Honduras: comienza oficialmente la campaña para las presidenciales de noviembre
Hoy se inicia la novena campaña consecutiva desde 1981 con la novedad de que participan, por primera vez, nueve partidos políticos.
El pueblo hondureño será “bombardeado” a partir de hoy con una intensa y sugestiva propaganda electoral que protagonizarán nueve partidos políticos que por primera vez en la historia se disputan casi tres mil cargos de elección popular.La campaña electoral se prolongará hasta el 19 de noviembre, cinco días antes de las elecciones generales, y será transmitida, mediante campos pagados, a través de la prensa hablada, escrita, televisada y hasta redes sociales.Serán tres meses de campaña, de petición directa del voto, a través de canciones pegajosas y de las más variadas propuestas de gobierno que se supone sustituirán los insultos, las diatribas, el odio y la intimidación, según se comprometieron los políticos al suscribir, la noche del miércoles de la semana anterior, el “Compromiso de garantías mínimas para la ética y la transparencia electoral”. Este compromiso los obliga a impulsar una campaña “basada en principios éticos, en la transparencia y en el respeto de la Constitución y la legislación electoral”.“Se rechazará la promoción de toda forma de odio, violencia verbal o física, antes, durante y después de las elecciones”, dice el Pacto. Luego advierte: “Evitar el uso de los recursos públicos a nivel nacional, departamental o local, a favor o en contra de cualquier organización política o candidato, evitando el proselitismo en los actos del Estado o en el manejo de los programas sociales”.La novena campaña La que viene será la novena campaña propagandística que vive el pueblo hondureño, de manera consecutiva, a partir de 1981, año que marca el retorno de los períodos presidenciales tras veinte años de regímenes militares. También hay que incluir la propaganda que los partidos Nacional, Liberal y Pinu promovieron en 1980, con motivo del llamado a elecciones para instalar una Asamblea Nacional Constituyente.Los políticos con menos recursos económicos, o que no tienen acceso a los medios por varias razones, utilizarán otras formas para pedir el voto a los 5.3 millones de hondureños aptos para ejercer el sufragio.Estos medios van desde las redes sociales, mensajitos, llamadas telefónicas, “stickers”, visitas casa por casa, carros con altoparlantes, vallas publicitarias, afiches, calendarios, pancartas, gorras, sombreros, agitación de banderas, caravanas y concentraciones, entre mucha otras. Habrá muchos que continuarán con sus obras sociales y dotación de comida a los electores que viven bajo condiciones de pobreza y extrema pobreza aprovechándose de las necesidades que los mismos políticos no han podido resolver. Persecución de electores Los 27 mil candidatos a cargos de elección que se postulan por los nueve partidos políticos ya tienen un mapeo que ubica a los 5.3 millones de ciudadanos que, según el censo preliminar (puede subir o bajar la cantidad una vez que concluya la depuración), están aptos para ejercer el sufragio. Será ahí donde redoblarán sus esfuerzos para convencer a esta masa poblacional acostumbrada a recibir sus “promesas” cada vez que hay elecciones.Un 70 por ciento de los electores vive en las 72 ciudades más importantes del país, la mayoría de las cuales constituyen el corredor central. Entre estas ciudades están Choluteca, San Marcos de Colón, San Lorenzo, Nacaome, Tegucigalpa, Comayagua, San Pedro Sula, Puerto Cortés, Tela, Siguatepeque, El Progreso, La Ceiba, La Lima, La Paz y Santa Bárbara, entre otras.Mujeres, hombres y jóvenes Un 52 por ciento del padrón electoral lo forman mujeres y un 48 por ciento hombres, de manera que los mensajes de los políticos deberán ser específicos y estratégicos. No deberán excluir, obviamente, a los jóvenes, considerando que un 60 por ciento de la población es menor de 30 años.La cultura política del electorado nacional ha tenido una poderosa influencia, a lo largo de las décadas, a la hora de inclinar su voto a favor de uno u otro candidato o partido. En esto, según los entendidos, ha tenido mucho que ver el promedio de escolaridad de la población que no pasa de los cinco años.La Ley Electoral La propaganda es regulada por la Ley Electoral y de las Organizaciones Políticas la cual, en su artículo 144, precisa que “la propaganda electoral solo podrá ser realizada dentro de los cincuenta días calendario anteriores a la práctica de las elecciones internas y primarias y noventa días calendario anteriores a la celebración de las elecciones generales”.Quienes pidieron el voto antes de este período se expusieron a una multa de cien a 500 salarios mínimos, pero hasta la fecha el Tribunal Supremo Electoral (TSE) no ha divulgado ningún informe.