Con deudas pendientes, conmemoran 17 años del fin de la guerra civil

478

Guatemala conmemoró ayer 17 años de los Acuerdos que pusieron fin al conflicto armado (1960-96), con un llamado a la reconciliación en una sociedad golpeada por la inseguridad y dividida por el proceso de genocidio contra el exjefe de facto Efraín Ríos Montt.

“La reconciliación de la sociedad guatemalteca es quizá donde menos éxito hemos tenido”, dijo el presidente Otto Pérez, durante un acto en el Palacio Nacional de la Cultura, antigua sede de Gobierno donde se firmó el documento de paz, en el Centro Histórico de la capital.

El presidente Pérez, también signatario de los Acuerdos en 1996 en representación del Ejército, aseguró que la reconciliación nacional es “la tarea pendiente” después de finalizada la guerra.

“Asumo el compromiso de promover e impulsar durante el año 2014 espacios de concertación y encuentro que permitan profundizar en el conocimiento de la verdad histórica (…). Un entendimiento objetivo, desapasionado y sin rencores de la verdad que nos permitirá perdonarnos y reconciliarnos”, detalló el mandatario.

Este aniversario está empañado por un proceso abierto por genocidio contra el exdictador Efraín Ríos Montt (1982-83), quien enfrentará un nuevo juicio en enero de 2015, luego de que en mayo la Corte de Constitucionalidad anulara una sentencia por 80 años de prisión, dictada días antes por un tribunal nacional.

Paralelo al juicio de Ríos Montt, una sala de apelaciones aún tiene pendiente explicarle por qué se le negó a él una solicitud de amnistía, tal cual la solicitó.El exdictador fue acusado junto a su exjefe de inteligencia José Rodríguez, por la matanza de indígenas mayas ixiles durante su régimen de facto.

La Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) -integrada por cuatro facciones guerrilleras de izquierda-, firmó la paz junto con el Gobierno, el 29 de diciembre de 1996 y así se puso fin al conflicto armado interno.

Ese conflicto armado dejó más de 200 milmuertos o desaparecidos, el 93 por ciento de ellos bajo responsabilidad de las fuerzas del Estado, según un informe de la ONU.

El punto álgido de la intervención del mandatario fue cuando se refirió a que “hoy se cuestiona la vigencia de la amnistía y se han iniciado procesos judiciales. Serán las cortes las que reconocerán la validez, el alcance y la procedencia de los juicios. Las resoluciones definitivas nos darán certeza jurídica y deberán respetarse por todos, nacionales y extranjeros, respetando aunque no compartamos lo que las cortes resuelvan. Debemos construir espacios de perdón y de reconciliación”.

Antes del comienzo de la celebración el Consejo Ecuménico de Guatemala había hecho referencia a que es necesaria una reconciliación sincera y durable.  El signatario de la paz y excomandante guerrillero, Ricardo Rosales, pidió autocrítica y responsabilidad a los propios signatarios como él.

“La tarea que nos corresponde a los signatarios es comprometernos con la construcción de la paz y no estar lamentándonos y echando responsabilidades a terceros por lo que no se ha cumplido. Los primeros que tenemos responsabilidad somos nosotros y eso lo debemos de asumir crítica y autocríticamente. Es la única manera de salvar la paz”.

 

El cambio de la rosa

Los encargados de cambiar la rosa de la estatua que preside el Atrio de la Paz fueron María Pacheco, representante de Quiej de los bosques, compañía encargada de potenciar empresas rurales en el país, y Fausto Chalí, del grupo artístico Xajil.

 

La negociación

El Gobierno y los integrantes de la guerrilla  firmaron 12 acuerdos. Siendo estos: el de Democratización para la Búsqueda de la Paz, el Acuerdo global sobre derechos humanos, el de Reasentamiento de Poblaciones Desarraigadas.  También el de Identidad y Derechos de los Pueblos Indígenas;  el Establecimiento de la comisión para el Esclarecimiento Histórico, Acuerdo  sobre Aspectos Socioeconómicos y Situación Agraria; Fortalecimiento del poder civil y función del Ejército; Definitivo Cese al fuego, Reformas Constitucionales y Régimen Electoral.  La incorporación de la URNG a la legalidad; Cronograma y el de la Paz.

 

Cumplimiento de los Acuerdos de Paz sigue ausente de la agenda de nación

A 17 años de la firmas de los Acuerdos de Paz, las metas suscritas en dichos acuerdos siguen afuera de la agenda nación de los gobernantes, aseguran analistas, quienes ven poco avance en la búsqueda de la igualdad y justicia social del país, pues hasta ahora muchas de las reformas políticas, legales y constitucionales planteadas no se han cumplido.

El 29 de diciembre de 1996 culminó la suscripción de los Acuerdos de Paz, doce documentos que contemplaban el final del conflicto armado interno, la reconciliación de la sociedad, resarcimiento a las víctimas y el establecer un Comisión para el esclarecimiento histórico de las violaciones de los derechos humanos que se cometieron en esta época

Los Acuerdos también establecieron reformas sistema socioeconómico, agrario y político y electoral, así como el reconocimiento de la identidad y derechos de pueblos indígenas y fortalecimiento a los derechos Civil y función del Ejército en una sociedad democrática, para hacer de Guatemala un Estado próspero, incluyente y democrático.

