Orle Solís, candidato presidencial por el partido Democracia Cristiana: “Mi propuesta se fundamenta en el apoyo a la empresa familiar”

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-¿En qué basa su campaña política?

Para nuestro partido, las personas son el principio, el centro y el fin de la humanidad y en eso se enmarcan nuestras propuestas. Uno de los principales objetivos, si ganamos las elecciones, es generar empleo decente.

-¿Cómo visualiza esta campaña tomando en cuenta que nueve partidos participan en la contienda?

Como candidato, entiendo que esto significa que hay que trabajar más, pues esta vez no son cinco, sino nueve partidos, independientemente de la unión de dos de ellos. Estas elecciones no serán iguales a las anteriores. Los nuevos candidatos a la presidencia, a las alcaldías municipales y a diputados van a hacer nuevas propuestas sobre las cuales hay que trabajar más porque la gente se encuentra desilusionada y trastornada, ya que la pobreza se ha incrementado.

El 66% es pobre a escala nacional y 58% está en la pobreza extrema, o sea en la indigencia y en la miseria; todas estas son causas para que el pueblo pueda tomar una determinación diferente. Por eso, los candidatos debemos ser más realistas sobre la situación del país. El pueblo está cansado de tantas promesas que históricamente se han hecho y no se cumplen. Nuestras promesas son realizables y viables. Todo mundo habla de educación, salud, vivienda, empleo y todo lo relacionado con las necesidades del país, pero es necesario saber dónde estamos para que de ahí partamos a hacer las propuestas concretas.

-¿Cómo espera convencer a la gente de que vote por la Democracia Cristiana?

Haciendo propuestas realizables, confiables y factibles. Nuestras propuestas se fundamentan en que es necesario el apoyo total a la micro, pequeña y mediana empresas y sobre todo a la empresa familiar, porque la desintegración familiar es la principal causa del caos en Honduras.

A causa de la desintegración familiar vemos la migración del campo a la ciudad, la cual ha formado nudos de miseria en las principales ciudades del país. Vemos deserción escolar, emigración de los ciudadanos a Estados Unidos en busca de mejor vida. Esto es lo que está sucediendo

¿Cómo vamos a proponer que nos den el voto?

Pues mejorando aquellas instituciones que están dirigiendo los destinos del país para la agricultura, la ganadería y el aprovechamiento de nuestros recursos naturales; por ejemplo, Secretaría de Agricultura y Ganadería, Banco Nacional de Desarrollo Agrícola, Secretaría de Industria y Comercio, Banasupro, Instituto Hondureño de Mercadeo Agrícola, Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente, Instituto de Conservación Forestal, porque vemos que no dan resultados positivos para Honduras.

Creemos que es necesario revisar estas instituciones y el trabajo que están haciendo.

-¿Cómo combatiría la delincuencia?

Para que haya generación de empleo decente es necesario traer la inversión extranjera y para que venga es necesario brindar seguridad jurídica. Se creó la Dirección Nacional de Investigación y Evaluación de la Policía, pero no nos ha dado los resultados que esperábamos. Sigue la Policía cometiendo irregularidades y no se ha depurado. De ahí nace la necesidad de crear la Policía Tigre, la Militar y la Comunitaria, cada una con 5,000 agentes. Creemos que este proyecto se dirige a combatir la delincuencia. No podemos adelantarnos a decir los resultados porque se están sentando los parámetros.

-Afirma que apoyará a la micro, pequeña y mediana empresas. ¿Cómo lo hará?

Una de nuestras propuestas principales es generar empleo decente. Para lograr esto es necesario atraer la inversión extranjera. Apoyaremos a la pequeña, mediana y gran empresa inyectándoles capital para que puedan crecer y de esta forma generar más empleo.

-¿Qué propone para hacer más efectivo el sistema de educación?

Descentralizar la educación, que los directores departamentales sigan con una política descentralizada, con autonomía para no tener que estar dependiendo del ministro a nivel nacional, sino que en los departamentos se conformen órganos o juntas evaluadoras de la educación y de los maestros, que haya transparencia y responsabilidad. Lo primordial es la descentralización, que haya autonomía en los departamentos.

-¿Cómo piensa sanear la economía del país?

