México: gobernador de Veracruz declara por el quíntuple crimen y protestan frente a su casa
El gobernador de Veracruz dio una conferencia de prensa en la que dijo que sólo había una denuncia por parte de Rubén Espinosa, tras una protesta en la que fue golpeado por manifestantes.
Horas después de que el gobernador Javier Duarte dijera que el esclarecimiento del multihomicidio en la colonia Narvarte corresponde a las autoridades del DF –no a las de Veracruz–, el gobierno del DF informó que el mandatario local tendrá que declarar ante el Ministerio Público.
Durante la promulgación de la ley para la Protección Integral de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas del Distrito Federal, el jefe de gobierno Miguel Ángel Mancera confirmó este lunes 10 de agosto que el MP se trasladará a Veracruz para interrogar a Duarte por el multihomicidio.
“He dado la instrucción a la Procuraduría General de Justicia de esta capital para que el día de mañana se traslade el subprocurador de Averiguaciones Previas con un equipo de ministerios públicos y oficiales secretarios a fin de que en coordinación con el gobierno de Veracruz puedan tener la declaración en relación los hechos”, dijo Mancera.
Agregó que esta mañana se comunicó con Duarte para decirte que se requería su “declaración directa” sobre los hechos.
Dos de las personas asesinadas el 31 de julio pasado, el fotoperiodista Rubén Espinosa y la activista Nadia Vera dejaron la entidad gobernada por el priista luego de recibir amenazas. Espinosa dijo a la organización Artículo 19 que fue amenazado por su labor periodística, mientras que Vera grabó un video en el que responsabilizó a Duarte si algo malo le ocurría a ella o a su familia.
No corresponde a Veracruz esclarecer el multihomicidio en Narvarte: Duarte
Esta mañana, Javier Duarte dijo que el asesinato de Espinosa, Vera, la mujer colombiana Mile Virginia Martín, la trabajadora doméstica Alejandra Negrete Avilés y la joven Yesenia Quiroz ocurrió en el Distrito Federal, no en Veracruz, por lo tanto no corresponde a las autoridades de su estado investigarlo.
Esta es la primera vez que el gobernador priista se ha referido al multihomicidio ocurrido el pasado 31 de julio en la colonia Narvarte, en la Ciudad de México.
En entrevista con el periodista Ciro Gómez Leyva, luego de dar una conferencia de prensa en Veracruz –en la que no aceptó preguntas de la prensa–, Duarte Ochoa calificó el multihomicidio como un hecho “lamentable y condenable”, pero dijo que no corresponde a su entidad investigarlo. Esto, a pesar de que Rubén Espinosa y Nadia Vera dejaron esa entidad tras recibir amenazas; incluso hay un video en el que Vera responsabilizó directamente a Duarte por cualquier cosa que pudiera ocurrirle a ella o a su familia.
Al respecto, en su mensaje a medios, el funcionario estatal dijo sobre Vera: “No quiero ser omiso de que señaló, en alguna entrevista, que era responsabilidad de mi gobierno su seguridad como ciudadana que residía en este estado (…) Expresión que comparto plenamente (…) En Veracruz trabajamos para garantizar la seguridad y protección de quienes viven aquí. Mi gobierno es, y seguirá siendo, responsable de proteger a la ciudadanía a lo largo y ancho de nuestro territorio”.
“De manera particular, de generar condiciones para el ejercicio libre del periodismo. Somos respetuosos de la manifestación libre de las ideas, de la libertad de manifestarse y de todas las expresiones sociales que se dan en el Estado”, agregó.
En entrevista con Gómez Leyva, de Grupo Fórmula, Duarte descartó la posibilidad de pedir licencia mientras se investiga el multihomicidio, por el que ya hay una persona detenida acusada de feminicidio, homicidio y robo agravado en pandilla.
Y se refirió a la declaración que hizo en una reunión con periodistas en junio pasado, cuando les pidió “portarse bien”; justificó que esas palabras no fueron dirigidas sólo al gremio periodístico, sino que fue un “exhorto” a que toda la comunicad de Poza Rica que conduzca con legalidad.
En junio pasado, Duarte dijo: “Lamentablemente algunos de los colaboradores, trabajadores de los medios de comunicación, tienen vínculos con estos grupos (de la delincuencia organizada) Todos sabemos quienes andan en malos pasos (…) no nos hagamos como que la virgen nos habla es otra historia, pero todos sabemos quienes tienen vínculos y quienes están metidos con el hampa. Pórtense bien por favor, se los pido”.
