El Ejército del Pueblo Paraguayo emboscó y mató a ocho militares
El autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) acribilló a ocho miembros de la Fuerza de Tarea Conjunta. El atentado se produjo ayer, aproximadamente, a las 9:00 en la zona de Arroyito, departamento de Concepción.
El fiscal interviniente del caso Federico Delfino señaló que de acuerdo a las investigaciones, los miembros de la FTC fueron emboscados cuando realizaban un patrullaje por la zona rural que conduce al asentamiento Núcleo 6 de la localidad de Arroyito, situado a 13 kilómetros de la ruta 5 Gral. Bernardino Caballero, a la altura del kilómetro 78.
La gavilla detonó una bomba instalada en el camino para detener la marcha del vehículo, tras lo cual los criminales se acercaron a la patrulla y acribillaron a los militares. Incluso a varios de ellos los habrían rematado con arma blanca, a juzgar por el tipo de heridas que presentaron.
Cinco de los ocho militares murieron en forma instantánea, mientras que los otros tres resultaron inicialmente heridos, pero fallecieron camino al Hospital Regional de Concepción.
Delfino mencionó que “a unos 25 a 30 metros se encontró un campamento y generalmente esos explosivos son activados a distancia y quiere decir que estaban ahí cerca”. Sin embargo, indicó que se desconoce cuántas personas habrían participado del ataque. No descartó que el hecho sea una represalia por parte de la banda criminal, considerando que días atrás Pablo Valiente, apoyo logístico del EPP, fue condenado a 17 años de prisión.
CABECILLA
Ya a la noche, el Centro Informativo Ciudadano (CIC), del Ministerio del Interior, señaló que el cabecilla del atentado fue identificado como Rubén Darío López, alias “Loro”. El delincuente habría escapado de la cárcel de Concepción para unirse al grupo del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), en cuya estructura ocuparía actualmente el rango de jefe operativo.
“Son varias las conjeturas de los investigadores puesto que los asesinos estarían distribuidos desde hace un tiempo en dos grupos, el primero liderado por Osvaldo Villalba y desde la cárcel por su cuñado Alcides Oviedo Brítez, y por otro el grupo de Alejandro Ramos, quien por diferencias con los primeros se habría alejado formando su propio grupo delincuencial”, expresó el CIC a través de la red social.
Cartes visita a militares tras atentado del EPP
El mandatario paraguayo arribó a la ciudad de Concepción poco después de las 07:00 de este domingo. Cartes llegó acompañado del comisario Críspulo Sotelo, comandante de la Policía Nacional, además del Francisco de Vargas, ministro del Interior.
La comitiva posteriormente se trasladó en helicóptero hasta la localidad de Horqueta, donde prevé reunirse con altos mandos de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC).
El Presidente había retornado al Paraguay a las 23:40 de ayer, sábado, luego de una visita a México. Al arribar al Espigón Presidencial, Cartes leyó un mensaje a la Nación en que se refirió al mortal atentado de la banda criminal autodenominada EPP.
El jefe de Estado se declaró “responsable del derramamiento de sangre de los héroes de Arroyito” y reafirmó su compromiso de luchar contra el grupo hasta lograr “resultados contundentes”. “Tarde o temprano esta historia tiene un solo final, los vamos a encontrar y hacerles pagar por todo el dolor”, advirtió al dirigirse a los asesinos.
Los miembros del EPP emboscaron ayer un camión militar que realizaba una patrulla de rutina en Arroyito, Concepción. Tras detonar una bomba al paso del vehículo, los malvivientes acribillaron a todos los ocupantes para posteriormente despojarles de sus armas y municiones.
Fueron ocho los uniformados que murieron en este ataque: el subteniente de Caballería Félix Fernando Fernández Duarte, vicesargento primero Genaro Dejesús Arias Palacios, sargento primero de Infantería Robert Fabián Cañete Pereira, suboficial primero de Transporte Lucio Dejesús Torrasca Galván, sargento segundo Sergio Daniel López, sargento primero de Infantería Eder Arias, sargento primero de Infantería Hugo Candia y vicesargento primero de Infantería Pablo Farías.
