El candidato presidencial del PRO presentó oficialmente su programa de gobierno, con énfasis en establecer como derechos universales garantizados la educación, la salud, el sistema de pensiones y la vivienda.
Dichas propuestas están contenidas en un documento que contempla 24 áreas, entre ellas, reformas políticas, nueva Constitución, diversidad sexual, descentralización y trabajo.
“Aquí tienen un plan de gobierno que Bachelet no puede presentar y que Matthei no puede presentar”, dijo Enríquez-Ominami.
En el texto, el abanderado propone una serie de modificaciones al sistema político. Entre ellas, reemplazar el presidencialismo por un régimen semipresidencial con un Parlamento unicameral.
En materia de diversidad sexual, Enríquez-Ominami promueve que se tramite el matrimonio igualitario, “que se ajuste a estándares internacionales de derechos humanos” y, en paralelo, el Acuerdo de Vida en Pareja impulsado por el gobierno de Piñera. Aunque señala que este último es imperfecto y se le deben hacer enmiendas. “Algunos piensan que el AVP es el hermano pobre del matrimonio igualitario, sin ponderar que ambos apuntan a necesidades diferentes”, dice el texto.
En educación, el candidato plantea terminar con el financiamiento compartido presente en los colegios particulares subvencionados y aumentar el aporte del Estado para este fin. Según se lee en el texto, “la subvención será por matrícula y no por asistencia”. Además, propone cambiar el Simce por un Sistema de Evaluación Multidimensional y Multifuncional (Semm) que mida, entre otros ítems, el desempeño de los docentes, los logros “cognitivos, actitudes, valores y normas de los estudiantes”, y la evaluación de los directivos de las instituciones escolares.
