Colombia: el expresidente Uribe liderará la campaña por el NO en el plebiscito para refrendar los acuerdos de paz

710

Contexto Nodal
La Corte Constitucional de Colombia aprobó la propuesta del presidente Juan Manuel Santos de que se convoque a un plebiscito para refrendar los acuerdos de paz que se firmen en La Habana entre el gobierno y las Farc. Se estima que la consulta podría realizarse en el mes de octubre.

“Votar No al plebiscito es evitar la elegibilidad política de criminales”: Uribe

El expresidente Álvaro Uribe Vélez anunció este miércoles su propósito de promover el No en la campaña que se inicia en el país por el plebiscito para la paz para refrendar la paz con las Farc.

Cambiando su discurso para que no se crea que quienes no están de acuerdo con ese proceso son partidarios de continuar la guerra, el senador del Centro Democrático explicó que “solamente nos queda la opción de decir Sí a la paz votando No al plebiscito”.

“Es una reacción de coraje de la sicología colectiva que considera que el Plebiscito trae una paz de corta vida, con riesgos de derogación, como en El Salvador, cuyo proceso fue respaldado de manera unánime en la Comunidad Internacional, con Naciones Unidas a la cabeza, a pesar de lo cual la ley de impunidad total de 1993 cayó hace pocas semanas. El Salvador vive afectado por una de las tasas de violencia más altas del mundo. Los gobiernos de la ex guerrilla han paralizado la economía. Este caso acredita que los responsables de delitos atroces se quedan sin refugios en el planeta”, señaló.

En ese sentido, explicó que la posibilidad de negar el plebiscito daría luz verde a la posibilidad de restablecer la confianza de las Fuerzas Armadas para recuperar la seguridad, a través de un “alivio judicial para sus integrantes, sin impunidad, sin igualarlos al terrorismo y sin exponerlos a ellos ni a los civiles a reconocer un delito, incluso no cometido, para evitar el riesgo de ir a la cárcel por sentencia del Tribunal de la FARC, cuyos jueces serán nominados por entidades y de acuerdo con los perfiles convenidos entre las partes de La Habana”.

Además, de acuerdo a Uribe, votar No al plebiscito es evitar la elegibilidad política de criminales responsables de delitos de lesa humanidad. “Es evitar que quienes asesinaron a la comunidad de Bojayá se conviertan en sus autoridades. Nuestra democracia ha vivido en permanente mejoramiento, la guerrilla pidió la elección popular de alcaldes y de gobernadores, tan pronto se incorporó empezaron la coacción y el asesinato de las autoridades elegidas. Qué le dirán a quienes carecen del derecho de elegibilidad como los miles de presos que en promedio han cometido delitos menos graves que los de FARC, como los políticos que han perdido la investidura o los paramilitares que tampoco pueden ser elegidos”, indicó.

Uribe dijo que con los términos del actual proceso con las Farc la democracia colombiana “merece no premiar con elegibilidad a quienes la han bañado en sangre”.

El Espectador


Santos reveló nuevos tiempos para la paz

Un cronograma para la firma del fin del conflicto con las Farc, que se reduce a apenas unas semanas, reveló este miércoles el presidente Juan Manuel Santos.

La firma definitiva de la paz se dará después de que las Farc realicen en territorio colombiano, con la anuencia del Gobierno, su décima y última conferencia para que sus tropas también refrenden los acuerdos.

Así quedó establecido en lo que se puede denominar el cronograma de la etapa final de las negociaciones, que hizo público este miércoles el presidente Juan Manuel Santos.

Santos aclaró que lo que viene dentro de poco es el acuerdo –lo que no necesariamente implica la firma final de la paz–, el cual será socializado por los líderes guerrilleros con su tropa. El Gobierno, a su vez, iniciará la campaña de pedagogía por todo el país. Se trata de un asunto de tiempos.

“Cuando acordemos todo, las Farc van a ir a hacer su décima conferencia para disolverse, porque el fin del conflicto significa el fin de las Farc como grupo armado”, enfatizó Santos tras un encuentro con dirigentes de Alianza Verde, el Polo, la ASI y el Mais, colectividades que apoyan el ‘Sí’ en el plebiscito por la paz.

También dijo que espera que hoy se conozca la sentencia completa con la que la Corte Constitucional le dio luz verde al plebiscito refrendatorio, y añadió que en dicho documento quedará establecido que la convocatoria del mecanismo de refrendación no requiere de la firma previa y definitiva del acuerdo con las Farc.

Esto se traduce en que apenas se dé el acuerdo con la guerrilla, lo que no necesariamente implica su firma inmediata, la Casa de Nariño estará facultada para enviarle al Congreso lo pactado con las Farc y convocar a los colombianos al plebiscito.

Santos agregó, citando a la Registraduría, que se calcula un periodo de seis semanas entre el momento en que se convoca al plebiscito y la fecha en que se realiza la votación ciudadana. Y precisó que, tras este paso de convocatoria, las Farc irían realizando su décima conferencia para que los procesos trascurran paralelamente.