EPP: más de 60 muertes
Han pasado casi dos décadas desde que se tuvieron las primeras noticias de un grupo criminal llamado “Banda de Choré”, que planeaba una serie de golpes a sucursales bancarias de la zona norte de la Región Oriental.
Con el paso de los años, la banda de Choré comenzaría a adquirir nuevos integrantes, muchos de ellos provenientes del ala radical del izquierdista Partido Patria Libre. Los asaltabancos pasarían a convertirse en el autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), un grupo dedicado a los secuestros, a atentados terroristas y al servicio del narcotráfico, principalmente en los departamentos de Concepción, San Pedro y Amambay.
En sus dos décadas de existencia, el grupo criminal EPP ha acumulado tantos golpes y muertes que por momentos se hace difícil seguir los rastros de su actuar. Sin embargo, la lista negra de muertes volvió a sumar este sábado ocho nombres, en esta ocasión todos militares.
Con el asesinato de los ocho efectivos militares abatidos, el grupo criminal lleva un total de 61 muertes (18 policías, 11 militares y 32 civiles) en los últimos 19 años. El de este sábado fue el atentado número 114 perpetrado por el EPP.
EL ATAQUE MÁS LETAL
El ataque perpetrado en la mañana de este sábado en la zona de Arroyito, una localidad que próximamente se convertirá en distrito pero que actualmente pertenece a Horqueta, pasó a convertirse en el golpe más letal del grupo criminal con un total de ocho víctimas fatales.
Antes del ataque de este sábado, el golpe que registró la mayor cantidad de víctimas había sido el que tuvo lugar el 17 de agosto de 2013 en Tacuatí, apenas dos días después de la llegada del gobierno de Horacio Cartes, y durante el cual perdieron la vida cinco personas.
La última vez que agentes de la fuerza del orden habían caído a manos del grupo criminal fue en julio de 2015.
En aquella oportunidad, primero perpetraron un golpe en la zona de Pacola, departamento de Amambay, donde asesinaron a dos efectivos policiales a los que despojaron de sus armas e incendiaron una patrullera. Un par de días más tarde, en Yaguareté Forest (departamento de San Pedro), asesinaron a tres efectivos durante una emboscada tras la cual quemaron dos patrulleras.
La última aparición del grupo criminal había tenido lugar el 27 de julio pasado, hace exactamente un mes, cuando perpetraron el secuestro del joven Franz Wiebe.
NUEVO RUMBO SOBREPASADO
“Puedo asegurarles que no nos van a marcar la hoja de ruta ni criminales ni grupos armados, en un país donde sabemos muy bien que el Estado de Derecho y la Justicia serán ofrecidos a todos los habitantes de nuestro país”, afirmaba tajante Horacio Cartes el día en el que asumía como el presidente número 49 en la historia del Paraguay.
Sin embargo, los números demuestran que su gobierno ha sido el que peores resultados ha obtenido en la lucha contra el grupo criminal, a pesar de ser el que cuenta con la mayor cantidad de recursos humanos y económicos.
Desde las elecciones presidenciales de 2013 hasta la asunción de Cartes, el grupo criminal registró en promedio una aparición cada dos semanas, dando una muestra clara de lo fortalecido y atrevido que estaba.
Desde su formación en 1997 hasta 2008, la banda había perpetrado apenas una decena de ataques; sin embargo, fue fortaleciendo su presencia. Durante los años de gobierno de Fernando Lugo, registró un promedio de 1 aparición cada dos meses; mientras que en el año de gobierno de Federico Franco el promedio fue de 3 ataques cada dos meses.
El EPP ha perpetrado la mitad de sus ataques bajo el gobierno de Horacio Cartes. De los 114 atentados que llevan en dos décadas, 57 han tenido lugar desde la llegada al poder del “Nuevo Rumbo”.
Durante el mandato de Cartes se han registrado36 víctimas fatales del EPP: 17 civiles, 8 policías y 11 militares. Hasta antes de la asunción del actual mandatario, no se habían registrado bajas en filas castrenses. Más de la mitad de las muertes a manos del grupo criminal han tenido lugar bajo el gobierno colorado.
El gobierno de Cartes registra un promedio de una víctima fatal por mes a mano del grupo criminal.