Grupo internacional de ambientalistas visita zona contaminada por Chevron
Expertos internacionales conocen el desastre socio-ambiental provocado por Chevron-Texaco en la Amazonía
En el marco del evento Encontrando el equilibrio en la Amazonía: Desarrollo económico, derechos humanos y justicia ambiental, la ministra del Ambiente, Lorena Tapia, junto con la embajadora de Ecuador en Estados Unidos, Nathalie Cely, acompañaron este lunes 28 de julio a un grupo internacional de expertos ambientales y a un equipo especializado en temas de Derechos Humanos y de la Naturaleza a realizar un recorrido en los pozos Aguarico 4 y Yuca 6 para comprobar la contaminación dejada por Chevron-Texaco en la Amazonía ecuatoriana.
Durante el recorrido, los especialistas pudieron observar los efectos de las prácticas antitécnicas de la multinacional sobre el agua, el suelo, la flora y la fauna de esa zona, mientras operaban los pozos Aguarico 4 y Yuca 6.
Paola Carrera, subsecretaria de Calidad Ambiental del Ministerio del Ambiente, quien solventó las preguntas técnicas, manifestó que en el Aguarico 4 el crudo regado en el suelo daba cuenta de que no se usaron geomembranas para evitar filtraciones a los acuíferos, no se construyeron diques de seguridad, no hubo gestión adecuada de derrames ni se construyeron cercos para evitar la caída de animales, entre otras faltas y omisiones que terminaron en un desastre socio-ambiental con nefastas consecuencias en la flora, fauna y en la salud de los habitantes.
La ministra Tapia resaltó la importancia que tiene la visita de esta delegación para el Ecuador, “queremos que a partir del conocimiento técnico se pueda validar a escala internacional los criterios de contaminación tanto ambiental como social, y así fortalecer el mensaje que el país lleva a todo el mundo relacionado con el desastre socio-ambiental que Chevron-Texaco dejó en nuestra tierra y en la vida de los habitantes de la Amazonía”.
Por su parte, la embajadora Cely manifestó que para ella ha sido muy doloroso y triste tener que observar las piscinas que no han sido remediadas por Texaco, “incluso he podido percibir en el ambiente el olor tan fuerte a petróleo, una cosa es leer los documentos técnicos y otra muy distinta ver que nuestra madre tierra ha sido tan contaminada”. Para la representante del Ecuador en Washington es indispensable que el país continúe con la lucha hasta lograr una verdadera justicia ambiental y social.