Miles de trabajadores de la industria del acero marchan contra la libre importación del metal
Con el despido de al menos 4 mil 500 trabajadores y una reducción en las inversiones, miles de personas salieron a las calles de Monclova, Coahuila, para reclamar al gobierno de Enrique Peña Nieto la falta de acciones de contingencia contra la crisis acerera generada por la política de libre importación del metal.
A una semana de que el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, anunciara que no implementarían ninguna medida de protección “setentera”, y luego de rechazar que hubiera despidos de personal, la concentración de esta tarde ocurrió de manera coincidente con el despido de 700 empleados de confianza de Altos Hornos de México (Ahmsa), una de las dos acerías más grandes del país con sede en esa ciudad del norte, que inició el recorte el pasado lunes 15.
La Policía Municipal de Monclova estimó en 15 mil personas los asistentes a la marcha, en la que participaron lo mismo dirigentes sindicales, obreros con sus familias y taxistas, que empresarios del transporte, industriales de los sectores acerero, minero y de la construcción, así como alcaldes de la región y legisladores locales y federales.
El contingente salió esta tarde de la explanada del complejo siderúrgico para caminar unos 5 kilómetros hasta la plaza de armas de la ciudad, donde dirigentes sindicales y actores sociales realizaron diferentes pronunciamientos contra la persistencia del gobierno de la República por mantener un arancel cero y evitar salvaguardas para la producción nacional.
En su edición 2017, actualmente en circulación, la revista Proceso publicó un reportaje en el que da cuenta de la crisis acerera, así como de los desatinos de diferentes funcionarios, entre otros de Guajardo Villarreal, quien a principios de mes se reunió con los industriales siderúrgicos, pero no ofreció soluciones.
En dicho reportaje se describe la crisis acerera mundial producto de una sobreproducción de acero chino, que ha obligado a las economías avanzadas, incluidas las de Estados Unidos y Canadá, a tomar previsiones para la competencia desleal.
Las políticas instrumentadas por la Secretaría de Economía son calificadas de dogmáticas por el director de Relaciones Internacionales y Comunicación de la empresa DeAcero, Juan Antonio Reboulen, de manera coincidente con su homólogo en Ahmsa, Francisco Orduña.
Los dos ejecutivos empresariales acusaron la tendencia de las políticas económicas a la desindustrialización, mientras que la Cámara Nacional del Hierro y el Acero (Canacero) ha mantenido una postura crítica ante el gobierno por su inamovilidad, lo que ya devino en el despido de al menos 7 mil personas en Coahuila y Nuevo León, además de mantener en paro técnico diferentes operaciones de Sicartsa en Lázaro Cárdenas Michoacán.
Al finalizar la marcha de desempleados y sindicalistas, Sergio Rolando Medina Ibarra, dirigente del Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Conexos (corporativo escindido del antiguo sindicato minero que dirige desde el exilio Napoleón Gómez Urrutia), encabezó un mitin en la Plaza de Armas de Monclova.
Acompañado por los dirigentes de aproximadamente 10 antiguas secciones sindicales, representantes de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y otros corporativos gremiales, así como de legisladores locales y federales surgidos del PRI, lanzaron consignas contra las políticas del gobierno federal para el sector.
Ahmsa, por su parte, reiteró esta tarde que debió reducir su producción de acero, y amagó con despedir a 4 mil trabajadores más si no se implementan medidas inmediatas. Por la cadena productiva de la región, eso impactaría prácticamente a todo el norte de Coahuila, elevando a cerca de 20 mil la cantidad de empleos perdidos.