Muerte del fiscal Nisman: el gobierno argentino solicita custodia especial para el ex agente Jaime Stiuso

397

El gobierno de Cristina Fernández solicitó a la fiscal Viviana Fein custodia especial para el ex agente de inteligencia Antonio «Jaime» Stiuso, citado a prestar declaración como testigo en la causa en la que se investiga la muerte de quien fuera el titular de la UFI AMIA, Alberto Nisman. Según informó en un comunicado el Ministerio de Seguridad, la titular de esa cartera, Cecilia Rodríguez, «envió una nota a la titular de la Fiscalía Criminal de Instrucción N°45, Viviana Fein, transmitiéndole que considera ‘necesario y oportuno brindar servicio de custodia al Sr. Antonio Horacio Stiuso'».

En la carta, la ministra expresó que estima prudente brindar custodia a Stiuso «en virtud de la trascendencia pública que ha tomado su persona, la divulgación de su imagen y la información publicada sobre amenazas recibidas en distintos medios de comunicación de fecha reciente».

La situación de Stiuso es hoy un problema de cada vez más difícil solución para la investigación. La fiscal Fein aún no pudo determinar cuándo, ni en qué lugar tomará la declaración testimonial. Y su intención de hacerlo a solas, acompañada por un funcionario de la fiscalía, podría verse frustrada por una cuestión procesal.

La declaración del ex espía se ha convertido en un acto trascendente de la investigación, y como tal, las partes tienen derecho a controlarlo. La querella que representa a la madre, Sara Garfunkel, y a la ex mujer de Nisman, la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado podrían pedir estar presentes al momento de la declaración e incluso interrogar al testigo.

Lo propio podría hacer (si es que no lo hizo ya), aunque con menos posibilidades de éxito, el abogado Maximiliano Rusconi, defensor de Diego Lagomarsino, el ex empleado de la fiscalía especial para el atentado contra la mutual judía, quien le «prestó» a Nisman el arma que le causó la muerte.

La ministra Rodríguez puso a disposición de la fiscal Fein «el personal de las fuerzas policiales y de seguridad, en caso que decida solicitar la custodia». Nada peor podría pasarle a la investigación que Stiuso sufriera un contratiempo, de cualquier tipo y gravedad, que le impidiera declarar ante la justicia.

«La Fiscalía informa que se están evaluando las condiciones con las que llevará a cabo la declaración del ingeniero Stiuso, para resguardar la integridad personal del testigo», expresó lacónicamente la fiscalía. Pero, más allá de la formalidad de la declaración, avanzó sobre información que Tiempo Argentino publicó el viernes último. «Del entrecruzamiento de los llamados telefónicos efectuados desde y hacia la línea Nextel a nombre de Alberto Nisman, se desprende que las reiteradas comunicaciones recibidas al abonado cuya titularidad se informó que corresponden al ingeniero Stiuso fueron efectuadas desde el número del fallecido fiscal. Se aclara que el registro que obra en el expediente detalla las comunicaciones entrantes y salientes, no reflejan el contenido.»

Pese al lenguaje críptico, el comunicado aclara que las llamadas que emitió Nisman tuvieron como destino «al abonado cuya titularidad se informó que corresponden al ingeniero Stiuso». Pero, según determinó la fiscalía y reconoció el propio abogado de Stiuso, Santiago Blanco Bermúdez, el ex agente de inteligencia tenía una flota de un centenar de líneas. ¿Nisman pudo haberse comunicado con otra persona y no con Stiuso en esos contactos? La fiscal sólo lo sabrá cuando tenga enfrente al testigo más esperado de la causa.

Por lo pronto, los datos (aún muy parciales) de las comunicaciones de Nisman lo muestran a él muy activo, llamando más que siendo llamado. La propia diputada por el PRO Patricia Bullrich reconoció en su declaración que el fiscal la llamó en cinco oportunidades durante el fin de semana trágico de su muerte. Estaba preocupado por su presentación del lunes siguiente ante el Congreso, que nunca llegó a concretarse.