“Quienes contraten propaganda electoral serán responsables de su contenido”, dice la Ley Electoral al tiempo que advierte que deberá “mantenerse dentro de los límites de la moral y la ética”.Hay una prohibición expresa a la propaganda anónima, la que promueva el abstencionismo electoral y la que irrespete las instituciones políticas y la dignidad de las personas. “Los propietarios, directores o gerentes de imprentas, medios de comunicación, cines o empresas publicitarias serán responsables por la impresión, transmisión o publicación de la propaganda anónima”. Quienes violen este apartado de la ley serán sancionados con una multa de 40 a 200 salarios mínimos y si fuera reincidencia “se procederá a la cancelación del permiso de operación”. Lo que no se puede hacerLa Ley Electoral prohíbe “fijar o pintar carteles, rótulos, dibujos u otros anuncios similares en edificios, mobiliario o equipo utilizado por o de propiedad del Estado, monumentos públicos, templos religiosos, señales de tránsito, rótulos y demás objetos en las vías públicas u otros espacios dentro del derecho de vía”.Además, no podrán “exhortar a los ciudadanos a que apoyen, se adhieran, o separen de los partidos políticos, alianzas, movimientos internos o candidaturas independientes, valiéndose de creencias o motivos religiosos”.Está prohibido, además, fijar propaganda sobre la ya colocada sobre lugares autorizados, obstaculizar el tránsito o la visión de personas o de vehículos y la propaganda política impresa sin pie de imprenta. Los políticos que no cumplan con estas disposiciones serán sancionados con una multa que podría ir de cien a 250 salarios mínimos. La propaganda electoral culminará cinco días antes de las elecciones generales. A partir de ese momento quedarán prohibidas las manifestaciones públicas, todo tipo de propaganda política, la divulgación de resultados totales o parciales de encuestas o sondeos de opinión pública, material impreso, audiovisual, electrónico o radiofónico magnético.Los partidos políticos, en estos cinco días previo a los comicios, solo podrán hacer uso de los medios de comunicación “para explicar, divulgar y difundir sus programas de gobierno”. La multa para quienes no cumplan con este cometido es alta: 40 salarios mínimos, es decir, 280 mil lempiras. El financiamiento Los partidos políticos presentaron sus estados financieros ante el TSE previo al inicio de esta campaña, pero no precisaron cuánto van a invertir en el proselitismo político.Este presupuesto sigue siendo el gran misterio de todas las campañas quizás porque la Ley Electoral no es exigente. Los partidos con mayor capacidad económica demostrarán en estos tres meses de lo que son capaces financieramente. Los partidos reciben aportaciones privadas que no dan cuenta a la opinión pública. Los funcionarios electorales exhortaron a los partidos a presentar propuestas creíbles y realizables a la población hondureña. “Esperamos que sea una campaña obviamente democrática, que los candidatos aprovechen las circunstancias para promover la solución de los temas torales que el país está pidiendo”, afirmó el magistrado Enrique Ortez Sequeira. “Espero una campaña de altura, juego limpio, que haya respeto, tolerancia, propuestas, que le ayudemos a Honduras”, expresó, por su parte, el también magistrado Saúl Escobar.Mientras, el magistrado presidente del ente colegiado, David Matamoros, recordó a los medios de comunicación que están obligados a dar la pauta en caso de que el TSE lo requiera.Para hacer concentraciones los partidos deberán tramitar permiso ante el TSE y “no se podrán hacer dos concentraciones el mismo día en el mismo poblado”, recordó.Lo que no permite la ley electoral “Se prohíbe la propaganda anónima y la que promueva el abstencionismo electoral, el incumplimiento de la ley o el irrespeto a las instituciones políticas y la dignidad de las personas.Los propietarios, directores o gerentes de imprentas, medios de comunicación, cines o empresas publicitarias, serán responsables por la impresión, transmisión o publicación de la propaganda anónima.A los infractores de lo establecido en este artículo se les impondrá una multa de cuarenta (40) a doscientos (200) salarios mínimos. En caso de reincidencia se procederá a la cancelación del permiso de operación.Propaganda política prohibida. Queda prohibido en todo tiempo: 1) Fijar o pintar carteles, rótulos, dibujos u otros anuncios similares en edificios, mobiliario o equipo utilizado por o de propiedad del Estado y demás objetos en las vías públicas u otros espacios dentro del derecho de vía.2). Exhortar a los ciudadanos a que apoyen, se adhieran o separen de los partidos políticos, alianzas, movimientos internos o candidaturas independientes; valiéndose de creencias o motivos religiosos. 3). Fijar propaganda sobre la ya colocada en lugares autorizados. 4).- Obstaculizar el tránsito o la visión de personas o de vehículos.5.) La propaganda política impresa sin pie de imprenta.Los infractores serán sancionados con multa de cien a 250 salarios mínimos.