La OEA presenta proyecto de reforma del sistema judicial para combatir la corrupción
El presidente Juan Hernández recibió por parte de la Organización de los Estados Americanos (OEA) el plan de trabajo de la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH) como una solución para el país.
La propuesta coincide con el Sistema Integral Hondureño de Combate a la Impunidad y la Corrupción (SIHCIC), planteado en junio de este año por el presidente hondureño y el Consejo de Defensa y Seguridad en aras de fortalecer la transparencia y combatir la corrupción y la impunidad.
El objetivo de la MACCIH es mejorar la calidad de los servicios que presta el aparato de justicia en Honduras, y para ello trabajará conjuntamente con las instituciones del Estado y la sociedad civil.
En ese sentido, el mandatario hondureño agradeció la oportuna y eficaz respuesta de la OEA a la solicitud que realizó su Gobierno en aras de encaminar un diálogo constructivo, sin condiciones, entre las organizaciones políticas y sociales del país.
Indicó que comparte los lineamientos estratégicos planteados por el facilitador de la OEA, John Biehl, para el establecimiento de un mecanismo de lucha contra la corrupción y la impunidad y el acompañamiento y asesoramiento para una reforma al sistema de justicia hondureño.
La propuesta de la OEA es un planteamiento único a nivel mundial, porque contempla trabajar en conjunto con el Ministerio Público, el Poder Judicial y con la veeduría social de la academia hondureña., consideró Hernández.
«Lo importante es que, después del acompañamiento de esta misión, las instituciones hondureñas queden sólidas y robustas; la independencia y el respeto a los derechos humanos es fundamental», expresó el mandatario.
Remarcó su interés en un tratamiento integral de la seguridad de los operadores de justicia, sus familias y su patrimonio; a la sistematización del conjunto de buenas prácticas, en particular para el relacionamiento del sector privado con el sector público, y a la regulación legal del financiamiento de las campañas políticas.
«Entiendo y comparto el criterio de profundizar este fortalecimiento mediante la incorporación de una dimensión de apoyo, asesoramiento y supervisión a cargo de jueces y fiscales externos, profesionales internacionales de la más alta reputación y solvencia», afirmó Hernández.
En el caso especial de los delitos de corrupción, esta dimensión debe operar como una garantía de que la justicia no tendrá reparos en llegar hasta todos los responsables de esos delitos, con prescindencia de su militancia política, dando garantías de su imparcialidad y apego a la ley, indicó.
El mandatario hondureño aseguró que la experiencia que aporten tanto jueces y fiscales internacionales como las distintas entidades del Sistema Interamericano que trabajan en la materia, incluyendo la Secretaría de Asuntos Jurídicos, la Secretaría de Seguridad Multidimensional y el Centro de Estudios de Justicia de las Américas, permitirá avanzar en la consolidación de un mejor sistema de justicia y la reducción de la mora judicial y la impunidad en todos los ámbitos en Honduras.
Hernández recordó que el diálogo tiene como punto de partida la necesidad de fortalecer la confianza en las instituciones públicas a través de una decidida lucha contra la corrupción y la impunidad.
«Este fue uno de los ejes de nuestra propuesta de campaña y lo ha sido también de nuestro Gobierno desde el primer día», expresó el presidente hondureño.
La lucha contra la impunidad y la corrupción significa para su Administración el fortalecimiento de las instituciones públicas en dos vertientes fundamentales: el combate frontal al narcotráfico y la lucha contra las irregularidades de los organismos públicos, aseguró.
En ese sentido informó que en un año y medio su Gobierno, como resultado de los escudos aéreos, marítimos y terrestres, redujo en un 72 por ciento el tránsito de drogas por el territorio hondureño.
«Destruimos e inhabilitamos narcopistas y narcolaboratorios, desarticulamos bandas dedicadas al narcomenudeo y delitos conexos de extorsión, capturamos y pusimos a disposición de la justicia una gran cantidad de narcotraficantes y estamos extraditando los principales capos de la droga», detalló.
Además detalló que desde que inició su Administración se emprendieron acciones para eliminar la corrupción en las instituciones públicas y la impunidad de la que venían gozando sus responsables.
Hernández explicó que esta tarea la empezó antes de asumir la Presidencia de la República al solicitarle al expresidente Porfirio Lobo la intervención del Instituto Hondureño de Seguridad Social.
«Descubrimos y desarticulamos, a partir de nuestra decisión de entonces, una gigantesca operación delictiva de parte de funcionarios de todos los niveles de este Instituto, que venían generando daños patrimoniales por muchos de millones de dólares a la institución y, lo que resulta más grave, produciendo daños irreparables con la disminución de atención y servicios a la población», manifestó.
Además se intervinieron otras instituciones como el Instituto de la Propiedad, las direcciones de Aduanas y Migración, la Dirección de Transporte, el proceso de compra y distribución de medicamentos, la administración de varios hospitales y centros educativos, entre otros, declaró.
