvenes nacidos en México los potencialmente afectados por la decisión anunciada el día de hoy. Frente a esta situación el Gobierno Federal tiene un imperativo moral de actuar, por la vía diplomática y siempre en estricto apego a derecho, para promover activamente ante los Poderes Ejecutivo y Legislativo de los EEUU una pronta solución a la incertidumbre jurídica que enfrentan a partir de ahora los jóvenes DACA.
Es en este sentido que el gobierno de México, por conducto del Embajador en Washington, D.C., Gerónimo Gutiérrez, ha enviado cartas a senadores y congresistas exponiendo el valor de los jóvenes DACA para la sociedad estadounidense y exhortándolos a encontrar pronto una solución permanente que les brinde certidumbre jurídica. El gobierno de México mantendrá un diálogo permanente con el Poder Legislativo de ese país en apoyo a dicha solución. Al mismo tiempo, se ha establecido contacto con autoridades del Departamento de Seguridad Interna para conocer con todo detalle el proceso de implementación de la medida hoy anunciada.
Asimismo, el gobierno de México tiene la obligación de proteger a los jóvenes Dreamers nacidos en nuestro país. En consecuencia, la Cancillería, mediante la Embajada y la red consular en esa nación, redoblará sus esfuerzos para garantizar la más amplia protección consular a los jóvenes que sean afectados por esta medida. El gobierno de México otorgará asistencia consular y legal integral e individualizada a todo Dreamer mexicano que lo solicite, particularmente en su representación legal.
Finalmente, se reitera que México recibirá con los brazos abiertos a los jóvenes Dreamers que regresen a nuestro país. Por instrucciones del Presidente Enrique Peña Nieto, las dependencias del gobierno federal están fortaleciendo sus acciones con objeto de ofrecerles el mayor apoyo; aprovechar sus talentos y capacidades; e integrarlos plenamente a la sociedad y economía nacional.
Por ello, se realizarán las siguientes acciones específicas, adicionales a las que ya se realizan bajo el programa Somos Mexicanos:
• Bolsa especial de trabajo en México para Dreamers, a través de los Consulados;
• Programa Crédito Joven para Dreamers en Estados Unidos y México;
• Oferta de becas en México y otros países;
• Acceso a la educación sin trámites innecesarios y revalidación inmediata; y
• Afiliación al Seguro Popular.
México hace un llamado a la comunidad mexicana en Estados Unidos a mantenerse informada por medios oficiales. Se invita a reportar cualquier abuso o irregularidad a su Consulado, a fin de evitar ser víctimas de fraude. También pueden llamar al Centro de Información y Asistencia a Mexicanos (CIAM), que opera de manera gratuita las 24 horas todos los días de la semana (1 855 4636 395); y a descargar la aplicación gratuita para dispositivos móviles MiConsulmex, que contiene un botón de emergencia para contactar a su consulado.
Trump: Resolveremos el problema de DACA con corazón y compasión
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este martes que resolverá “con corazón y compasión” la situación de los 800,000 jóvenes indocumentados que se beneficiaron del programa DACA, promulgado por sus antecesor, Barack Obama, y cuya eliminación anunció su Gobierno.
Como he dicho antes, resolveremos el tema de DACA con corazón y compasión, pero a través del proceso democrático legal, mientras al mismo tiempo nos aseguramos de que cualquier reforma migratoria que adoptamos ofrece beneficios duraderos para todos los ciudadanos estadounidenses”, dijo Trump en un comunicado.
Estas son las primeras declaraciones públicas de Trump sobre su decisión que acabar con el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) y dar al Congreso un plazo de seis meses para buscar una alternativa, momento en el que la suspensión se hará efectiva.
Decenas de jóvenes ‘dreamers’ decidieron protestar en distintos puntos de Estados Unidos ante el anuncio del gobierno del presidente Donald Trump de finalizar con el programa DACA.
