Artistas despidieron al músico argentino Eduardo Falú y destacaron su legado

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Artistas procedentes de diversas orillas y lenguajes como Teresa Parodi, Adrián Iaies, Juan Quintero y Florencia Dávalos, reflexionaron sobre el valor de la la obra del guitarrista y compositor fallecido a los 90 años.

Entre el pulso emocional y el examen de su legado, los músicos eligieron diferentes maneras para asumir la muerte del guitarrista salteño, que fue despedido esta tarde en el cementerio de la Chacarita, adonde concurrieron músicos y artistas para un último adiós.

La correntina Parodi apeló a su propia caligrafía como compositora y difundió algunos versos: «Hay un silencio más entre nosotros/Una guitarra que se queda sola/pero hay un canto que se sube al viento/Y cruza lado a lado la memoria».

«(…) No hay olvido maestro, sí certeza/Hay temblor en el alma, hay pena honda/una voz, un paisaje de recuerdos/y el amor de su pueblo que lo nombra», escribió.

Por su parte, el guitarrista tucumano Juan Quintero relató a Télam su forma de trabajar, desde el instrumento con el que Falú dejó huellas, el legado de su obra.

«Me he puesto a sacar nota por nota las obras de Falú y me he dado cuenta que físicamente no cuajás, no es algo conceptual: está hecho para ese físico, para esa voz y yo tengo que acomodarlo a mi cuerpo», explicó.

«Pero precisamente en dificultad comienzan a despertarse ideas. Esas cosas ocurren siempre cuando abordás obras tan personales como la de cualquiera de los dos Falú», apuntó.

Desde la emoción reaccionó Florencia Dávalos, hija del gigante poeta salteño Jaime Dávalos, con quien el fallecido guitarrista compuso, por ejemplo, «Tonada del viejo amor», «Trago de sombra», «Milonga del alucinado» y «Zamba de la Candelaria».

«Una parte de mi padre se va con su amigo y no puedo evitar una inmensa tristeza», escribió en las redes sociales.

Desde otras orillas musicales, el pianista de jazz Adrián Iaies enfatizó justamente el valor artístico y el legado de esa sociedad artística.

«Hay palabras larguísimas que son de una sola sílaba. Es el caso de Faludávalos, Troilomanzi, Leguizamóncastilla, Cobiancadícamo, Lennonmccartney, Legrandbergman, Viniciusjobim, Hammersteinkern, Pageplant, y no tantas más», reflexionó.

«Mi vida, al menos esa parte de mi vida que no puede quejarse de lo bien que le ha ido y le va tiene una deuda con cada una de esas sílabas, cada una una marca registrada. Un sello inconfundible», agregó.

Otro exponente de la guitarra, Osvaldo Burucuá, sentenció que «como ocurre con los grandes de verdad, la huella de don Eduardo Falú no la terminaremos de recorrer».

En un mismo sentido se pronunció el armoniquista rosarino Franco Luciani, que tiene en su repertorio el bailecito «Sirviñaku», de la dupla Falú-Dávalos.

«Nuestra música no sería la misma sin sus obras. Creo que hasta yo mismo», concluyó.

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