En Argentina y otros países de América Latina miles de personas marcharon contra la violencia de género

776

La marcha convocada por el colectivo #NiUnaMenos frente al Congreso de la Nación, en la Ciudad de Buenos Aires, se replicó en otras 80 ciudades del interior. La manifestación en Capital Federal comenzó a las 17 frente al Congreso de la Nación, desde donde algunas organizaciones marcharon a Plaza de Mayo. La movilización, que contó con el apoyo de organizaciones sociales, de derechos humanos, sindicales y políticas, se concretó tras un año de su primera edición en reclamo de la inmediata implementación del Plan Nacional de Acción para prevenir, erradicar y sancionar la violencia contra las mujeres».

#NiUnaMenos denunció que tras un año de la primera marcha, no se implementó el monitoreo electrónico «para asegurar que los violentos no violen las restricciones de acercamiento» y advirtió que hay provincias que aún no se adhirieron a la Ley 26.485 de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres. Asimismo, se denunció que la ley de patrocinio jurídico gratuito para víctimas de violencia de género aún no se reglamentó y que «nadie protege» a los hijos de las mujeres asesinadas.

Mientras la vicepresidenta de la Corte Suprema de Justicia, Elena Highton de Nolasco, consideró en declaraciones radiales que la justicia argentina «es machista» porque también lo son la sociedad y el mundo, y opinó que «debería haber más» presencia femenina en el máximo tribunal, la directora del Observatorio de Derechos Humanos del Senado de la Nación, Norma Morandini, manifestó que en la Argentina, «como en tantas otras estadísticas, ostentamos un récord incómodo, ser uno de los países de Sudamérica en el que se mata a más mujeres», y reclamó la aplicación de «la Ley 26.485, sancionada siete años atrás».

En la ciudad de Rosario, en tanto, los gremios que integran la CTA Autónoma marcharon «contra la violencia sexista», desde Plaza Montenegro hacia el Monumento a la Bandera, donde se hizo el acto central de la jornada.

La asociación civil La Casa del Encuentro difundió en la víspera un nuevo informe del Observatorio de Femicidios «Adriana Marisel Zambrano», que reportó 275 crímenes de género en el país entre el 1 de junio de 2015 y el 31 de mayo de 2016, una muerte cada 31 horas en promedio.

«Volvemos a gritar Ni una menos, por todas, por todos. Reclamamos por las mujeres violentadas, por las golpeadas, por las abusadas, por las amenazadas», sostiene la segunda edición de la convocatoria que el año pasado congregó a varios miles de personas, a favor de la igualdad de género, contra la violencia machista y a favor de la despenalización del aborto.

Las organizadoras también convocaron a la manifestación en nombre de «las que no pudieron gritar, por las que no pudieron salvarse, por los hijos que el femicidio deja sin madre», dijeron al sumar este año el lema «Vivas nos queremos».

Desde la marcha de 2015 hasta hoy, hubo 275 femicidios, según datos de la ONG Casa del Encuentro, la única en realizar la estadística desde 2008. «Lo que vemos es que la situación no mejoró en nada respecto del año pasado. La calle se hizo más hospitalaria para la voz de las mujeres, pero al mismo tiempo recrudeció la violencia machista», advirtió a la agencia AFP la socióloga María Pía López, integrante del colectivo #NiUnaMenos que impulsó la primera marcha.

Página 12


A un año del “Ni una menos”, 275 mujeres fueron asesinadas

En vísperas a cumplirse el primer aniversario de la multitudinaria marcha “Ni una Menos” contra la violencia de género, poco ha cambiado respecto a esta problemática. Desde esa protesta en distintos puntos del país, 275 mujeres fueron asesinadas en la Argentina, un promedio de una cada 30 horas. Además, 35 hombres murieron intentando salvarlas de los femicidas.

