Álvaro Uribe, expresidente colombiano: «El caso de Venezuela va a exigir que EEUU sea solidario con la oposición venezolana»
Por Álvaro Mejía
Álvaro Uribe: Las figuras de colaboración pueden provocar que haya testigos falsos
La colaboración eficaz se debe manejar con equilibrio para evitar que los testigos falsos pretendan favorecerse de la justicia y generar una impunidad absoluta al otorgar beneficios a miembros del crimen organizado o narcotráfico que brinden información.
Con la sapiencia en temas de seguridad y la serenidad que lo han caracterizado, el expresidente de Colombia, Álvaro Uribe, concedió en exclusiva una amplia entrevista a EL HERALDO en la que contó la experiencia de Colombia en torno a Ley de Colaboración Eficaz o “ley de los sapos”, como se le conoce en su país, que se busca implementar en Honduras.
El exgobernante también dio sus impresiones sobre temas que atañen a Honduras y la región, como la seguridad, la economía, la crisis en Venezuela y hasta sobre las acciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Rodeado de sus colaboradores, Uribe llegó al Salón Diplomático del aeropuerto internacional Toncontín, donde se concertó la cita con EL HERALDO tras una fugaz visita a Honduras en el marco del primer Congreso Internacional de Seguridad Privada y Convivencia Ciudadana en el que participó como invitado especial.
Previo a contestar las preguntas, el actual senador por el partido Centro Democrático -que fundó hace casi tres años- mostró su inquietud sobre cómo funcionaba la pista del aeródromo capitalino. No obstante, prevaleció de principio a fin la cordialidad para atender al equipo periodístico y contestar las siguientes interrogantes:
¿Cuál ha sido la experiencia de Colombia en cuanto a la aplicación de la Ley de Colaboración Eficaz?
En el tema de la colaboración eficaz con la justicia y sus diferentes figuras, como el principio de oportunidad, yo diría que la experiencia no nos da ni para decir que es bueno ni malo, porque en principio tiene toda la lógica, pero en Colombia también ha prosperado el tema de los testigos falsos, buscando beneficios en la justicia.
O sea que el tema hay que manejarlo con mucho equilibrio entre la parte legislativa y las personas que administran la justicia para evitar esas trampas, los testigos falsos que finalmente desacreditan la justicia.
¿Qué efectos ha tenido Colombia esta legislación conocida también como “ley de los sapos”?
Creo que hoy hay una gran preocupación por los testigos falsos y veo a la Fiscalía de Colombia mucho más cuidadosa en el tema de negociación con presos y en el principio de oportunidad. Colombia ha tenido un desarrollo en su derecho penal muy dinámico.
El expresidente Andrés Pastrana empezó la modificación constitucional que introdujo el sistema penal acusatorio.
Cuando yo llegué en el 2002 eso estaba a mitad de camino, le correspondió a mi gobierno sacar el proyecto en cuatro debates que faltaban en las cámaras y después toda la legislación de implementación.
Todavía no estoy seguro de que todo eso haya sido correcto, a veces pienso que el sistema acusatorio en lugar de ser garantista es todo lo contrario y que el interés del funcionario acusador no es examinar parcialmente las circunstancias, sino acusar porque sí.
¿Qué recomendaciones podría dar para la creación y puesta en marcha de una normativa similar en Honduras?
Un tema de esos lo tiene que manejar un fiscal, un juez que haya sido muy bien seleccionado. Hay la idea de negociar beneficios con quienes colaboren eficazmente con la justicia, pero hay casos en que se pueden dar más beneficios que en otros.
Creo que hay que evitar el tema de la impunidad absoluta, nada debería merecerla en el tema de delitos atroces, de lesa humanidad, que se pueda dar un beneficio, pero llegar a la impunidad absoluta da mal ejemplo y hace que esas figuras de colaboración se conviertan en promotoras de la impunidad y falsedad.
¿Considera que Honduras ha avanzado en materia de seguridad y combate al narcotráfico?
Yo no conozco a detalle la política de seguridad de Honduras, pero me parece muy bien la decisión que ha tenido firme, sin vacilaciones, el presidente Juan Orlando Hernández de hacer de Honduras un país seguro y sin narcotráfico, porque tenemos que entender que la seguridad no debería ser una categoría política, ni tampoco nadie ideológicamente se debería apoderar de la seguridad.
La seguridad no debería considerarse ni de izquierda ni derecha, es un valor democrático, una fuente de recursos.
¿Cree que han mejorado las relaciones comerciales entre Honduras y Colombia en los últimos años?
Siendo yo presidente se hizo el acuerdo de comercio con Honduras, El Salvador y Guatemala, y lo hicimos con todo entusiasmo.