Opinión: «Trump hace honor a su cobardía»
Sorpresa, no. En lo absoluto. El presidente Donald J. Trump tomó la decisión que se anticipaba: revocó la Acción Diferida para Quienes Llegaron en la Infancia (DACA). Su oscuro corazón solo le permitió dar un lapso de seis meses para que la revocación se haga efectiva y, presuntamente, ver si en ese periodo el disfuncional Congreso de mayoría republicana aprueba algo que ofrezca algún alivio a los DREAMers.
No era necesario revocar DACA para pedir acción del Congreso, pero a Trump lo mueven al menos tres cosas: cumplir con su promesa de campaña de eliminar DACA a su base más antiinmigrante, no porque su vil acción sea justa o necesaria, sino porque quiere mantener contento a ese sector recalcitrante que le es fiel hasta el final.
La segunda razón es que DACA fue girado por Barack Obama en junio de 2012 y la misión de Trump desde que asumió la presidencia es sencillamente deshacer todo lo que tenga el sello de Obama, sea legislación o acción ejecutiva. Trump es tan inseguro y su desdén contra Obama es tal, que solo quiere borrar el legado del expresidente.
Hay una tercera razón. Trump no asume ni culpas ni responsabilidades. Tras decir que los DREAMers estaban cerca de su corazón o incluso afirmar que los ama, Trump coloca a su achichincle, el Secretario de Justicia, Jeff Sessions, a dar la cara por él. Algo que al antiinmigrante Sessions no lo perturba en absoluto. Sessions y su pupilo, Stephen Miller, asesor de Trump en la Casa Blanca, tienen a DACA en la mira desde que se ordenó en 2012. La catalogan de anticonstitucional.
Además, con su decisión, Trump coloca la pelota en la cancha del Congreso; pero si este no actúa, la responsabilidad de la inacción recae entonces sobre el legislativo, aunque el Ejecutivo tenga la prerrogativa de evitar esta desdeñable acción y haya optado por no hacerlo.
La acción de Trump es políticamente cobarde y económicamente contraproducente. Y, claro está, totalmente inhumana. Se trata de 800 mil almas que no arribaron sin documentos por cuenta propia, que solo conocen a este país como su único hogar, que estudian, trabajan y contribuyen.
No son los criminales que Trump dice persguir, pero estarán expuestos a su maquinaria de deportaciones porque en esta administración la priorización ya no existe.
Pero a estas alturas nada de eso sorprende. Ya estoy curada de espanto ante los excesos de Trump.
Pero, ¿qué va a hacer el Congreso de mayoría republicana?
Cuando Obama era presidente, los republicanos bloquearon las medidas que ofrecían una vía de legalización a los indocumentados. En 2010, la Cámara Baja de mayoría demócrata aprobó el DREAM Act para legalizar a los DREAMers, pero la medida no avanzó en el Senado.
En 2013, el Senado de mayoría demócrata aprobó una reforma migratoria amplia que luego murió ante la inacción de la Cámara Baja de mayoría republicana.
Muchos de esos republicanos, incluyendo los líderes, citaron DACA 2012 como una de las razones para oponerse a la reforma, argumentando que Obama pasó por alto al Congreso y que la acción ejecutiva era anticonstitucional, aunque todos los presidentes, incluyendo ahora Trump, las giren.
Era más que obvio que los republicanos simplemente no querían tocar el tema migratorio.
Curiosamente algunos de los republicanos que condenaron a Obama por girar DACA, ahora le pidieron al antiinmigrante Trump que no la revocara.
Pues bien. La pelota ahora está en la cancha del Congreso republicano.
Queda por ver si ese puñado de republicanos que quiere ayudar a los DREAMers es capaz de trabajar de forma bipartidista con los demócratas interesados en hacer lo correcto sin politizar el futuro de miles.
Durante demasiado tiempo los DREAMers han sido piezas en un cruel juego de ajedrez, y la nefasta acción de Trump es la más reciente movida.
Una movida que hace honor a su cobardía.
Maribel Hastings es asesora ejecutiva de America’s Voice