Los datos fueron aportados por el Observatorio de Femicidios Marisel Zambrano de La Casa del Encuentro, que realizó un informe recopilando los asesinatos de mujeres desde el 1 de junio del año pasado hasta el 31 de mayo último publicados en 120 medios de todo el país.

En el trágico listado hay una bebé, 11 niñas de entre 2 y 12 años y 29 adolescentes comprendidas en la franja etaria de 13 a 18. También, 9 adultas mayores.

Los femicidas utilizaron como metodología las armas en 66 crímenes; apuñalaron a 57 mujeres; las mataron a golpes a 40 de ellas, las estrangularon a otras 21 y quemaron a 20, siendo la incineración una de las formas más cruentas de matar mujeres en Argentina.

El informe demuestra que la vivienda sigue siendo el lugar más peligro para ellas en situación de violencia de género, ya que 171 asesinatos ocurrieron dentro de casas.

Del total de víctimas, 39 tenían denuncias judiciales, exclusión del violento y prohibición de acercamiento del maltratador.

Entre otros aportes, el informe consignó que 5 de las víctimas estaban embarazadas, 6 estaban en situación de prostitución y trata, una era originaria y que hubo 5 travesticidios.

En cuanto a características de los femicidas, 23 pertenecieron o son parte de una fuerza de seguridad y 36 se suicidaron luego de matar.

Las provincias con los índices más altos de femicidios son Buenos Aires (102), Santa Fe (23), Salta (21), Córdoba (20), Ciudad de Buenos Aires (13), Santiago del Estero (11) y Mendoza (10).

La Razón


Multitudinarias marchas contra la violencia de género en Uruguay

La convocatoria fue en varios departamentos del país. El último caso de violencia de género sucedió en Paysandú, donde un hombre fue hasta la casa de su expareja y terminó prendiendo fuego la vivienda en la que, además de la mujer, había cuatro niñas que murieron carbonizadas.

Movilizaciones en varios departamentos del país marcaron hoy una nueva marcha de la Coordinadora de Feminismos del Uruguay bajo el lema «Ni una menos», en rechazo a la violencia doméstica.

En Montevideo, Canelones, Maldonado, Colonia, Soriano, San José, Paysandú, Melo y Durazno, cientos de personas salieron a la calle para reclamar el fin de la violencia doméstica.

En Montevideo la columna abarcó varias cuadras de distancia. Partió desde la explanada de la Universidad de la República hasta la Plaza Libertad, por 18 de Julio.

«Porque nos queremos vivas», señala la publicación en Facebook, «Ni una muerta más! Ni una mujer menos!».

La última tragedia conocida en relación a violencia de género ocurrió esta semana en el departamento de Paysandú, donde un hombre fue hasta la casa de su expareja, comenzó a discutir con ella y terminó prendiendo fuego la casa en la que había cuatro niñas que murieron carbonizadas, además del agresor.

Testimonios recogidos entre los vecinos dan cuenta que la mujer salió corriendo de la casa, envuelta en llamas desde la cintura hacia abajo, y fue arrastrada por el hombre que la golpeaba en el piso mientras se quemaba viva. La mujer logró escapar; un vecino la ayudó y la acompañó hasta la casa de un primo de la víctima, a una cuadra del lugar.

El causante de la tragedia tenía antecedentes y al menos dos denuncias por violencia doméstica, realizadas por una pareja anterior.

Testigos oyeron al victimario gritarle una y otra vez a su expareja: «¡Sos mía o de nadie!».

A fines de abril, una mujer quedó grave y debió ser internada luego de que su expareja la hiriera en la cabeza con un hacha tras una discusión. El hecho ocurrió el viernes, en una casa ubicada en calle Ñacurutú esquina Cuñataí, en el barrio Parque Guaraní.

Unos días antes, en Treinta y Tres, un expolicía asesinó a una mujer, se tiroteó con agentes y luego se suicidó.

