“No hay espacio para reabrir las negociaciones de paz. Creo que en el plebiscito debemos ya tomar una decisión. Pensar que se pueden renegociar algunos puntos sería un tremendo error” – Humberto de la Calle, jefe negociador de paz del Gobierno colombiano
De la Calle: no se puede renegociar lo acordado con las FARC-EP
El jefe negociador del Gobierno colombiano, Humberto de la Calle, aseguró que retroceder sería sinónimo de frustración y ocasionarían una enorme decepción a la ciudadanía.
El jefe negociador por el Gobierno colombiano, Humberto de la Calle, aseguró que sería “un grave error” renegociar nuevamente con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP) algunos puntos sobre lo acordado en el proceso para alcanzar la paz en el país suramericano.
“No hay espacio para reabrir las negociaciones, es mi opinión. Creo que en el Plebiscito debemos ya tomar una decisión. Pensar que se pueden renegociar algunos puntos sería un tremendo error”, acotó.
De la Calle manifestó que resistirse a dar el paso en el ejercicio electoral sería condenar al país a un período de incertidumbre.
Dijo estar muy seguro de sus palabras puesto que, a su juicio, retroceder sería una frustración frente a lo logrado.
“Significaría un enorme retroceso en la construcción de una ciudadanía deseosa de impulsar el futuro, la transformación. Sería un giro al pasado. No quiero imaginarme la enorme decepción nacional”, dijo.
Fueron las palabras que dio La Calle desde Colombia antes de partir nuevamente a La Habana con el objetivo de articular los diferentes esfuerzos que se requieren para conseguir la firma del Acuerdo Final de Paz y garantizar la viabilidad de su implementación.
Acotó que los avances del proceso son cada vez más significativos y ratifican que es posible conseguir un acuerdo de paz que ponga punto final al conflicto armado en Colombia.
Al inicio de su discurso, el Jefe Negociador mencionó los últimos avances que han alcanzado con las FARC-EP.
El pasado domingo, concluyeron las visitas técnicas a las veredas que fueron propuestas para albergar las zonas veredales transitorias de normalización y los puntos de normalización.
Ese fue el primer paso después del acuerdo del 23 de junio sobre el cese al fuego y de hostilidades bilateral y definitivo. «La idea es preparar las condiciones para la ubicación transitoria de las FARC mientras dejan las armas y empiezan la reincorporación a la vida civil», recordó de la Calle.
También destacó que el pasado viernes anunciaron el mecanismo de escogencia de los magistrados que integrarán el Tribunal Especial para la Paz.
De la Calle reconoció que aún faltan puntos delicados por tocar como la participación en política de las FARC. También está el tema de la reincorporación a la sociedad civil. “Debe hacerse de modo que se facilite la integración de las poblaciones y del territorio. Precisamente no ir en la dirección contraria”.
En contexto
Durante más de medio siglo, la guerra interna ha dejado un saldo de unos 300 mil muertos, en el país neogranadino casi siete millones de desplazados y al menos 45 mil desaparecidos.
Desde el año 2012 el Gobierno y las FARC-EP dialogan en Cuba con el objetivo de hallar una solución, reuniones que podrían concluir pronto a favor de la paz.