“La firma oficial (del acuerdo) se realizaría después de la conferencia de las Farc (…) y antes del plebiscito. Calculo que se tomaría unos 15 días o tres semanas, entre el momento de terminar los acuerdos y el momento en que las Farc realicen su conferencia y tengan el mandato”, enfatizó el Presidente.

Y sobre la convocatoria del plebiscito precisó: “Espero que sea en las próximas dos o tres semanas, pero, repito, espero que sea lo antes posible”.

En conclusión: el cronograma final de paz será más o menos así: se da el acuerdo final, se autoriza la décima conferencia de las Farc y, paralelamente, se enviará comunicación al Congreso para convocar el plebiscito refrendatorio. Luego se hará la firma oficial y definitiva del fin de la guerra, y posteriormente se va a las urnas.

El Tiempo


“Pensamos que con este Plebiscito exprés no queda bien hecha la paz”: ELN

El Ejército de Liberación Nacional -ELN- dio a conocer este martes, en la editorial de la revista Insurrección, su postura a propósito del plebiscito que se realizará en los próximos meses con el fin de refrendar los acuerdos entre el gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia -FARC-. “Respetamos el camino que han tomado los compañeros de las FARC, así no lo compartamos, dado que los acuerdos de La Habana marcan una ruta, que no interpreta la Agenda ni la metodología de negociación que hemos pactado con el presidente Santos y que anunciamos conjuntamente en Caracas el pasado 30 de marzo”, afirma el texto.

En la editorial, titulada “Un Plebiscito entre dos aguas”, el ELN asegura que revisó con atención los discursos de la instalación de la nueva legislatura en el Congreso de la República y resaltó la declaración del nuevo presidente del Senado, Mauricio Lizcano, quien llamó a acabar la polarización para abrirle paso al nuevo país y su convocatoria a que “se haga bien la paz”.

No obstante, el centro de la declaración escrita del ELN fue catalogar como precipitada la actitud de Santos frente al plebiscito: “Santos se afana en meter en este lapso (4 años) toda la gestión de gobierno, así quede mal embutida. De aquí proviene el acelere del actual Plebiscito, en el cual los colombianos deben pronunciarse sobre el proceso de paz en desarrollo; cuando aún no se ha firmado un Acuerdo Final con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y el gobierno mantiene congelada la negociación con el Ejército de Liberación Nacional”.

Agregaron que con un “plebiscito exprés no queda bien hecha la paz”, que argumentaron puede guardar relación con el pulso con el expresidente Uribe, disputa en la que el proceso de paz, aseguran, “es apenas un medio para lograr su objetivo”, expresión de una polarización creciente al conjunto de la sociedad colombiana según anunciaron.

Una polarización conveniente

El texto de la guerrilla del ELN apunta que el sí y el no envuelven a la nación en una suerte de ‘polarización conveniente’: “quienes voten por el Sí en el Plebiscito serían asimilados como aliados de Santos, mientras que quienes voten por el No serán vistos como seguidores de Uribe”, declararon. Esta sería, en su opinión, “una estratagema que pinta todo de blanco y negro, cuando la realidad colombiana es mas compleja y muy distinta a la desfiguración, que pretenden imponernos”.

Según el ELN, se pretende enfrentar a los colombianos a favor de una u otra fracción de la oligarquía: “Lo preciso es que mediante el Plebiscito se refrendará sólo el desarme de las FARC, pero aún estamos muy lejos de alcanzar la paz, ya que se mantienen todas las causas que originaron el conflicto. La polarización mediática entre Santos y Uribe en torno al Plebiscito, se evapora, cuando se plantea que la Paz sólo será posible cuando se hagan las transformaciones estructurales de la sociedad y el Estado. Ahí, Santos y Uribe hacen solidaridad de cuerpo como oligarquía, pues ninguno está dispuesto a ceder sus privilegios como bloque dominante y se aferran al poder con toda la capacidad indiscriminada del uso de la violencia”, sentencia el texto.

¿Relación con el congelamiento de la mesa?

Según expresa la editorial, hay una hipótesis que apunta a que el congelamiento de la mesa de negociaciones con el ELN obedece a la táctica escogida por Santos de “primero pactar con una guerrilla para enseguida imponerle tales acuerdos a la otra y de igual manera sacar réditos políticos para luego si descongelar estos diálogos”, por lo que la insurgencia cuestionó la voluntad de paz del gobierno.

La Revista Insurrección es el medio de comunicación oficial del ELN, por lo que su editorial establece la postura de esa organización insurgente acerca de los temas de coyuntura, es este caso, el plebiscito que sentenciaron es “otra artimaña publicitaria, que intenta ser presentado como sinónimo de la Paz”.

Colombia Informa

Más notas sobre el tema