Ministro de Economía negocia en Francia la deuda con el Club de París
La Secretaría del Club de París aceptó los lineamientos de la Argentina
La delegación argentina que negociará con el Club de París viajó anoche hacia la capital francesa, sabiendo que la Secretaría del organismo aceptó los lineamientos propuestos en enero y ahora se pondrán sobre la mesa las opiniones individuales de cada uno de los países acreedores.
«Avanzamos decididamente hacia un acuerdo pero no definimos los plazos en los que hay que cerrar ni avanzamos más allá de los lineamientos presentados en enero. No voy porque haya un cierre seguro sino porque la presencia de la máxima autoridad del ministerio es una decisión política y le doy mucha importancia al contacto con los acreedores, con los que podemos tener avances importantes aunque no impliquen un acuerdo», indicó el titular de Economía, Axel Kicillof, en un breve diálogo con los periodistas acreditados en el Palacio de Hacienda.
El secretario de Finanzas Pablo López, colaboradores técnicos y los integrantes de la Unidad de Reestructuración de Deuda –Hernán Lorenzino y Adrián Cosentino– también formarán parte de las rondas que comenzarán el miércoles al mediodía. La fecha de regreso sería el jueves, pero según pudo saber Tiempo Argentino podría estirarse en caso de que los avances necesiten la presencia física del ministro en el lugar.
En concreto, la Secretaría tomó todos los lineamientos que dio el país en el verano –cuyos detalles se mantienen en confidencialidad– pero el trabajo técnico no está terminado, sobre todo teniendo en cuenta que ahora empezarán a pisar más los países acreedores en particular.
En el gobierno pretenden que lo que se firme no ponga en riesgo la balanza de pagos ni el programa de vencimientos que existe. Es decir, hacer lo posible por cumplir las necesidades de las otras partes pero sin perjudicar a la economía local. Por ejemplo, si piden un desembolso muy abultado y en un pago en 2016 la respuesta argentina será que no, ya que para ese año se esperan varios vencimientos de deuda que requerirán la atención del Tesoro.
Ahora se verá cuánto poder de contención tiene la Secretaría frente a los reclamos que cada uno de los 16 acreedores de la Argentina (de los 19 integrantes del organismo) puede presentar individualmente. Para cerrar cualquier tipo de acuerdo, el club tiene que recibir el visto bueno unánime.
Estados Unidos, Alemania y Japón aparecen como los que serán más difíciles de convencer en varios de los obstáculos a superar, como los medios de pago, el monto a pagar o el monitoreo de otros organismos internacionales.
Un detalle importante será si se formaliza desde alguna de las partes el pedido de incluir al Fondo Monetario Internacional (FMI) en el acuerdo. En Economía aseguran que en los lineamientos que se presentaron en enero con las ideas que maneja el país no se incluyó ni por sí ni por no la presencia del organismo de crédito, y que a pesar de esto la Secretaría dio su visto bueno.
«Son muy pocos los casos en los que el Fondo no intervino en los acuerdos con el Club, pero siempre fue porque los países en cuestión ya estaban dentro de un plan de monitoreo del FMI y este los llevaba de la mano a París para reprogramar como parte de un paquete más grande», indicaron fuentes oficiales consultadas por Tiempo Argentino.
Ahora la diferencia es que Argentina no tiene problemas con su próximo vencimiento de deuda, no necesita recurrir al Fondo Monetario en búsqueda de un apoyo financiero y no está en sus planes volver a tener una revisión del Artículo IV. No es una condición necesaria la presencia del FMI ni algo que el Club exija, pero sin embargo eso no significa que el tema no vaya a aparecer en este momento en el debate.
En ese contexto están todos los términos de la negociación, así como cualquier acreedor puede contradecir a la secretaría y reclamar al FMI también se pueden poner objeciones sobre los líneamientos generales del pago que considera posible el país. «Los tiempos se pueden precipitar pero depende de las dos partes. No vas a una negociación de este tipo diciendo de antemano lo que pedís ni limitando las exigencias. Es como poner fechas límites, no es lógico», indicaron las fuentes oficiales.
En el gobierno nacional saben que no están en condiciones de pagar todo el capital más los intereses de una sola vez (en total sumarían entre 9 y 10 mil millones de dólares), con lo que las opciones que quedan abiertas son las de pagar en cuotas en efectivo o mediante emisión de bonos, cuestión que en términos generales no haría mayor diferencia para el Tesoro.
