Senadores españoles visitaron al líder opositor preso Antonio Ledezma
Un grupo de senadores españoles de diferentes organizaciones políticas arribó a Venezuela y se reunió con el alcalde mayor de Caracas Antonio Ledezma, quien está preso desde febrero por presuntos delitos de conspiración y se encuentra recluido en su domicilio.
«Hemos tenido una reunión larga con Antonio (Ledezma). Lo hemos visto fuerte e ilusionado», declaró a los medios Joseph Maldonado, senador del partido Convergencia i Unió (CiU).
Ledezma, de 60 años, alcalde mayor de Caracas reelecto en 2013, fue detenido el 19 de febrero y enviado a una prisión militar acusado de «apoyar a grupos que pretendían desestabilizar el país». En abril, se le dio casa por cárcel tras ser sometido a una cirugía.
Se prevé que los senadores Maldonado del CiU, Dionisio García Carnero del Partido Popular (PP), Iñaki Anasagasti del Partido Nacionalista Vasco (PNV) y Andrés Gil del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), intenten visitar en prisión al opositor radical Leopoldo López y al exalcalde de San Cristóbal (Táchira, oeste) Daniel Ceballos, acusados de incitar a la violencia en las protestas antigubernamentales que dejaron 43 muertos entre enero y mayo de 2014.
Maldonado declaró que la intención es «conocer la realidad» y «ver el estado físico y psíquico de los presos políticos».
El defensor del pueblo venezolano, Tarek William Saab, calificó de «injerencista» la visita de los políticos españoles, que se reunirán con la coalición opositora Mesa de la Unidad (MUD).
El senador García Carnero dijo a una radio local que el grupo solicitó entrevistas con representación de la Fiscalía y con Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional, pero que hasta el momento no habían tenido respuesta.
También señaló que pretenden ofrecerse ante el Consejo Nacional Electoral como «observadores electorales internacionales» en los próximos comicios legislativos convocados para el 6 de diciembre.
En junio, el exjefe de gobierno español Felipe González visitó Caracas y se reunió con el encarcelado Ledezma y miembros de la MUD, pero abandonó el país dos días después al no recibir autorización para visitar a López y Ceballos.
También en junio, varios senadores brasileños, tanto de la oposición como aliados del gobierno, llegaron a Caracas con el mismo objetivo y abandonaron el país horas después sin poder cumplir su agenda y con denuncias de que la furgoneta en la que se movían fue atacada por un grupo de manifestantes, a los que identificaron como simpatizantes del gobierno venezolano.