Mandatarios y cancilleres del ALBA se reúnen en Caracas para tratar agresión de EEUU a Venezuela
Presidentes y primeros ministros de los 11 países miembros del bloque regional se dan cita hoy en el Palacio de Miraflores para definir una posición común ante la agresión a Venezuela y para la Cumbre de las Américas que será en abril en Panamá.
Con la certeza de unificar criterios para fijar posición ante la VII Cumbre de las Américas, con pleno sentido antiimperialista y en apoyo a Venezuela por la reciente agresión de Estados Unidos, el presidente Nicolás Maduro recibe hoy en Caracas a los mandatarios de los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).
Cuba, Bolivia, Nicaragua, la Mancomunidad de Dominica, Ecuador, San Vicente y las Granadinas, Antigua y Barbuda, juntan fuerzas para fijar posición, como antesala a la séptima reunión continental que acogerá Panamá el 10 y 11 de abril, donde deberán participar 35 naciones, incluyendo a Cuba, que había sido excluida en 1962 como miembro de la OEA pero fue restituida en junio de 2009.
Al respecto, el presidente Maduro anunció el pasado domingo, al recibir los poderes habilitantes de parte de la Asamblea Nacional: “Vamos a la cumbre de Panamá, si así se decide en la ALBA, a decirle a Obama, en una sola voz, que a Venezuela, a Latinoamérica y el Caribe se respetan. Ya basta de abusos imperiales, ha llegado el tiempo de una nueva relación”.
Maduro adelantó que los países que integran la ALBA ya han presentado posiciones y propuestas comunes en otras oportunidades, por lo que se espera un bloque más sólido en esta oportunidad.
Alca, Alca al carajo
No es la primera vez que en la reunión continental se presenta un debate frente a las posiciones de los EEUU.
El lustro de 2000 a 2005, presentó a personajes como Néstor Kirchner en Argentina, Evo Morales en Bolivia, Lula Da Silva en Brasil y Tabaré Vázquez en Uruguay, que se unieron a la línea lanzada por Chávez en Québec, Canadá, en el marco de la III Cumbre de las Américas, donde cuestionó la creación del Área de Libre Comercio de las Américas, ALCA.
Unidad que cristalizó en 2005 con un abarrotado Estadio José María Minella, de Mar del Plata, en la IV Cumbre de las Américas, donde decretaron la muerte del ALCA y el nacimiento del ALBA.
Allí llevó la voz cantante el Comandante Chávez: “Cada uno de nosotros trajo una pala, una pala de enterrador, porque aquí en Mar del Plata está la tumba del ALCA. La tumba del ALCA. Vamos a decirlo: ALCA, ALCA, al carajo” y agregó que “venimos inspirados en los principios de esta Patria Grande”, sentenció.
Conjuntamente con la IV Cumbre de las Américas, se realizó la III Cumbre de los Pueblos, en la que se trataron temas de ámbito social en diferentes foros desde ópticas críticas y hasta antagónicas respeto de la Cumbre.
En esta cumbre se escucharon reiteradamente las consignas No a Bush y No al ALCA, y se hizo hincapié en la Alternativa Bolivariana para América (ALBA). La cumbre terminó con una marcha encabezada por el Gigante Hugo Chávez, para entonces presidente de Venezuela; organismos de derechos humanos; Adolfo Pérez Esquivel, ciudadano argentino Premio Nobel de la Paz de 1980; Silvio Rodríguez, cantautor cubano; Manu Chao, cantante y activista francés; Evo Morales, presidente de Bolivia y las Madres de Plaza de Mayo, todos éstos, en repudio de la presencia del presidente estadounidense en suelo argentino.
Con incansable accionar independentista, Chávez alzó su verbo en las últimas Cumbres de las Américas, donde siempre sumó.
También destaca el capítulo vivido en Puerto Príncipe el 18 de abril de 2009, previo a la V Cumbre de las Américas, cuando el Comandante Eterno Hugo Chávez, cifrado de esperanzas por posibles relaciones de equidad ante el novel mandatario estadounidense, Barack Obama, la noche inaugural de la cumbre los presidentes (Obama y Chávez) se saludaron justo antes de la ceremonia. Chávez sorprendió a los presentes al estrechar manos con Obama y saludarlo en inglés diciendo “Quiero ser tu amigo”.
Al día siguiente, justo antes de empezar la reunión entre Estados Unidos y Unasur, Chávez se dirigió a la mesa donde el presidente Obama se encontró para ofrecerle de regalo el libro Las venas abiertas de América Latina, (obra de Eduardo Galeano) con un “A Obama con afecto”, y se quedó a la espera de posturas de respeto.