El Presidente también destacó el acuerdo suscrito con la organización Transparencia Internacional, lo que convirtió a Honduras en el primer país del mundo en firmar un convenio de esta naturaleza encaminado a fortalecer los esfuerzos por adecentar el funcionamiento de la administración del Estado.
Hernández aseguró que su Gobierno tiene una visión clara y alarmante sobre las inusitadas prácticas corruptas en perjuicio de los ciudadanos, que lesionan el patrimonio público, generan desconfianza y rechazo generalizado hacia los administradores públicos, hacia los políticos y los empresarios, y constituyen una amenaza seria a la gobernabilidad.
Expresó su frustración por los altos niveles de impunidad en el funcionamiento de la justicia hondureña, que no se limitan a los casos de corrupción, sino que son generalizados y abarcan otros delitos graves.
En el caso de los homicidios, por ejemplo, se señala que permanecen sin resolver, impunes, más del 90 por ciento de los casos. Esto incluye asesinatos de alto perfil, como son los casos de periodistas, defensores de derechos humanos, profesionales y otros.
Hernández dijo que es por esta razón que su Gobierno inició una fuerte discusión sobre los mecanismos más idóneos para mejorar el desempeño de todos los operadores de justicia, incluyendo el Ministerio Público y los jueces a fin de eliminar o reducir la intolerable mora judicial a niveles comparables con los de sistemas más eficientes.
«Es una prioridad para el país normalizar y mejorar sustancialmente el sistema de justicia, a partir del perfeccionamiento técnico de sus operadores y el fortalecimiento institucional de las funciones de investigación, del Ministerio público y de los jueces», reiteró el mandatario.
Luis Almagro: El hemisferio tendrá sus ojos en Honduras
El secretario general de la OEA, Luis Almagro, dijo ayer que la propuesta de reforma al sistema judicial está orientada al logro de soluciones que reflejen la realidad hondureña.
Sostuvo que la corrupción en sus diversas formas es uno de los grandes flagelos que amenazan la gobernabilidad democrática, el Estado de derecho y el desarrollo de la democracia en el hemisferio.
“Peor que la corrupción es la impunidad, o sea, que el Estado no tenga la capacidad para sancionarla”, aseveró durante la entrega de la propuesta al presidente Hernández en la sede de la OEA.
Explicó que la iniciativa integral para el combate a la corrupción y la impunidad en Honduras es una respuesta a una solicitud presentada por el gobierno para mejorar el funcionamiento de las instituciones encargadas de impartir justicia.
La Secretaría General de la OEA ha elaborado una propuesta integral que toma en cuenta las preocupaciones y clamores de la sociedad hondureña, y cuya expresión práctica es el establecimiento de una Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih), afirmó.
“La misión estará dirigida por un jurista de reconocimiento internacional con probada experiencia profesional en la investigación de corrupción y el combate a la impunidad, y reportará directamente a la Secretaría General de la OEA”, dijo.
Afirmó que el trabajo de la misión estará enfocado en cinco grandes áreas que permitirán mejorar el funcionamiento de los operadores de justicia en Honduras.
“Esta propuesta está orientada hacia el logro de soluciones que reflejen la realidad hondureña. Se ha construido en base a experiencias exitosas de otros países, pero con singular apego al contexto hondureño”, indicó.
Expresó que para todo esto lo principal es el fortalecimiento de las instituciones de Honduras.
“La misión buscará la mejora en la calidad de los servicios que presta el aparato de justicia en Honduras y para ello trabajará conjuntamente con las instituciones del Estado y la sociedad civil”.
“Es evidente que la misión irá más allá de ser un mecanismo de lucha contra la corrupción y la impunidad. Su espíritu es contribuir a que el sistema de justicia sea una herramienta efectiva en la lucha contra la impunidad, que logre ganarse el respeto del pueblo de Honduras y se convierta en pieza esencial del sistema democrático”.
Tarea difícil
Manifestó que la labor de la Maccih “no será tarea fácil -si fuera fácil lo haría otro- es una transformación que requiere el apoyo de todos los actores del arco social, político y económico del país, además de las instituciones del Sistema Interamericano”.
“Hago pues un llamado para que recorramos juntos este camino, para que la democracia hondureña pueda gozar de la credibilidad, legitimidad y solidez que el pueblo hondureño se merece”.
“Agradezco al señor presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, y a todos quienes han depositado su confianza en la OEA para poner en práctica esta iniciativa”, subrayó el representante del organismo.
“El hemisferio tendrá sus ojos puestos en Honduras. Definitivamente es nuestro trabajo hacer que todos seamos iguales ante la ley, y los ejemplos que en la materia está dando Honduras son definitivamente ejemplos para todo el continente”.
Almagro anunció que en los próximos días un grupo de expertos de la Organización de Estados Americanos viajará a Honduras para dar los primeros pasos e impulsar los cambios que se requieren para recuperar la credibilidad del aparato de justicia.
El espíritu de la misión en Honduras será contribuir a que la justicia sea efectiva contra la impunidad y al tener el apoyo del pueblo será un refuerzo a la democracia, detalló el representante del organismo regional.