Mark Feierstein, asesor del presidente Barack Obama para el Hemisferio Occidental, sobre Colombia: «EEUU quiere apoyar los acuerdos de paz a corto y mediano plazo»
Por Roberto Pombo y Sergio Góez Maseri
Mark Feierstein, asesor del presidente Barack Obama para el Hemisferio Occidental, recibió en la Casa Blanca al director de EL TIEMPO, Roberto Pombo, y a su corresponsal en Washington, Sergio Gómez Maseri, para hablar del nuevo Plan Colombia que será anunciado este jueves.
Feierstein confirma un incremento significativo en la ayuda para Colombia para el año entrante, y el nuevo énfasis de paz.
¿Cuál será el mensaje del presidente Barack Obama este jueves?
Dos cosas centrales. Primero, reconocer la transformación que ha vivido Colombia. De ser casi un Estado fallido hace 15 años, pasó a ser uno de los modelos más exitosos en la región y en el mundo, y de lo cual EE. UU. hizo parte.
También mencionará los factores que contribuyeron al éxito de este plan: un respaldo bipartidista fuerte en el Congreso de EE. UU., un apoyo sostenido a lo largo de los años y, quizá lo más importante, los esfuerzos de los colombianos, a través de tres gobiernos, que demostraron decisión política para avanzar y poner sus propios recursos. Para EE. UU. ha sido una de las iniciativas políticas más exitosas, que incluyó a tres presidentes y a dos partidos políticos. Lo segundo, y quizá más relevante, es mirar el futuro de esta sociedad entre ambos países, reconocer el prospecto de un acuerdo de paz y que la implementación de ese acuerdo será vital y complicada. Y queremos apoyarlo a corto y mediano plazo para enfrentar retos como la desmovilización y reintegración de las Farc, expandir las presencia del Estado a zonas donde no existe; proveer ayuda en salud, educación, justicia y las víctimas del conflicto. El Presidente anunciará hoy (jueves) un incremento de la ayuda para Colombia para respaldar la implementación del acuerdo si llega la paz.
¿Qué tipo de programas respaldará EE. UU. en esta nueva etapa del Plan Colombia?
Estamos mirando tres grandes áreas. Seguridad, y eso involucra antinarcóticos y desmovilización de la guerrilla. Segundo, expandir la presencia del Estado, y tercero, en justicia, restitución de tierras y reparación a las víctimas. En algunas de estas áreas llevamos ya muchos años trabajando juntos y hemos invertido muchos recursos. Pero ahora debemos consolidar lo ganado, debemos ganar la paz. A corto plazo, la paz es a veces mucho más complicada y costosa, y a veces más difícil de lograr que ganar la guerra, y queremos asegurarnos de apoyar esto desde el comienzo.
Vender incrementos en la ayuda a un país nunca es fácil. ¿Cuál es el ambiente en el Congreso para aprobar los fondos?
El presupuesto sale el 9 de febrero y ya estamos en contacto con el Congreso. El que haya existido un apoyo bipartidista fuerte en estos 15 años, que se vea al país como un gran éxito de política exterior y que se reconozca que no podemos perder lo ganado nos hacen confiar en que habrá apoyo.
¿Piensa el presidente Obama anunciar hoy el monto específico de esos nuevos recursos para Colombia?
No me quiero anticipar al Presidente, pero les puedo decir que sí anunciará figuras presupuestales específicas (para Colombia).
¿Le suena un incremento del 25 por ciento?
Lo sabrá en pocas horas. Saldrá un número. Como bien anota, es difícil incrementar el presupuesto en momentos de austeridad y a veces mantener el mismo nivel es considerado una victoria. El hecho de que el Presidente esté pidiendo un incremento demuestra lo importante que es para él Colombia.
¿Se está pensando en varios años de financiación o solo en el 2017?
Uno de los éxitos del Plan Colombia fue que se sostuvo con el tiempo, y la idea es continuarlo. Creemos que la implementación de los acuerdos tardará varios años. Desde el punto de vista del presupuesto, estamos hablando de fondos del 2017, pero como estrategia estamos pensando en varios años.
Pero este presidente ya no estará el año entrante. Tampoco será el mismo Congreso. ¿Qué garantiza que esta nueva iniciativa se sostenga en el tiempo?
El apoyo para Colombia no es ni demócrata ni republicano. Y al país no solo se le reconoce como un socio bilateral, sino como un socio regional y mundial. Los avances internos, además, le han permitido proyectarse externamente, como la ayuda en seguridad que brinda en Centroamérica. Es un país modelo y la sociedad con nosotros es económica, en seguridad, en política, en foros multilaterales, y eso se reconoce en el espectro político de Estados Unidos.
¿Está dispuesto EE. UU. a respaldar programas que incluyan a miembros de las Farc, un grupo que ustedes aún consideran una organización terrorista?
La implementación del acuerdo no será exitosa si las Farc no se desmovilizan y no se reintegran a la sociedad como miembros productivos y constructivos. Es muy importante, ya estamos apoyando ese trabajo y hace poco estuve visitando uno de los centros de la Agencia Colombiana para la Reintegración.
Los cultivos ilícitos han comenzado a crecer en el país. ¿Qué tan central será para ustedes la lucha contra los narcóticos, precisamente lo que los llevó a patrocinar el primer Plan Colombia?
Las drogas son una amenaza. Si se miran los cultivos en general, se han reducido, pero es cierto que han comenzado a crecer. Estamos conscientes de eso y el Gobierno colombiano está implementado una nueva estrategia con erradicación manual, interdicción, sustitución de cultivos, y estamos preparados para seguir apoyándolos porque no solo afectan a Colombia, sino a la región. Como en Centroamérica, donde generan violencia. Es un problema regional que toca enfrentar no solo en sus fuentes, sino en Estados Unidos porque somos corresponsables y hay que atacar la demanda.