El País 


Dos miradas sobre NiUnaMenos

Deben estar presentes – Por Juliana Marino *

El colectivo Ni una menos, hoy con la consigna Vivas nos queremos, debe incluir en su denuncia la situación de Milagro Sala, presa política del actual gobierno provincial y nacional, víctima de violencia institucional al más alto nivel, víctima de discriminación y acoso político y social alentado por las esferas de poder (sobre todo el Poder Judicial) que, por el contrario, más debieran cumplir con el “basta” que el colectivo antiviolencia enarbola.

Imposible pensar este año en otra gesta como la que expresara la movilización del 2015, en relación a la extraordinaria conciencia sobre las distintas formas de violencia que se ejercen sobre las mujeres, sin abrazar la causa de la libertad de Milagro.

Imposible marchar multitudinariamente este tres de junio con la ausencia del rostro de Milagro en el conjunto que una vez más elevará su voz en contra de la violencia hacia las mujeres.

Imposible ignorar que constituye claramente un caso de violencia institucional ejercida con saña, alevosía y machismo explícito, sobre una mujer, líder social, diputada del Parlasur que, por lo tanto, debe ser una causa de tod@s.

Imposible ignorar que la justicia provincial no ha sido justicia, sino herramienta violenta de desarticulación de uno de los emprendimientos sociales provinciales más impresionantes de las últimas décadas.

No hay excusas políticas, diferencias ideológicas, metodológicas o análisis feministas que justifiquen la falta de apoyo a la causa de la libertad de Milagro.

En lo personal político propongo también rodear con un fuerte abrazo a nuestra expresidenta, víctima de violencias institucionales, políticas y mediáticas, feroces y deliberadamente organizadas, con amplia base de sustentación en un profundo desprecio hacia la capacidad de las mujeres para gobernar, conducir y liderar.

Ni una menos debiera incluir además de un decidido apoyo a Milagro, una condena a la persecución a Cristina Fernández.

Claro, ambas denuncias significarían haber superado los límites de las pertenencias sectoriales y haber comprendido verdaderamente la naturaleza del feminismo, al cual le estaríamos rindiendo el homenaje que merece, por ser uno de los acontecimientos más revolucionarios que el siglo anterior produjo.

* Ex diputada del FpV.

De la violencia se puede salir – Por Fabiana Túñez *

Hace exactamente un año, cuando aún estaba en la sociedad civil, me tocó vivir uno de los momentos más emotivos de mi vida como militante por los derechos de las mujeres, niñas y niños. Por primera vez, miles de personas de todo el país se unían para decir basta de violencia machista. Por primera vez, las familias que habían perdido a sus hijas a manos de un femicida sentían el abrazo sororal no sólo de nosotras, las “locas” feministas, sino de toda una sociedad. El #NiUnaMenos del 2015 marcó un cambio; se puso en la agenda pública por primera vez un tema en el que veníamos trabajando desde hace décadas junto a las compañeras del movimiento de mujeres y que –según el Observatorio de Femicidios en Argentina Adriana Marisel Zambrano que coordina La Casa del Encuentro–, se cobra la vida de una mujer cada treinta horas.

Aun cuando no adquiere su forma más extrema, la violencia hacia las mujeres es una realidad que nos interpela todos los días. La reciente difusión de las estadísticas de la herramienta de información, contención y asesoramiento gratuito sobre violencia hacia las mujeres (Línea 144) que gestionamos desde el Consejo Nacional de las Mujeres es una clara muestra de ello. Sólo en los primeros cuatro meses del año recibimos más de 27 mil llamadas. Más de 27 mil personas, mujeres en su abrumadora mayoría, que optaron por buscar ayuda, por reflexionar si era “normal” el trato (o destrato) que recibían de su pareja, por cuestionar si los celos y el control eran una forma de “expresar cariño”. En definitiva, mujeres que empezaron a desandar el camino de un vínculo de violencia.