POCO AVANCE

De acuerdo a Nery Rodenas, director ejecutivo de la oficina de derechos humanos del arzobispado de Guatemala (ODHAG), se percibe un pocos avances en el cumplimiento de los Acuerdos de Paz, en tanto que una gran parte de la población guatemalteca vive en condiciones de pobreza y marginación.

Rodenas comentó que los objetivos con más retraso son los planteamientos para realizar las reformas legales y constitucionales, que se debían hacer para cambiar las condiciones de vida desiguales en el país y añadió que hasta el momento no existen reformas constitucionales que puedan reconocer los demás idiomas mayas, lo cual es parte del acuerdo de la identidad indígena.

El representante de la ODHAG agregó que tampoco se han dado reformas que mejoren el sistema electoral en el país o el sistema de recaudación tributaria, pues las que ha habido no han sido suficiente, pues no ha generados cambios en el sistema y que tampoco los gobiernos que las proponen han logrado las metas que se proponen al hacer los cambios, como es el caso de la Ley de Actualización Fiscal aprobada el año pasado.

SE DEBEN RETOMAR LOS ACUERDOS

Vinicio Cerezo, ex presidente de la nación y presidente de la Fundación Esquipulas para la integración Centroamericana, indicó  que el cumplimiento de los Acuerdos de Paz, igual que la equidad y la justicia social en el país, son parte de la agenda pendiente que tienen que resolver los dirigentes políticos y la sociedad.

Esto porque las causas que motivaron los 36 años de guerra interna aún prevalecen en el país.

Cerezo señaló que se debe enfrentar un nuevo modelo de desarrollo al que en la fundación de Esquipulas le llaman: “ Esquipulas  II”, el cual resuelva no sólo el problema del crecimiento económico, sino que el problema de la distribución equitativa de las oportunidades y de la riqueza en el país, con el objetivo de provocar y conseguir los recursos suficientes y necesarios para brindar seguridad ciudadana, mejorar el sistema de justicia y buscar un acuerdo político que empuje el cumplimiento de los Acuerdos de Paz.

 

http://www.lahora.com.gt/index.php/nacional/guatemala/actualidad/188893-cumplimiento-de-los-acuerdos-de-paz-sigue-ausente-de-la-agenda-de-nacion-

 

Presidente Otto Pérez Molina aboga por aplicar amnistía

El presidente Otto Pérez Molina afirmó ayer que la aplicación de una amnistía que facilite revelar la verdad histórica sobre el conflicto armado interno, “sin temor a procesos judiciales” para quienes lo protagonizaron, es necesaria para la reconciliación del país, puesto que fue una condición de ambos bandos para poner fin a 36 años de guerra.

“Quienes participamos en la negociación —de los acuerdos de paz— sabemos que la amnistía era necesaria para terminar el enfrentamiento armado, pues ni los insurgentes ni los contrainsurgentes hubiesen firmado la paz sin amnistía”, expuso el mandatario, durante su discurso por la conmemoración de los 17 años de la firma de los acuerdos, en el Palacio Nacional de la Cultura.

Pérez Molina, quien fue signatario de los acuerdos de paz, en representación del Ejército agregó: “Hoy se cuestiona la vigencia de la amnistía”, pero “serán las cortes las que resuelvan su validez”, por lo cual se deben respetar los fallos judiciales. El gobernante puntualizó que la reconciliación es el objetivo de ese pacto en el que menos se ha avanzado, y que la reforma del Estado aún está en proceso.

Compromiso

Ricardo Rosales Román, signatario de los acuerdos como representante de la insurgencia, precisó que los firmantes deben comprometerse a construir la paz y no lamentarse y culpar a terceros por lo que no se ha hecho.

“Nos corresponde tratar de entender el objetivo y la naturaleza del proceso de paz, que no solo era poner fin al enfrentamiento armado interno, sino erradicar las causas que lo originaron”, indicó.

Antes del acto, en un hotel de la zona 1, el Observatorio Indígena calificó de nulo el avance de los acuerdos de paz porque continúan la exclusión, el racismo y las injusticias.

Mario Itzep, miembro del Observatorio, criticó el aumento de la criminalización de los pueblos indígenas y de la violencia, la cual considera “mayor que durante el conflicto armado”.

Armas están en el país

El presidente Otto Pérez Molina afirmó ayer  después de un acto efectuado en la Brigada Mariscal Zavala  que más del 50%  de las armas que compró el Ministerio de Gobernación  están en el país, y que en enero habrá cambios en el gabinete de Gobierno, aunque evitó detalles.

 

http://www.prensalibre.com/noticias/politica/Perez-aboga-aplicar-amnistia_0_1057094297.html

Más notas sobre el tema