La seducción de Centroamérica ante los gigantes pasos de China en la región
Centroamérica es una región pequeña en territorio continental pero con una amplia riqueza en recursos naturales y biodiversidad, que la convierten en una zona muy apetecible para un sinfín de actividades: desde la explotación de energías renovables hasta el establecimiento de centros comerciales.
Detrás de esa pequeñez territorial, se oyen los pasos de un gigante insaciable, la República Popular de China que ha puesto sus ojos en Centroamérica y parece no descansar hasta incursionar de lleno en nuestra región.
Proyectos como el Canal Interoceánico en Nicaragua, la Refinería de Petróleo en Limón de Costa Rica e intenciones de gestar proyectos en Guatemala y Honduras, son solo algunas de las últimas intenciones de extender operaciones chinas en el istmo centroamericano.
¿Por qué Centroamérica -y Costa Rica- componen una región apetecible y seductora para la expansión de negocios chinos?
La analista internacional, Michelle Chinchilla, considera que nuestra región, pese a ser muy pequeña en territorio, posee un potencial de crecimiento económico y una posibilidad conjunta que le permite a China realizar negocios con los gobiernos de los países pequeños.
“Siempre buscan países más fuertes, en este caso están buscando países pequeños, con potencial, donde hayan gobiernos con los que se puedan hacer negocios, contratos o concesiones (…) una de las ventajas de las inversiones chinas es que generan producciones a muy bajo costo, entonces eso genera un efecto directo en las transnacionales que no pueden competir contra China