En ese contexto se pondrían los ojos sobre los plazos ya que según el análisis técnico realizado en el Ministerio de Economía la deuda con el Club se compone por muchos contratos diferentes con estados soberanos y no se pueden esperar quitas como en otras ocasiones en las que la Argentina cerró un frente de conflicto externo. Así, en principio sólo se trata de una nueva instancia de negociación como se planteó a la vuelta del viaje que Kicillof realizó en enero. En esa ocasión lo primordial fue reactivar oficialmente una negociación que había estado muchos años inactiva y que se empezó a moverse a finales del año pasado. Ahora hasta dónde se podrá avanzar es un misterio.
La Argentina ya había tenido la intención de pagar esta deuda en 2008 en efectivo y con reservas internacionales, contexto en el que llegó a emitir un decreto que instaba al entonces ministro de Economía Carlos Fernández a avanzar en ese sentido. Sin embargo el anuncio no llegó a materializarse debido a la irrupción de la crisis financiera internacional, que 13 días después del anuncio se impuso con la quiebra del banco de inversión Lehman Brothers y el estallido de la burbuja de hipotecas de baja calificación en los Estados Unidos.
Con los ojos en el futuro y en el impacto de un posible acuerdo con el Club, en el gobierno nacional saben que varios países que integran el organismo tienen su atención puesta sobre la Argentina y no descartaría realizar nuevas inversiones con el escenario resuelto.
De hecho más de un hombre de negocios argentino le planteó directamente al Ministerio de Economía que tienen la certeza de que se les facilitaría la salida a los mercados internacionales y que esperan que se firme todo para empezar a planear llegadas de capitales en el mediano plazo. No es casualidad que en enero, antes de que el viaje de Kicillof a Francia apareciera oficialmente en los medios, el propio jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, se lo haya adelantado a nombres importantes del sector privado. En tanto, la salida al mercado de deuda del Estado Nacional no es algo que aparezca como un plan oficial, pero en el pensamiento del gobierno existe la idea de que ya se realizó esa tan mentada y especulada «salida al mercado» con lo que fue la emisión para cancelar la deuda con YPF, una empresa público-privada.
Presentan descargo en corte de EE.UU
El gobierno argentino presentará hoy ante la Corte Suprema de EEUU la respuesta a la posición de los fondos buitre, en la última instancia antes de la conferencia que el máximo tribunal llevará a cabo el 12 de junio próximo para definir si acepta o rechaza tratar el caso o si solicita opinión al gobierno de Barack Obama antes de emitir juicio sobre la cuestión. Inicialmente, el cronograma previsto para la presentación local era el lunes pasado. Pero la extensión de plazos concedida a los contrincantes de la Argentina en el denominado «juicio del siglo» –los fondos NML, de Elliott y perteneciente al Multimillonario Paul Singer, Aurelius y Olifant, que presentaron su opinión el pasado 7 de mayo–, derivó en un reacomodamiento de fechas para mañana martes, debido a que hoy se celebra en Estados Unidos el feriado por el Día de la Memoria. La atención ahora está puesta en el próximo 12 de junio, el mismo día que empieza el Mundial.
Historia y expectativas
Nacimiento. El capital de la deuda con el Club de París se contrajo en su mayor parte durante la última dictadura militar, entre 1976 y 1983 y forma parte de la herencia que debió reconocer el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
Lineamientos
La Secretaría del Club aceptó los lineamientos generales que la Argentina elevó en enero en el que se toma en consideración su capacidad de pago y no se hace ninguna mención a la participación del Fondo Monetario internacional.
Acreedores
Ahora se sentarán a la mesa los países acreedores y podrán poner objeciones individualmente, lo que puede llegar a plantear alguna complicación en el panorama ya que los acuerdos se firman con apoyo unánime de los integrantes del Club.
Acuerdo
En Economía calculan que los acuerdos de este tipo pueden llevar hasta ocho meses y viajan con la certeza de que se buscará avanzar, pero sin saber hasta dónde y si se logrará generar consenso o se necesitarán nuevas instancias de diálogo.
Nacimiento
Empresarios se acercaron al gobierno nacional para indicarles que un acuerdo con el Club podría generarle un acceso más ágil al mercado de deuda internacional, con lo que llegarían nuevas inversiones.