Veracruz es considerado el estado más peligroso del país para ejercer el periodismo. Desde que asumió el cargo el gobernador Javier Duarte en 2010 han sido asesinados 13 periodistas, 11 en ese territorio y dos después de abandonarlo. Tres más están desaparecidos, de acuerdo con información del Comité para la Protección de Periodistas.
Llevan protesta hasta la residencia oficial de Javier Duarte; exigen su renuncia
Tras nueve días de indiferencia oficial ante el cúmulo de protestas y plantones por los asesinatos del fotoperiodista Rubén Espinosa y de la activista Nadia Vera, unas mil personas decidieron trasladar los actos de repudio a la residencia donde pernocta y ocasionalmente tiene juntas de trabajo el gobernador Javier Duarte.
Activistas, académicos de la Universidad Veracruzana (UV), ambientalistas, estudiantes y comunicadores se concentraron frente al número 302 de la calle 24 de Febrero, en la colonia 2 de Abril, para gritar consignas en contra del mandatario priista y exigir su renuncia.
Los manifestantes colocaron una ofrenda floral en la entrada trasera de la residencia oficial y en la entrada principal. Además, colocaron cartulinas de consigna: “Fuiste tú”, “Javier Duarte, fuiste tú”, “Ni perdón ni olvido, castigo a los asesinos”.
Sobre la placa que da la bienvenida a la “Casa Veracruz”, periodistas depositaron flores blancas y colocaron retratos tanto de Rubén Espinosa como de Nadia Vera.
El acto de protesta partió de la plaza Lerdo –renombrada plaza Regina Martínez por Espinosa Becerril–, transitó por Viaducto, Enríquez, Revolución y 20 de Noviembre, hasta llegar a la residencia oficial de Duarte de Ochoa.
Ahí, los elementos de ayudantía y custodios del mandatario priista prefirieron guarecerse en el interior del inmueble, mientras cámaras monitoreaban el copioso número de inconformes.
La marcha, que arrancó con 500 personas, se multiplicó media hora después, ya que diversos ciudadanos y estudiantes se fueron sumando en los alrededores de la calle Enríquez y Revolución.
Otros ciudadanos que ni siquiera conocieron a Rubén y Nadia portaron cartulinas con la siguiente leyenda: “¿Y si la siguiente fueran tus hijos, tu esposa, tu hermano… seguirías diciendo que en Veracruz no pasa nada?
El acto de protesta fue presidido con una lona negra con los rostros de Espinosa y de Vera, así como la leyenda que ya circula de forma viral en redes sociales: “Sabemos quién fue”, en alusión a los cuerpos de la SSP estatal.
“Mancera, no protejas a Javier Duarte”, “Montano, guarura de Duarte” y “la libertad de expresión es un pase a la muerte”, eran algunas de las consignas que los manifestantes y activistas gritaron durante el trayecto de la marcha.
Los periodistas de Xalapa y de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río se sumaron a la convocatoria de protestas para conmemorar los nueve días del cruento asesinato, y lo hicieron vestidos de blanco, portando una flor (para exigir paz) y con máscaras de papel con el rostro de Rubén Espinosa.
“Libertad de expresión, alto ya a la represión”, fue otra de las consignas de los compañeros del fotoperiodista de Proceso y Cuartoscuro.
En el acto de protesta, Norma Trujillo, de La Jornada Veracruz, leyó un comunicado en el que recordó que Espinosa dio un “grito de auxilio” que no fue escuchado en las altas esferas de gobierno ni en las organizaciones protectoras de periodistas: “Ni lo vieron ni lo oyeron”, sentenció.
Trujillo expuso que hoy en el gremio hay luto por el dolor de ver partir a un fotoperiodista que fue incómodo al poder, que le gustaba denunciar la corrupción, pero sobre todo exigir justicia para los compañeros asesinados.
“Gritó ‘estoy aquí, no quiero ser el siguiente’, lo dijo ante diputados y autoridades… nadie lo escuchó”, deploró.
Otros activistas recordaron que desde 2012 han sido atacados sistemáticamente por autoridades y policías de la SSP, quienes los han detenido sin motivo alguno, los han golpeado, intimidado y amenazado.
