Nicaragua: miles de personas celebran el 37º aniversario de la Revolución Sandinista
Miles de nicaragüenses celebran este martes en en la Plaza de la Fe Juan Pablo II, de Managua, el 37 aniversario de la Revolución Sandinista que derrocó la dictadura de los Somoza en Nicaragua.
El festejo se realiza junto al mandatario Daniel Ortega, la coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, e invitados internacionales como los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, y el vicepresidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel.
Los nicaragüenses llegaron a Managua en autobuses, camiones, camionetas, vehículos y motocicletas para participar de esta celebración que recuerda la lucha contra la dictadura somocista (1937-1979).
El 19 de julio es un día de fiesta nacional en Nicaragua que se celebra desde 1980, cuando fue decretado por el primer Gobierno sandinista para recordar el derrocamiento armado de los Somoza.
No solo en la referida explanada, también el Paseo de los Estudiantes y la Avenida de Bolívar a Chávez, acogen a centenares de miles de nicaragüenses que ratificarán su respaldo al proyecto que impulsa el gobierno sandinista.
Pantallas gigantes, banderas rojinegras del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y azul y blanca del pabellón nacional, junto con los lumínicos Arboles de la Vida sobresalen en el paisaje de la ciudad.
19 de julio: el triunfo de la esperanza
Cada julio es de celebración en el país pues un día 19, pero de 1979 la Revolución Sandinista triunfó tras derrocar la dictadura militar de los Somoza.
“En julio, invocamos a quienes nos dejaron la patria libre. Reconocemos esta vasta heredad donde hoy tenemos el privilegio de vivir el sueño, y trabajar para la realización de todos los sueños, especialmente el de superar la pobreza”, esas fueron las palabras de Rosario Murillo, coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía nicaragüense a inicios de este mes.
Y es que precisamente cada julio es de celebración en el país pues un día 19, pero de 1979 la Revolución Sandinista triunfó tras derrocar la dictadura militar de los Somoza, quienes gobernaron sembrando el terror durante más de 40 años.
Dicha familia contaba con el respaldo de la Guardia Nacional y de Estados Unidos, sin embargo, contra ellos se levantó el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), un movimiento creado en 1961 y que tomó su nombre del General de Hombres Libres, Augusto César Sandino.
El FSLN, cuyo primer guía fue Carlos Fonseca Amador, se pronunció por establecer el socialismo en Nicaragua, y se inspiró en las tácticas guerrilleras utilizadas por Fidel Castro, líder de la Revolución Cubana.
A pesar de que ese movimiento nicaragüense se dividió en tres ramas algunos años más tarde, estos continuaron la lucha contra la dictadura y se unificaron nuevamente en 1979.
En ese momento, el gobierno de Anastasio Somoza comenzó a debilitarse. Por un lado se unieron todos los sectores de la población civil, y por otro su principal aliado Estados Unidos pedía que abandonara el poder tras la muerte de un periodista de esa nacionalidad asesinado por militares nicas.
Finalmente, el dictador y la mayoría de los jefes abandonaron el país, y aunque uno de sus aliados logró hacerse con la presidencia, esta solo le duró 24 horas.
Fue entonces que un día como hoy, pero 37 años atrás, el FSLN entró triunfante en la Plaza de la Revolución de Managua, con un amplio respaldo popular, lo que representó la oportunidad de crear un nuevo país.
Comenzaron entonces las reformas para lograr aliviar la pobreza y desigualdad del país y lograr una nación más inclusiva y justa: se nacionalizaron los bancos, y se llevó a cabo un proceso de alfabetización que redujo notablemente los índices de analfabetismo.
En 1984 se efectuaron elecciones en las que el FSLN resultó victorioso, tras varios años de una contrarrevolución financiada por los Estados Unidos; pero luego de conversaciones de paz con la “contra”, un proceso de tregua y un convenio para efectuar sufragios en 1990, la coalición opositora llegó al poder.
Nicaragua vivió 16 años de gobiernos de derecha, durante los cuales se llevaron a cabo políticas neoliberales, signadas por privatizaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), que afectaron la economía nacional y los avances sociales del gobierno sandinista.
Para las elecciones del 2006 y las del 2011, el FSLN se alzó con la victoria, con Daniel Ortega como candidato.
Al día de hoy y con la guía de Ortega y su Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, Nicaragua continúa progresando en economía, educación, derechos de la juventud y protagonismo del pueblo.
Gracias a la recuperación de la gratuidad en la salud, las familias nicaragüenses cuentan con un mayor acceso a estos servicios.
En el caso de la economía, el pasado año, el Banco Central del país latinoamericano estimó que el Producto Interno Bruto creció un 4,9 %, destacándose la construcción, los servicios financieros y el comercio entre los de mayor prosperidad.
Esa nación participa de manera activa en mecanismos de concertación regional como la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la Asociación de Estados del Caribe (AEC) y el Sistema de Integración Centroamericana (SICA).