Colombia: comunicado de las FARC denuncia aumento de la persecución política

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Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Ejército del Pueblo (FARC-EP) denunciaron este domingo que en su país continúan en incremento las amenazas y las persecuciones políticas y señalaron que el asesinato del dirigente agrario Carlos Pedraza es ejemplo de ello.

En un comunicado la insurgencia deploró y condenó el homicidio de Pedraza y recalcó que “la muerte del dirigente se produce en momentos en que en Colombia se multiplican las amenazas y la persecución política contra dirigentes populares de la oposición”.

El grupo rebelde también dijo que “el Estado no es extraño” a esta situación y recalcó que Pedraza era “dirigente cívico del Congreso de los Pueblos, defensor de derechos humanos e integrante de la Cumbre Nacional Agraria, Campesina, Étnica y Popular”.

“Durante el desarrollo de las conversaciones de paz, desde la Mesa de La Habana, las FARC- EP hemos levantado la voz de protesta contra las amenazas cotidianas a defensores de derechos humanos, y contra toda esta situación de connivencia de la necrosada institucionalidad, con el paramilitarismo, lo cual sin duda se enmarca dentro del desenvolvimiento del terrorismo de Estado”, indicó el texto oficial.

Las FARC sostuvieron que este nuevo crimen es “sumamente grave y de enorme afectación para la búsqueda de la paz, al tiempo que reprueban el guerrerismo de un régimen que se niega a tomar medidas prontas y eficaces de desescalamiento del conflicto”.

Por último, el grupo indicó que “exigimos respuestas claras y soluciones a los crímenes contra el movimiento popular colombiano”.

Reproducimos a continuación el comunicado de la delegación insurgente:
En solidaridad con el Congreso de los Pueblos

La Habana, Cuba, sede de los diálogos de paz, Enero 25 de 2015

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC-EP, deploran y condenan el asesinato del compatriota Carlos Alberto Pedraza Salcedo, dirigente cívico del Congreso de los Pueblos, defensor de derechos humanos e integrante de la Cumbre Nacional Agraria, Campesina, Étnica y Popular, quien fue encontrado por miembros de la Policía Judicial, sin vida y con señales de violencia, el miércoles 21 de enero de 2015, en un sector despoblado, cerca a Bogotá.

La muerte del dirigente se produce en momentos en que en Colombia se multiplican las amenazas y la persecución política contra dirigentes populares de la oposición. A lo cual el Estado no es extraño, pues varios líderes de organizaciones y movimientos políticos alternativos se encuentran en el exilio, en prisión o desaparecidos y acribillados, en el peor de los casos, tal como ocurre con más de 70 dirigentes del Movimiento Marcha Patriótica, sin que el gobierno nacional dé respuestas suficientes, sensatas y efectivas, para el esclarecimiento y castigo de los crímenes, como para que termine el hostigamiento contra el movimiento popular.

Durante el desarrollo de las conversaciones de paz, desde la Mesa de La Habana, las FARC-EP hemos levantado la voz de protesta contra las amenazas cotidianas a defensores de derechos humanos, y contra toda esta situación de connivencia de la necrosada institucionalidad, con el paramilitarismo, lo cual sin duda se enmarca dentro del desenvolvimiento del terrorismo de Estado.

Las FARC-EP se solidarizan con el Congreso de los Pueblos y con el movimiento popular en general, señala este nuevo crimen como sumamente grave y de enorme afectación para la búsqueda de la paz, al tiempo que reprueban el guerrerismo de un régimen que se niega a tomar medidas prontas y eficaces de desescalamiento del conflicto, mientras asedia con sevicia la tregua unilateral declarada por nuestra organización, postergando con ello la posibilidad de un estadio de tranquilidad para las masas humildes que sufren las consecuencias de la guerra.

Exigimos respuestas claras y soluciones a los crímenes contra el movimiento popular colombiano.

Delegación de Paz de las FARC-EP

Prensa Rural

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