Las/os profesionales de la línea –provenientes del derecho, el trabajo social y la psicología principalmente– están capacitadxs para dar asesoramiento antes, durante y después de la emergencia, las 24 horas todos los días del año. Además, la línea cuenta con un área de seguimiento de casos que se pone a disposición de las mujeres de todo el país para acompañarlas en los distintos procesos que les toque atravesar, desde la realización de una denuncia policial hasta la presentación ante la justicia. Sabemos que salir del ciclo de la violencia no es fácil, pero se puede lograr. Y es allí donde el Estado tiene la responsabilidad de dar respuestas.

Es por ello que en el mes de julio estaremos presentando, junto a la ministra de Desarrollo de la Nación, Carolina Stanley, el Plan Nacional para la Erradicación de la Violencia hacia las mujeres, de conformidad con el artículo 9º de la Ley 26.485, y que el Poder Ejecutivo adeudaba desde 2010. El Plan reúne un conjunto de propuestas de políticas públicas orientadas a abordar la violencia intersectorial y transversalmente; desde la prevención hasta la atención integral y la protección. Con una mirada federal, el Plan está pensado como una herramienta dinámica para lograr la plena implementación de la Ley 26485, y consagrar así el derecho de todas las mujeres del país a vivir una vida libre de violencia.

Este 3 de junio va a ser distinto para mí. No me toca estar reclamando sino, literalmente, atendiendo las demandas. Ante lo que estimamos va a ser una nueva expresión masiva de visibilización de la violencia hacia las mujeres, junto con mi gabinete vamos a estar trabajando en la línea 144. Porque de la violencia se puede salir, pedir ayuda es el primer paso. Llamá, estamos para atenderte.

* Presidenta del Consejo Nacional de las Mujeres.

Página 12


Argentina, Uruguay y Chile marchan contra la violencia machista

Argentina, Uruguay y Chile realizan una marcha en contra de la violencia machista y los feminicidios, cuando se cumple el primer aniversario de la multitudinaria marcha «Ni Una Menos».

«Lamentablemente una mujer sigue siendo asesinada cada 30 horas en Argentina y eso es preocupante y nos tiene que mantener alerta, no solo en la movilización, sino en los reclamos y en distintas actividades para dar visibilidad» a esta problemática, dijo días atrás a Sputnik Nóvosti la presidenta de la asociación civil ‘La Casa del Encuentro’, Ada Rico.

Este año la marcha se realiza bajo el lema «Vivas nos queremos».

En los últimos ocho años (2008-2015) fueron 2.094 las mujeres y niñas asesinadas por violencia machista en Argentina, 286 solo en 2015, según las cifras de La Casa del Encuentro.

Por su parte, la Coordinadora de Feminismos de Uruguay indica que 39 mujeres fueron asesinadas en 2015 a manos de sus parejas o exparejas y en lo que va del año la cifra de feminicidios asciende a 12.

«En 6 meses 12 mujeres fueron asesinadas por varones que las creían su propiedad», cifra que no incluye a las «niñas y niños y familiares, que mueren por la violencia feminicida ejercida por un varón con el propósito de causarle dolor a la pareja o expareja», afirma la Coordinadora de Feminismos en su página web, convocando a la marcha de esta tarde que se realizará en 14 de los 19 departamentos del país.

Por otro lado, a lo largo de este año en Chile se cometieron 14 feminicidios, según cifras oficiales.

Más de 150.000 personas se sumaron el 3 de junio del año pasado a la movilización «Ni una menos», convocada por un grupo de periodistas y activistas en Argentina para decir basta a los feminicidios tras la muerte de una joven de 14 años embarazada a manos de su pareja, que generó una gran indignación en el país.El nombre del movimiento fue tomado de un texto de la poeta mexicana Susana Chávez titulado «Ni una muerta más», escrito en reacción a feminicidios realizados en Ciudad de Juárez. Irónicamente, esta poeta fue asesinada en 2011, luego de ser una de las primeras personas en denunciar los reiterados homicidios a mujeres en su ciudad.

Sputniknews

 

Video cobertura federal

Volver

Más notas sobre el tema