Creo que hay relaciones buenas, me parece que Honduras está dando luces de confianza de inversión, de hecho aquí ha crecido la inversión doméstica y la inversión internacional. ¿Qué desea uno para Honduras?, que avance en seguridad, en su economía y política social; Honduras ha tenido un manejo inteligente de integración con muchos países.
¿Cuál podría ser el impacto o repercusiones de las políticas de la administración Trump en los países de América Latina?
Pues uno no lo sabe todavía. El caso de Venezuela va a exigir que Estados Unidos sea solidario con la oposición venezolana que sufre los rigores de la afectación democrática, y que todos nuestros países lo sean.
A mí me da vergüenza por lo que ha ocurrido con Colombia, que se ha convertido en un país… un gobierno permisivo con los horrores de la dictadura del vecino.
¿Qué percepción tiene sobre la crisis que afronta Venezuela?
Venezuela con el dinero que tuvo Chávez le ayudó a algunos países y compró su apoyo, otros fueron indiferentes o tuvieron miedo y esa dictadura creció sin que se le sancionara. A estos países se les olvidó la Carta Democrática que obliga a practicar la democracia en el interior de la respectiva nación y a exigir que se respete en otros países.
A su criterio, ¿qué se requiere para solventar la problemática venezolana?
Hoy hay una realidad en Venezuela, el gobierno, la tiranía fuertemente armada y el pueblo pobre, con hambre. La única arma que tiene la oposición venezolana son las redes sociales y ya por eso el gobierno intenta dañarles, decomisarles los teléfonos celulares.
Yo he pensado que lo que va a tener que hacer no Estados Unidos, sino la mayoría de los países de la región, es exigirles al Ejército y a la Guardia Nacional de Venezuela que no apunten más las armas contra el pueblo, que las apunten contra la dictadura y que la obliguen a que se haga a un lado y a que Venezuela vaya a elecciones rápidamente con respeto al sufragio universal y a todos los valores democráticos.
¿Qué va a decir Estados Unidos sobre esto?, no sabemos; ¿cuál va a ser la actitud que en adelante van a asumir todos los países latinoamericanos y caribeños?, ojalá sea muy seria.
¿Hay avances en la consolidación del proceso de paz en Colombia?
La verdad es que el país tenía 42,000 hectáreas de cocaína, hoy tiene 188,000; hay amplias áreas donde el Estado iba recuperando su presencia que hoy están en control territorial por parte de los grupos terroristas.
Nosotros al ver esta situación del país tenemos que decir que este proceso no se podría llamar proceso de paz, es un proceso mediante el cual el actual gobierno de Colombia ha legalizado a los cabecillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), les ha dado total impunidad y elegibilidad política, ha cambiado la Constitución para favorecerlos.
¿Cuál fue el motivo de su visita a tierras catrachas?
Vine a participar en el Congreso de Empresas Privadas de Seguridad; fue muy grato tener una reunión con el señor presidente de la República, tuve un conversatorio en un almuerzo.
Una visita relámpago, he venido a Honduras con el mismo respeto, cariño, que siento por esta nación que es tan admirable.
Llevaba mucho tiempo sin poder venir porque la actividad en Colombia no he podido desacelerarla, al contrario la he tenido que acelerar.
¿Ha dado un giro su vida después de haber sido presidente… y a qué realmente le teme?
El grupo terrorista de las FARC, el primer cartel de cocaína en el mundo, ha dicho que es marxista-leninista, ha apoyado todo lo de la dictadura de Venezuela, tiene presencia armada… como el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
La dictadura de Maduro se apoya hoy en una dictadura muy bien armada, se apoya en la Guardia Nacional, el Ejército, en su fuerza aérea, tiene unos grupos criminales que son los colectivos privados y dispone también de esos dos grupos de bandidos de Colombia que son las FARC y el ELN, a todo eso le temo.
Nuestro continente, con casi 600 millones de habitantes, la América Latina y el Caribe, con una edad promedio muy joven, 28 años y un alto desempleo juvenil, tiene allí un gran reto, pero eso no se consigue sino con democracia, respeto a la institucionalidad democrática y con la creatividad del emprendimiento privado; todo eso me preocupa y por eso seguimos en la lucha.
¿A qué se dedica en la actualidad Álvaro Uribe?
Yo debería tener muchas actividades, volví al Senado, estamos en la tarea de fortalecer el partido nuevo que creamos, tenemos cinco precandidatos a la Presidencia.
El año pasado me tocó participar activamente en la lucha del plebiscito y ganó el no contra todas las predicciones internacionales.
Tengo tres nietecitos, quisiera tener más tiempo con mi señora, con mis hijos. Soy empresario del campo, tengo que cuidar eso y voy a cumplir 65 años, pero todavía adiestro caballos de paso colombianos.