“Al día de hoy el hostigamiento no ha cesado; por el contrario, aumenta, es más duro, más directo desde el fin de semana del brutal asesinato. La SSP, Fuerza Civil, los ministeriales, los policías vestidos de civil rondan nuestras calles, nuestros barrios, vigilan nuestras casas, nos toman fotos.
“Elementos de la Fuerza Civil han detenido a compañeros sin motivo para llevarlos a los separos y amedrentarlos por horas, fuera de proceso, sin cargos. Así andamos, con el aguijón de la amenaza tras la nuca”, expresó Edith, una de las activistas.
En la marcha fueron visibles varios investigadores y académicos de la UV, quienes aseguraron que ya “la sociedad está harta de la violencia, la represión y de una administración estatal que va a la deriva”.
Duarte se deslinda del multihomicidio en la Narvarte: es asunto del DF, dice
El gobernador Javier Duarte salió al paso de las críticas por la muerte del fotoperiodista Rubén Espinosa y la activista Nadia Vera al sostener que no renunciará y que el trágico suceso corresponde resolverlo al gobierno de Miguel Ángel Mancera, pues los hechos ocurrieron en la Ciudad de México, “no aquí”.
“Yo tengo un mandato muy claro por los veracruzanos, que tengo que cumplir puntualmente y trato de honrar ese mandado día con día con toda mi capacidad, con todo mi tiempo, con todo mi profesionalismo”, subrayó el polémico mandatario veracruzano en entrevista con Ciro Gómez Leyva, en Radio Fórmula.
Duarte tampoco se mostró dispuesto a comparecer ante la Comisión Permanente del Congreso; insistió en que “este es un caso que ocurrió en el DF, no en Veracruz”, y aclaró que tampoco le corresponde pedir a la PGR que atraiga la investigación.
“Es un tema que ocurrió en el DF, es un tema que no ocurrió en Veracruz y, bueno, yo estoy atento a lo que la ley señale, simplemente cumplir con lo que la ley y la normatividad me señale, y así actuaré siempre”, dijo.
Duarte de Ochoa negó haber solicitado pedido a sus amigos del PRI y del PVEM su ayuda para evitar ser llamado a comparecer al Congreso,
–¿Tendrías algún problema si te citaran? –insistió el periodista.
–Repito, es un tema que ocurrió en el Distrito Federal, es un tema que no ocurrió en Veracruz y bueno yo estoy atento a la ley –atajó el gobernador.
Tampoco –afirmó– pidió ayuda a sus amigos verdes y priistas para que la PGR atraiga el caso.
–Le pediste al Partido Verde y al PRI que te ayuden a evitar que el caso sea atraído por la PGR –preguntó el conductor de noticias.
–Negativo, negativo, primero que nada quiero señalar que este es un caso que sucedió en el Distrito Federal, no en Veracruz, es decir, es un tema que corresponde a las autoridades del Distrito Federal, y por ende, en todo caso, quienes tendrían que solicitar la atracción a la PGR o no, son las autoridades del DF, no de Veracruz.
Luego insistió en que debe quedar claro que se trata de un asunto que corresponde resolver al gobierno de Mancera, al que su gobierno ha ofrecido apoyo, dado que dos de las cinco víctimas que fueron brutalmente asesinadas en la colonia Narvarte “residieron en tiempos recientes, aquí, en la ciudad de Xalapa”.
“Ese es el nexo que conecta al estado de Veracruz con este lamentable suceso, de ahí en fuera lo que podamos aportar lo haremos siempre con disposición e inmediatez”, ofreció.
Según Duarte, el Ministerio Público solicitó copia de las denuncias ante la Fiscalía General del Estado (FGE), pero sostuvo que no se contaba con denuncia alguna interpuesta por Rubén Espinosa o Nadia Vera.
La única de que se tiene registro, admitió, es la que interpuso el fotoperiodista y colaborador de Proceso en 2013 ante la PGR, ante la Fiscalía Especializada en Delitos contra la Libertad de Expresión (Feadle), con motivo del operativo de seguridad realizado en la plaza Lerdo, ubicada frente a palacio de gobierno de Veracruz, durante las celebraciones de las fiestas patrias el 14 de septiembre de ese año.
Tras esa denuncia, comentó, el fotoperiodista vivió dos años más en Veracruz y se marchó al DF tras la cobertura de una movilización en Xalapa, el 8 de junio, donde recibió amenazas verbales y físicas por parte de encapuchados, por lo que el 9 de junio partió a la capital del país y nunca regresó. De su salida, aclaró, supo porque el propio Rubén la hizo pública, no porque lo estuvieran vigilando.