¿Cómo estaba Nisman en esas horas previas a su deceso? Durante el fin de semana trascendió que el examen químico de la autopsia habría revelado la presencia de alguna «sustancia extraña» en el cadáver. Así, al menos, lo publicó el matutino Perfil. La fiscal Fein aún no recibió la información oficial y, de hecho, eludió mencionar –ni para confirmar, ni para descartar– el tema.

En el departamento, durante el allanamiento que se realizó cuando fue hallado el cadáver, se encontraron productos para un tratamiento de la dermis, medicamentos de venta libre y una sola sustancia que podría merecer, dentro de un marco de amplia relativización, el calificativo de «extraña»: Clonazepan, un fármaco depresor del sistema nervioso central, con características de ansiolítico.

Siguen demoradas las pruebas sobre los aparatos de telefonía de Nismam. «La Fiscalía envió cédulas a las partes, informando los puntos de peritaje sobre los cuales deberán pronunciarse a fin de que la División de Apoyo Tecnológico de la PFA inicie el análisis de los teléfonos celulares, tablets y otro dispositivos. Se está a la espera de los puntos de peritaje que soliciten las partes.» En otras palabras: todavía la fiscalía desconoce qué hay en esos aparatos.

Echaron ayer al «ñoqui» Lagomarsino

En duros términos, el director de Comunicación de la Procuración General de la Nación, Luis Villanueva, confirmó ayer que el Ministerio Público Fiscal rescindirá el contrato que vinculaba laboralmente al «asesor informático», Diego Lagomarsino, con ese organismo. Dijo que no se permitirá «una institucionalización del ñoqui».

«Hoy (NdR: por ayer) se le rescinde el contrato a Lagomarsino y al abogado (Claudio) Rabinovich, que tenía locación de servicios», afirmó Villanueva.

En diálogo con Radio Nacional Rock, el funcionario explicó que «todas las contrataciones tanto de planta permanente como de locación de servicios en la Fiscalía eran pedidos y las selecciones hechas por (el fiscal Alberto) Nisman.»

«Nisman decidía el monto que cobraban, hacía la propuesta de las personas y teíia presupuesto propio», afirmó, al tiempo que destacó que «las contrataciones se hacían por los montos que él decía y las personas que él decía».

No obstante, Villanueva admitió que «no es normal que haya contratos por $ 41 mil», como el de Lagomarsino.

«El nuevo fiscal (Alberto Gentili) solicitó que se le dé baja a Lagomarsino, porque le consta que no trabajó. No vamos a hacer una institucionalización del ñoqui», remarcó.

Desmentida a Clarín

«Ante trascendidos periodísticos, la doctora (Viviana) Fein comunica que durante el tiempo que demande la investigación y en procura de la obtención de la verdad objetiva sobre la muerte de Alberto Nisman no pedirá licencia alguna.»

Fein salió al cruce del mantra que repitieron ayer, sobre todo durante la mañana, dos de los brazos del Grupo Clarín –TN y Radio Mitre–. Ambos medios anunciaron que la fiscal había aplazado sus vacaciones a marzo.

En uno de los apartados del comunicado que difundió ayer, Fein se comprometió a mantenerse en su puesto de trabajo «durante el tiempo que demande la investigación» sobre la muerte a su colega.

Fein tenía pensado tomarse licencia durante 10 días este mes. Pero luego, en simultáneo con su admisión de que en el expediente había un borrado de la denuncia del fiscal, anunció que continuaría revistiendo tareas.

Testimonial

La intención de Fein de tomar la testimonial a Stiuso a solas podría verse frustrada por una cuestión procesal. La querella podría pedir estar presentes en la declaración, e incluso interrogar al testigo. Lo propio podría hacer Rusconi.

Tiempo Argentino

Más notas sobre el tema