Creemos que los entes controladores deben actuar con mayor rapidez. La situación financiera de Honduras es grave. El déficit fiscal se dispara, el producto interno bruto no anda bien, el desempleo es alto.

Creemos que debe haber una redirección de todas las actividades administrativas que este gobierno futuro va a tener y se debe hacer enmarcado en la responsabilidad y en la voluntad, cosas que deben caracterizar a todo buen hondureño. Tenemos claro que la situación no va a ser fácil, sobre todo en seguridad. Podríamos fortalecer la economía muy fácilmente: eliminando la corrupción.

-¿Qué les ha faltado a los demócratas cristianos para ganar la presidencia de Honduras?

Soy diputado desde hace tres períodos consecutivos y eso es porque hemos llevado el desarrollo al departamento que representamos, sobre todo en la parte de educación. Rompimos el bipartidismo en la fórmula de diputados del departamento de Olancho. Hoy tenemos el reto de romper el bipartidismo en la fórmula presidencial.

Ahí nos dirigimos como partido, a llegar al poder. Porque hemos sacado pocos diputados, alcaldes, regidores y no hemos podido llegar a la presidencia de la República se nos llama el partido de las bisagras, que está acá y allá, pero no es así.

Le hemos apostado a la democracia y nos hemos sostenido. Hemos ayudado a resolver la crisis; sin embargo venimos del sector popular. Fui dirigente campesino en 1975. Íbamos con gran fuerza, pero muchas tragedias nos detuvieron. Nos hemos rehabilitado mucho desde el Congreso Nacional y otras dependencias, no ha habido ningún funcionario de nuestro partido que haya sido separado o cuestionado sobre su gestión. Creemos que podemos llegar a dar sorpresas en este próximo torneo electoral.

-¿Hará concentraciones políticas?

Claro que sí. Estamos en estos momentos realizando visitas y trabajando en los departamentos, pero lo haremos de la mejor manera para no incurrir en gastos como otros partidos. La verdad es que se gasta más en publicidad electoral que en combatir la pobreza extrema.

-En sus visitas a los departamentos, ¿cuál ha detectado que es la mayor preocupación de la gente?

La falta de empleo y la pobreza. Se debe fortalecer el rubro del café y el cultivo de frutas para ayudar a la gente de los pueblos. Hay municipios que tienen un futuro incierto por la crisis en que se encuentran. Lo que ha hecho falta en Honduras es voluntad para hacer las cosas.

-¿Estaría de acuerdo con una Constituyente?

Honduras necesita cambios y no podemos someternos a ideas y conceptos de hace más de 30 años. Los cambios deben hacerse, pero enmarcados en lo que establece la Constitución.

-¿Cree que todavía es posible rescatar a Hondutel y a la Enee?

Debemos salvar a la Empresa Nacional de Energía Eléctrica. En Costa Rica, los productores de energía eólica se convirtieron en empresarios a través de cooperativas. En Honduras es un caso especial. Para salvar a la Enee tenemos que involucrar al sindicato y apostar a los generadores de energía renovable, hídrica o eólica o biomasa. Creo que tendrían capacidad de convertirse en buenos generadores de energía por el bien de las comunidades, que se olvide eso del mercantilismo.

El problema de la Enee es que hay más de 3,000 millones de lempiras de deuda por pago de factura y se habla de que hay que ir a cortarles la luz a empresarios, pero no lo hacen, y al pobre por un mes de atraso se la quitan. Esas son las desigualdades que hay que corregir.

-¿Con cuál modelo económico se identifica?

Con la economía social de mercado, siempre respetando la libre empresa.

-¿Considera que puede ocurrir alguna irregularidad en el proceso electoral de noviembre?

Hasta este momento creemos que no. Pensamos que con el nuevo sistema de trasmisión de datos, que será mediante escáner, no como el anterior, que era por actas, se van a conocer los resultados antes de que llegue el acta. Creemos que este proceso es mejor que el anterior por la transparencia que representa.

Antes se hacía un acta general de las aldeas y se mandaba antes al Tribunal Supremo Electoral. Esto se prestaba a la manipulación de los resultados. Ahora, además de contabilizar acta por acta, se contabilizará la trasmisión o los datos que den todos los centros de votación.