Duarte de Ochoa afirmó que cuando se enteró del multihomicidio personalmente habló con Mancera “para ponerme a su disposición, para poder apoyar en lo que pudiera hacerlo en este caso y, de esta manera, que pudiera tener los elementos que nosotros pudiéramos otorgarle para esclarecer este caso”.
También afirmó que el mensaje que pronunció en Poza Rica el pasado 31 de junio, en el que pidió a los periodistas portarse bien tras advertir “que sacudiría el árbol y caerían muchas manzanas podridas”, fue malinterpretado y sacado de contexto.
El mensaje, abundó, se hizo en la víspera del operativo Blindaje Poza Rica, el cual consiste en “el desmantelamiento de lo que era la Policía Intermunicipal Poza Rica-Coatzintla-Tihuatlán y la entrada de la nueva institución policiaca que se llama Fuerza Civil de Veracruz”, institución de élite de seguridad pública que entró en funciones el 1 de julio.
Previo a las entrevistas a medios nacionales, Duarte convocó a rueda de prensa en la sala Banderas del palacio de gobierno, donde se prohibió la entrada a varios reporteros y corresponsales. En el acto, el gobernador dijo “respetar la libertad de expresión y de manifestación”.
Sobre la edición 2023 de Proceso, actualmente en circulación, donde se destaca la impunidad que prevalece en los asesinatos de comunicadores en la entidad, Duarte aseguró que nueve de los casos han sido atraídos por la PGR y a esta dependencia federal corresponde dar una definición legal.
El caso Regina
Es más, Duarte de Ochoa aseguró que el homicidio de la corresponsal del semanario en la entidad, Regina Martínez Pérez, ocurrido el 28 de abril de 2012, ya se “encuentra resuelto”, aunque admitió que hay un asesino prófugo, en el caso de José Adrián Domínguez Hernández, El Jarocho.
El priista reapareció este lunes luego de nueve días de mantener un bajo perfil tras multihomicidio registrado en la colonia Narvarte del Distrito Federal.
En su reencuentro con la prensa, resaltó que en la entidad hay cerca de 8 mil reporteros y más de 500 medios impresos y electrónicos, aunque a la conferencia sólo se permitió el acceso a 27 comunicadores.
Quienes pudieron acceder al acto, entre camarógrafos, reporteros y fotógrafos, fueron sometidos a una rigurosa revisión para evitar que se filtrara alguna cartulina de repudio al artero asesinato de Rubén Espinosa.
El gobernador también aseguró que la mayoría de los asesinatos de comunicadores –solo reconoció 11 casos, no 14– fueron atraídos por la PGR.
Al ahondar en el caso de Espinosa Becerril, Duarte no dedicó palabra alguna a las denuncias públicas del colaborador de Proceso, en el sentido de que elementos de la SSP, Secretaría de Gobierno y ayudantía lo hostigaban y lo habían amenazado con anterioridad.
“Gobierno y la Fiscalía General del Estado han tenido y mantendrán una permanente comunicación con las autoridades del Distrito Federal, y en especial con la Procuraduría General de Justicia, a fin de atender cualquier solicitud de colaboración que requieran.
“Así lo hicimos desde el momento en que los agentes del Ministerio Público del DF requirieron copia de las denuncias que hubiesen presentado ante la Fiscalía General del Estado Rubén Espinosa o Nadia Vera. El fiscal general dio contestación inmediata en el sentido de que no se contaba con denuncia alguna”.
Luego argumentó que en los últimos cinco años han sido asesinados 97 comunicadores en el país, de los que Veracruz acumula sólo 10% de los casos.
“Vemos con preocupación la muerte de 97 periodistas ocurridos a lo largo del país desde 2010. Once de esos casos, lamentablemente, han ocurrido en nuestra entidad. Es por ello que hemos realizado grandes esfuerzos como gobierno para generar condiciones necesarias para el libre y seguro ejercicio de la profesión”, acotó.
El restringido acceso a la rueda de prensa generó la burla e irritación de diversos comunicadores, quienes la redes sociales anotaron: “Han abierto un nuevo antro en Veracruz, se llama El Palacio… Sus dueños, se reservan el derecho de admisión”.